“Es la única forma de vivir en libertad”. Carlos apela a esa palabra tan usada en los últimos tiempos para describir su vida a bordo de un motorhome. Mientras camina por la arena húmeda de la playa de Reta, agrega: “Tenés que tener una compañía que sienta lo mismo que vos. A mi mujer le fascina por eso hace más de 30 años que andamos al garete por toda Sudamérica”. El balneario más al sur, junto a un camping, es el elegido por los viajeros. Allí se estacionan prolijamente decenas de casas rodantes y se conforma una comunidad con costumbres afines y mucha solidaridad.
La Argentina es un país perfecto para viajar en motorhome. Su tamaño, diversidad y gran variedad de lugares naturales, lo hacen irresistible para recorrerlo. Entre los viajeros confeccionan un mapa colaborativo con datos clave para que el trayecto sea seguro y placentero. Dónde dormir, dónde abastecerse de agua segura, y por dónde transitar sobre rutas en buen estado.
En el país hay varias fábricas de casa rodantes y de alquiler, pero en Tigre existe un emprendimiento muy particular. TikTok fue el vehículo, y la pandemia una oportunidad, para que Gigi Motorhome sea una invitación al sueño de vivir sobre ruedas. Aylin Lescano fue la autora intelectual y su padre Luis, el autor material. En aquel tiempo de encierro decidieron pegar un volantazo y tomar por otra ruta. De profesión herrero, Luis puso en venta su casa para crear una fábrica que se dedica a reciclar micros escolares y viejos ómnibus.
Los Lescano siempre fueron una familia rodante. Luis construyó con sus propias manos el primer motorhome, con el que rodaron por todas las rutas argentinas. A comienzos de 2020 se alinearon los planetas. Un amigo de Luis le pidió que recicle un viejo micro. Inmediatamente llegó la pandemia y el mundo se cerró. Pero para Aylin y Luis se abrió una oportunidad única: ponerle motor y ruedas al sueño de mucha gente. “En diciembre de 2019 –recuerda Aylin– me recibí de licenciada en Ciencias Sociales y tenía un trabajo administrativo. En mis ratos libres comencé a ayudar a mi papá, mientras compartía el avance de los trabajos en las redes sociales. Primero en Instragram y luego en TikTok, que fue la gran vidriera y el origen de Gigi Motorhome”.
Aylin reconoce que las redes fueron uno de los motores del emprendimiento. Los videos comenzaron a tener cientos de miles de visualizaciones, y comenzaron a llegar los clientes, Mientras eso ocurría, Aylin aprendía nuevas habilidades como herrería, carpintería, electricidad y se enamoraba de los micros. Primero, el proceso de desguace y luego, el armado personalizado de cada unidad. “El cliente nos cuenta qué desea y se lo armamos. Hay quienes quieren un dormitorio y cocina grande, otros con camas para 4, 6 u 8 personas con más ventanas. Hacemos un trabajo muy artesanal. Cuando el trabajo está finalizado hay otra tarea que Gigi Motorhome hace y que no es menos importante. Se trata de acompañar al cliente al ingreso de vivir en movimiento. Aylin tiene en su cabeza un manual de esa aventura: ”Hay que entender que, si bien uno vive como en casa, un motorhome no es una casa. El consejo que siempre doy es que hablen y se comuniquen con gente que ya tiene una casa rodante. Hay que entender que es un vehículo que tiene movimiento, que sufre torsión y entonces hay que usar materiales flexibles y livianos. Por ejemplo, nos han pedidos ventanas como las que se instalan en los hogares y eso no se puede, o pisos con cerámicas que, lógicamente, se van a quebrar en el primer viaje. Entonces, sobre todo, hay que escuchar las recomendaciones de las personas que vivieron esta experiencia. No está demás adquirir algunos conocimientos de mecánica y llevar siempre una caja de herramientas bien nutrida. Nunca sabes cuándo te podés quedar tirado en la ruta“. Pero Aylin tiene otros consejos para los clientes viajeros, y es que a bordo de un motorhome los tiempos son otros, se viaja más despacio, porque el vehículo es más lento y eso implica tener más paciencia, andar relajado para disfrutar y más ligeros de equipaje. ”Siempre tienen que quedar registros de los lugares que visitamos, pero eso los imanes y recuerdos de cada lugar tienen que estar presentes en los ambientes del motorhome“.
Ahora los Lescano tienen una hoja de ruta más ambiciosa y planean construir una flota de Gigi Motorhome para alquiler. Ya están avanzando en la primera unidad que fue transporte escolar y que ya cuenta con diseño para cuatro personas. La tecnología que permite el home office abrió la posibilidad para que muchos puedan seguir conectados bien lejos de sus trabajos. Y poder hacerlo con diferentes paisajes todos los días sería algo así como una vida ideal. Por las consultas que reciben entienden que existe un mercado para que el alquiler sea el primer paso, para luego tener motorhome propio.
Las redes son un campo de batalla
La fantasía de padre e hija era tener un gran galpón donde instalar su taller y contratar gente para conformar el equipo Gigi Motorhome. Luis decidió vender la casa familar para que aquella fantasía pase a ser una realidad, y así comenzó todo. Aylin empezó a subir videos en las redes con los progresos en los distintos trabajos, con su voz narrando en off, y siempre con alguna de sus mascotas como protagonista secundaria. “En el taller se realizan oficios tradicionalmente considerados masculinos —admite Aylin—, como carpintería, herrería, electricidad, plomería. Y en los videos aparecen muchos comentarios negativos, discriminatorios o machistas. Alguien escribió que mi lugar era la cocina, un comentario arcaico, pero cómo son las redes y ya no me afectan. Es parte del crecimiento, Cuando subo un video que se hace viral por un lado me pongo contenta, y por otro lado sé que va a venir con una oleada de comentarios negativos. Sí, me subestiman muchísimo por ser mujer, pero yo hago los mismos trabajos que me enseño mi papá, pero cuando los videos lo muestran a él no hay comentarios. Hay mucho mansplaining, o sea desde los comentarios me dan indicaciones o me corrigen cosas. Paso todos los días de mi vida en el taller, hasta 15 horas al día o inclusive a veces directamente me quedo a dormir en algún motorhome y vuelvo a arrancar el otro día temprano, así que la verdad es bastante molesto que traten todo el tiempo de enseñarme a hacer mi trabajo. Es falso pensar que un hombre tiene más facilidad en el mundo de las herramientas. Eso está cambiando por suerte”.
Robert de Niro trae suerte
La serie NADA de Mariano Cohn y Gastón Duprat, y protagonizada por Luis Brandoni trajo a la Argentina a uno de los dioses de Hollywood. El actor de Taxi Drive, El Padrino, Buenos Muchachos llegó a Buenos Aires para rodar unas escenas. La producción se puso a buscar un motorhome con todas las comodidades para que el actor pase las tediosas jornadas de filmación. Aylin recuerda aquel día en que Gigi Motorhome tuvo contacto con el mundo de las alfombras rojas. “Pensamos que era para filmar una escena, nunca para que De Niro descanse. Un día me levanto de la mañana y tenía el teléfono explotado con mis seguidores de Instagram que me mandaban fotos del noticiero donde mostraba que Robert de Niro estaba en la Argentina filmando una serie y usando el primer motorhome que hicimos nosotros. Fue increíble e inesperado. Estaban usando la primera unidad que hicimos mi padre y yo, y por eso era un vehículo que amaba. Y ahí estaba, De Niro bajando por las escaleritas que nosotros mismos instalamos”.
En su novela “En el Camino”, Jack Kerouac confiesa: “todavía nos quedaba mucho camino, pero no nos importaba, la carretera es nuestra vida”. Quizá ese sea el mensaje de Gigi Motorhome. La vida está en la ruta y nosotros tenemos la fórmula para vivirla.
RG