Boca Juniors venció a Racing Club por 4 a 1 en definición por penales luego de que ambos equipos empataran en el estadio de Avellaneda y clasificó a las semifinales de la Copa Libertadores. Así, el club de la Ribera deberá enfrentar a Palmeiras de Brasil a fines de septiembre, sin haber ganado ninguno de los cuatro partido de play offs.
El encuentro comenzó a las 21.30 en la cancha de Racing. Estuvo arbitrado por el uruguayo Andrés Matonte y televisado por Telefé, Fox Sports y la plataforma Star +.
Al inicio del primer tiempo, Racing salió convencido y mantuvo el dominio absoluto del mediocampo. Así, durante la primera etapa del partido la “Academia” impuso las condiciones de juego frente a un adversario que prefirió pararse firme en defensa en lugar de arriesgar en ofensiva.
Progresivamente, conforme se iba sintiendo más cómodo en la cancha de su rival, el Xeneize comenzó a emparejar el mediocampo.
El equipo local tuvo la primera oportunidad de gol cuando el colombiano Quintero habilitó por derecha a Aníbal Moreno, quien definió de primera ante la salida de Sergio “Chiquito” Romero, que se quedó con la pelota. El equipo de Fernando Gago tuvo una segunda chance de gol tras un centro de Gabriel Rojas para Quintero que remató apenas desviado del palo derecho.
En el segundo tiempo, Boca se mostró más activo, trató de tener la pelota y de pararse en campo contrario. Sin embargo, los esfuerzos no fueron suficientes para que se impusiera en esta etapa del encuentro y ninguno de los dos equipos se convirtió en un claro dominador. A pesar de que Boca logró acercarse en varias oportunidades al arco defendido por Gabriel Arias, no logró generar ninguna situación clara de peligro para el local.
La avanzada del club de la Ribera tuvo como contracara un menor peso ofensivo de Racing marcado fundamentalmente por el bajo rendimiento del centrodelantero Maximiliano Romero, quien fue reemplazado por el colombiano Roger Martínez a diez minutos que se finalice el partido.
Así, llegó la etapa de penales en la que “Chiquito” Romero volvió a convertirse en héroe al atajar los remates de Gonzalo Piovi y Leonardo Sigali. Tras darle a su equipo el pase a semifinales después de tres años, el arquero confesó que se iba “feliz y triste a la vez” porque, dado sus inicios, es “hincha de Racing” y le “dolieron los silbidos de los hinchas”.
NB/ACM con información de agencia Télam y Datafactory.