En la jornada que organizó la Asociación Empresaria Argentina (AEA) para celebrar sus 20 años de existencia, el CEO del Grupo Clarín, Héctor Magnetto, reclamó hoy en el hotel Sheraton de Retiro contra el “internismo” y las “distorsiones” impositivas. Opinó que el proyecto de ley de tributo a la renta inesperada provoca “más incertidumbre” y se quejó de que en los últimos años aumentaron los gravámenes “enormemente”: “No sólo impuestos distorsivos sino también confiscatorios. Así no va a haber inversión privada”.
Con una movilización piquetera enfrente del establecimiento, aquí se han reunido grandes como Luis Pagani, dueño de Arcor, y Paolo Rocca, de Techint. En la inauguración, el presidente de AEA, Jaime Campos, criticó el impuesto a la renta inesperada y después Alberto Fernández, en un mensaje grabado, lo defendió implícitamente al señalar que las “oportunidades para unos sean oportunidades para todos”. Un aplauso casi imperceptible coronó el video enviado por el Presidente.
Magnetto, uno de los fundadores de AEA en plena crisis de 2002, cuando las grandes empresas argentinas corrían riesgo de extranjerizarse, advirtió que “la conquista y el mantenimiento del poder suelen estar por encima”, “se alimenta el internismo y se dificulta cualquier intento de pensamiento estratégico” y “las decisiones estructurales se dilatan”. “No hay razón para que las empresas y los salarios estén tan devaluados”, advirtió el también integrante del grupo controlante de Telecom. “Hay razones políticas, institucionales y económicas. Para crecer debemos producir más bienes y servicios y para eso se necesita inversión privada rentable”, concluyó Magnetto. Este encuentro de AEA busca precisamente una reivindicación del sector privado que los empresarios consideran que en la Argentina está subestimado.
El accionista de Clarín sostuvo que la inversión de las compañías requiere “estabilidad macroeconómica, derecho a la propiedad y división de poderes, clara y tenaz decisión política y acuerdos necesarios”. Magnetto, que suele hablar poco en público y lo hace con dificultad por problemas de salud, alertó que el país lleva “décadas de crecimiento ínfimo” y lo atribuyó en parte a déficits fiscales financiados con emisión monetaria o endeudamiento“. Señaló que ”pocos países han logrado mejorar tan poco los ingresos de sus ciudadanos desde 1950“ como la Argentina. ”Cuando hablamos de multiplicar los ingresos, hablamos de incentivar fuerzas de la producción“, proclamó Magnetto y cargó contra las ”distorsiones impositivas“ y de infraestructura, entre otras.
Los diversos oradores, incluido Fernández, se refirieron a las oportunidades que la guerra de Ucrania ha traído a la Argentina como proveedor mundial de energía y alimentos. “El nuevo escenario mundial nos muestra algunas endijas en la demanda de energía y alimentos. Para recomponer la credibilidad interna y externa, debemos demostrarnos que podemos ser una democracia capitalista confiable”, convocó Magnetto, que apuntó contra “espejismos y soluciones mágicas”. También llamó a aprovechar las ventajas no sólo de la agroindustria sino también de la energía, la minería, la industria de mayor densidad, las manufacturas y la economía del conocimiento. Además, el accionista de Telecom destacó las oportunidades en su sector, sobre todo si se incorpora la tecnología de telefonía celular 5G.
“La Argentina tiene un momento único para el campo de la agroalimentación, tenemos el octavo territorio con más de 50 millones de hectáreas productivas, las cuatro estaciones de clima, una ubicación geográfica alejada de todo conflicto, un campo con capacidad emprendedora”, destacó Pagani. Pero también llamó a no sólo exportar granos sino productos con marca que lleguen a los supermercados. Puso el ejemplo del vino argentino, pero destacó que en los últimos tiempos también los quesos se exportan más. Llamó a alimentar a Asia y África, donde Arcor está por inaugurar su primera planta fuera de Latinoamérica, más precisamente, en Angola. En una pregunta que lo incomodó sobre el proyecto de ley de ampliación de la Corte a 25 miembros, Pagani respondió que la prefiere de cinco.
Antes, el jefe de Estado destacó que la producción y el empleo crecen, pero aún cuesta recuperar el 20% que cayó el salario en el gobierno de Mauricio Macri. “Nos cuesta terminar con la desigualdad. No hemos logrado que nuestros productores de alimentos se asocien a los argentinos y desacoplen los precios locales de los internacionales”, apuntó Fernández. Señaló que “los silos incendiados en Ucrania se traduce en hambruna, que va a sufrir el Sur”.
AR