Datos oficiales

La actividad económica repuntó en mayo empujada por el agro, pero la mayoría de rubros continúa en rojo

El Indec publicó este jueves el dato de actividad económica correspondiente a mayo y, después de semanas turbulentas, el Gobierno celebró. El Estimador Mensual de la Actividad Económica, un indicador provisorio del Producto Bruto Interno, arrojó un repunte por primera vez desde que asumió Javier Milei: aumentó 2,3% respecto del mismo mes de 2023 y 1,3% respecto de abril en su serie desestacionalizada. “TSUNAMI DE CHANES”, tuiteó el Presidente junto con los datos. 

Sin embargo, hay dos precisiones que hacer: si se excluye al agro, la economía argentina se contrajo 5,5%, y si consideramos el acumulado de actividad 2024, se presenta una retracción contra 2023 de 2,9%. Estos números van en consonancia con las proyecciones estimadas por el Fondo Monetario Internacional: una caída del PBI argentino para 2024 de 3,5%, que se profundiza a 6% si no se considera al agro. 

Varias cuentas de twitter afines al Gobierno compartieron y celebraron el dato, como una muestra de su discurso de la recuperación “en V”,  pero  cuando se desagrega por sector de actividad el panorama continúa siendo pesimista: 9 de los 15 sectores muestran caídas muy profundas. 

El principal sector afectado es la construcción: muestra una retracción de 22% interanual en mayo, acumulando seis meses consecutivos de números rojos. Esto se debe principalmente a la decisión de Milei de paralizar casi por completo la obra pública desde su asunción. El parate en este sector, según las bases del Sistema Integrado Previsional Argentino (SIPA) en su serie desestacionalizada, costó entre noviembre y abril más de 64.000 puestos de trabajo registrados.

En el último tiempo, algunas obras fueron transferidas a las provincias para su concreción pero aún no hay muestras de reactivación. Por caso, para junio tanto el Índice Construya como los despachos de cemento a nivel nacional mostraron retrocesos de 32 y 33% interanual respectivamente. En el mediano plazo, el Gobierno estará obligado a avanzar con determinadas obras, de acuerdo a lo votado por el Congreso de la Nación: aquellas que tengan 80% de ejecución o que cuenten con financiamiento internacional. Por ahora, parece lejano.

Otro de los sectores sumamente afectados es la industria manufacturera: presenta una caída de 14,2% interanual, en línea con el promedio de lo que va de 2024. A su interior, la industria automotriz es una de las más comprometidas: la producción de autos de mayo fue 28% menor a la de un año atrás y en junio se profundizó a -40% interanual. A su vez, las pymes son las peor posicionadas: según la CAME (Confederación Argentina de la Mediana Empresa), la producción industrial pyme se redujo 19% en mayo con respecto a 2023. 

El parate industrial se percibe en la paralización de plantas y la contracara son las suspensiones y despidos. Según datos oficiales de la Secretaría de Trabajo, sobre la base SIPA en su serie desestacionalizada, entre noviembre y abril se perdieron 18.362 puestos de trabajo registrados en la rama manufacturera del sector privado. Quizás el caso más emblemático sea la paralización de la acería de Acindar en Villa Constitución, perteneciente al grupo ArcelorMittal, que tuvo lugar en marzo y se repetirá en lo que queda del año: con un esquema de suspensiones en el cual los empleados trabajarán solo dos de los últimos seis meses del año. 

Pero no es excluyente de la industria siderurgia sino que se materializa en todos los rubros: en neumáticos, con despidos en Fate y Bridgestone, ambas con pedidos de procedimientos de crisis ante la Secretaría de Trabajo, Empleo y Seguridad Social; en alimentos, con el cierre de Canale en Mendoza y los despidos en Pepsico; retiros voluntarios en automotrices como Renault, Toyota y General Motors. 

Ninguna industria escapa a la crisis: según el Índice de Producción Industrial Manufacturero que elabora también el Indec, en mayo todos los sectores se retrajeron con respecto al año anterior, pero también con respecto a abril. Así, la industria parece lejos de encontrar su piso.

Con este panorama, ¿cómo puede ser que la actividad económica haya crecido en mayo? La explicación radica centralmente en el agro: en el mes más importante del año en materia de producción agrícola, este sector creció 103% en comparación con mayo de 2023. Es decir, se duplicó la actividad del sector, ya que estamos comparando la cosecha gruesa de 2024 con un año de una sequía sin precedentes. Así, el agro mostró su mejor performance en lo que va de 2024, y traccionó al alza el indicador de actividad, que sin embargo continúa con la mayor parte de sus números en rojo.  

 

CB/DTC