Con la inestabilidad cambiaria como telón de fondo, el presidente Luiz Inácio Lula da Silva recibirá el próximo martes a su par argentino, Alberto Fernández. Así lo confirmaron a elDiarioAR fuentes del gobierno brasileño. De acuerdo con versiones que reconstruyen la conversación entre ambos jefes de Estado -ayer al mediodía, por videoconferencia-, Lula preguntó cómo estaba la situación económica argentina. Reflejaba así una preocupación que lo acompañó inclusive durante sus viajes, al punto que el 13 de abril, cuando se encontraba en China, el brasileño cuestionó severamente al Fondo Monetario Internacional al decir que “asfixia a la Argentina” con las exigencias del pago de la deuda.
En principio, Fernández tenía previsto viajar a Brasil el 30 de mayo próximo para participar de una cumbre de la Unión de Naciones Sudamericanas (Unasur). Hay un interés especial del presidente brasileño para la realización de semejante reunión, que sería en el distrito federal brasileño, y que tiene como contexto la convicción brasileña del poder que daría a la región la unidad de los mandatarios, tanto por el mercado que representa como por asuntos de defensa. Tal como anticipó este diario anoche, Lula fue insistente en ese asunto: “De vuelta a Brasil, hoy en el Palacio de la Alvorada me comuniqué con mi amigo, el presidente de Argentina. Hablamos de Unasur, de las relaciones fraternas en nuestro continente y en la profundización del comercio entre nuestros países”.
Este martes, sin embargo, todo indica que el tema pasará casi en exclusividad por lo que pueda hacer Brasil para ayudar a la Argentina. El mecanismo que pretende profundizar el presidente argentino, de acuerdo con el embajador Daniel Scioli, es el Sistema de Pagos con Moneda Local. El proyecto ya había sido planteado cuando el líder petista visitó Buenos Aires, a pocos días de asumir la presidencia, para participar también de la reunión de la CELAC (23 de enero pasado).
Ya entonces se hablaba de estructurar una moneda común para el Mercosur, pero la propia situación argentina aleja por ahora esa posibilidad. En marzo, Scioli -junto a funcionarios argentinos del ministerio de Economía y de la Cancillería- participó de una reunión con la secretaria brasileña de Comercio Exterior, Tatiana Prazeres. Se buscaba avanzar en un sistema de financiación del gobierno de Lula para viabilizar exportaciones de empresas brasileñas hacia la Argentina, que no requieran en lo inmediato gastar las escasas reservas en dólares del Banco Central.
EG