Los monotributistas de las categorías que más facturan tienen temor de pasarse en ventas registradas y saltar al régimen de autónomos, también llamado de responsables inscriptos, lo que tiene por efecto que algunos de ellos omitan la emisión de comprobantes o directamente disminuyan la actividad para evitar un salto importante en la carga impositiva. Al pasar a autónomos, los contribuyentes pasarían de tributar por el 6% de sus ingresos a pagar el aporte jubilatorio que arranca en el 17%, el impuesto a las ganancias de hasta 35%, y a facturar con IVA, que en general es 21%.
En la actualidad hay 20.000 personas en condiciones de ser excluidas del régimen de monotributo, pero eso no sucede porque la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) viene suspendiendo el salto de categoría desde octubre de 2019.
Frente a esa situación y la de otros 300.000 monotributistas que están en las máximas categorías del régimen, a punto de pegar el salto, el Gobierno envió un proyecto de ley al Congreso para abordar estas problemáticas, adelantaron ayer a Télam fuentes de la AFIP, que dirige Mercedes Marcó del Pont. Las modificaciones propuestas en la iniciativa apuntan a armonizar la transición entre el Régimen Simplificado para Pequeños Contribuyentes (RS, más conocido como monotributo) y el Régimen General (RG, o de autónomos), tanto en términos administrativos como en los montos de las obligaciones que deben afrontar las personas monotributistas. La iniciativa será debatida en las sesiones extraordinarias, es decir, este verano, y también contempla la actualización para las escalas y montos del monotributo correspondientes al período 2020, que comenzarán a regir cuando se apruebe el proyecto, agregaron las mismas fuentes.
Por ejemplo, un monotributista que presta servicios y está registrado en la categoría H que durante 2020 facturó un 20% más que el tope máximo quedaría en la actualidad excluido para pasar al Régimen General. Si eso sucediera la persona debería pagar entre IVA y Ganancias una suma superior a los $ 942.100 anuales. Las modificaciones propuestas le permitirán mantenerse en régimen simplificado si abona un monto adicional cercano a los $ 34.800 anuales. El proyecto de ley representará un ahorro para el contribuyente de unos $ 907.000.
El contador Ezequiel Passarelli apuntó que los monotributistas pagan de impuestos entre el 4,3% y el 11,2% de sus ingresos, mientras que los autónomos abonan el aporte de autónomos, al que calificó de “caro”; Ganancias, con una escala progresiva hasta el 35%, e IVA. Lo curioso es que los monotributistas que contribuyen con el 11% son los que menos facturan, los de la categoría A. “El monotributo es sumamente ventajoso”, señaló otro contador, Arnaud Iribarne.
A.R.