El dólar legal que usan las empresas para girar fondos al exterior, triangulando con bonos y acciones, el contado con liquidación (CCL), se disparó hoy, la última jornada antes de las elecciones, un 16%, y subió hasta $1.110. ¿La razón? Tanto empresas como dueños de grandes fortunas buscaron pasar tranquilos el domingo sin pesos y con dólares en el extranjero, a resguardo de cualquier reacción del mercado el lunes ante el incierto resultado electoral. En cambio, el dólar blue o ilegal, bajo fuerte control policial, se mantuvo en $900 y el MEP (Mercado Electrónico de Pagos), al que recurren pequeños ahorristas con fondos en blanco, subió 1,2%, a $898.
¿Por qué se catapultó el CCL? La respuesta de los operadores bursátiles es unánime: para protegerse de lo que suceda el domingo a la noche entre el escrutinio y la reacción de los candidatos y de la respuesta del lunes de los inversores. “Buscan cobertura. Veremos el lunes”, cuenta Pablo Bachur, de Tomar Inversiones. “Fue el último día para cubrirse antes de las elecciones”, responde otro analista de las grandes sociedades de bolsa.
Si bien Javier Milei considera que el CCL es el valor de mercado del dólar, es una plaza en la que está vedados diversos actores: los bancos, las aseguradoras, los exportadores que reciben cualquier dólar especial para liquidar o que pueden mantener en divisas parte de sus ventas, y los importadores que compran bienes y servicios del exterior al tipo de cambio oficial, a sólo $365. Los exportadores e importadores podrían recurrir al CCL, pero a costa de perder el acceso al dólar especial de exportación o a la plaza oficial, respectivamente. Por ahora no lo habían hecho. La pregunta es qué harían a partir del lunes si quien vence en las elecciones promete unificar el tipo de cambio (ya no regiría el oficial) y dolarizar el 10 de diciembre, teniendo en cuenta además que los importadores hoy no están accediendo a divisas y se les está acumulando una deuda con sus proveedores extranjeros de US$40.000 millones. Veremos, como dice Bachur.
AR/MG