El discurso de Javier Milei en el Congreso, en el que ratificó la senda de la motosierra fiscal y convocó a los gobernadores a unirse a su plan, provocó este lunes una caída en los tipos de cambios paralelos. A los inversores financieros les cayó bien esa ruta. El dólar blue retrocedió 3,3%, a $1.015, cada vez más cerca del oficial, a $863, 0,1% más que el viernes, siguiendo la idea gubernamental de devaluar 2% mensual. El MEP (Mercado Electrónico de Pagos) cayó 2,3%, a $1.029, y el contado con liquidación (CCL), 2,2%, a $ 1.066.
“El mercado vio muy positivo el mensaje de Milei al Congreso porque pidió, entre comillas, consensuar”, observó un analista de una de las principales sociedades de bolsa. El “entre comillas” apunta a que el presidente planteó un acuerdo, pero sobre la base de lo que él quiere, sin estar dispuesto a ceder. El mercado temía que en la Asamblea Legislativa se peleara con la oposición moderada, y no fue así. Pero habrá que ver qué queda del consenso si los opositores no le aprueban el decreto de necesidad y urgencia (DNU), el proyecto de ley Bases ni los diez puntos del Pacto de Mayo, que incluye una poda del gasto público de la Nación, las provincias y los municipios del 40% al 25% del PBI, lo que haría que la Argentina deje de erogar tanto como Israel -país modelo de Milei- y se asemeje a Kenia.
Pero en la sociedad SBS advierten que la baja de los dólares de este lunes es continuidad del descenso por la recesión: “Vemos que hay empresas y personas que se habían dolarizado bastante por miedo a lo que podía pasar antes de las elecciones y notamos que muchos están desarmando posiciones para poder pagar tarjeta, gastos, sueldos, etcétera”.
“El discurso del presidente no anunció ni dolarizacion ni apertura del cepo, a pesar de todos los rumores”, celebraron en el equipo económico que conduce Luis Caputo. De eso, el jefe de Estado sólo dijo que está cerca la liberalización del mercado cambiario. “Hay mucha opinión dando vuelta y tratamos de no enchufarnos sino dejar que las acciones y resultados hablen por sí mismos”, agregan en el entorno del ministro de Economía. Apuntan a bajar paso a paso la brecha cambiaria acumulando reservas en el Banco Central —en casi tres meses de gobierno bajó el patrimonio negativo de US$11.000 millones a 4.000 millones—, sobre todo con la cosecha próxima y con la recesión que desalienta la importación. Esperan que no sea necesario devaluar otra vez y con los dólares del campo este año se pueda eliminar el cepo como primer paso hacia la competencia de monedas entre peso y dólar, un objetivo que carece de fecha expresa. Pero a veces contrasta la prudencia del equipo de Caputo con la verborragia dolarizadora de Milei.
AR/JJD