Inversora Juramento, la empresa agrícola ganadera cuyo dueño mayoritario era Jorge Horacio Brito, fallecido en noviembre, reportó su mayor ganancia anual desde su nacimiento en 1990, según un comunicado enviado por la empresa hoy martes a la Bolsa de Comercio de Buenos Aires donde cotiza.
Juramento tuvo 745 millones de pesos en ganancias durante el ejercicio fiscal 2019-2020 finalizado en setiembre, lo que dejó a la empresa con un patrimonio neto de 15 mil millones de pesos, según el comunicado. En el ejercicio fiscal anterior, la empresa había reportado pérdidas por 348 millones de pesos y su patrimonio era de 10 mil millones.
Dedicada enteramente a la producción de carne para el abastecimiento del Noroeste argentino y la exportación, Juramento es una empresa verticalmente integrada con activos en todas las etapas de la cadena de valor, incluyendo la producción agrícola, que es principalmente utilizada para el abastecimiento del consumo del ganado propio y un frigorífico para la faena. Sus actividades están concentradas en la provincia de Salta, con una serie de fincas que suman un total aproximado de 90.000 hectáreas. Uno de los principales activos de Inversora Juramento es el permiso que obtuvo de la provincia para abastecerse de agua del río Juramento, la que utilizaba para riego de su producción agrícola que era a su vez usada para el alimento en corral de sus animales.
Las ganancias de Juramento en el último año fiscal se explican por la resiliencia mostrada ante la pandemia del Covid por la industria cárnica. Según datos de la Cámara que agrupa a los productores (CICCRA), éstos se mantuvieron vendiendo sus animales en un valor constante en dólares corrientes de alrededor de US$ 1,40/kg y el precio de exportación se ubicó en un valor promedio de US$ 3,40/kg.
Brito, más conocido por haber sido uno de los fundadores y también dueño de un paquete de acciones mayoritario en el Banco Macro, tenía una particular atracción por Inversora Juramento, de la cual era dueña en un 95%. Hasta su muerte el 20 de noviembre pasado, Brito solía recorrer al menos dos veces por mes esas hectáreas piloteando el mismo el helicóptero en el que tuvo su trágico accidente. Llegaba hasta la provincia de Salta en su avión privado por la mañana y luego de repasar uno por uno los corrales donde se alimentaban sus animales, regresaba por la noche. El accidente que le provocó la muerte, de hecho, ocurrió al intentar regresar a la localidad de Joaquín V. González, sede de Juramento, luego de un almuerzo con el gobernador de la provincia.
Además de Macro y Juramento, entre muchos otros negocios, Brito también tenía participación accionaria en la inmobiliaria Vizora y un paquete minoritario en la generadora de electricidad Genneia.
Macro, el banco del cual Brito tenía un 22 por ciento de las acciones, reportó el mes pasado la mayor ganancia por acción entre los bancos locales en el tercer trimestre, registrando una utilidad de 6.100 millones de pesos (US$74 millones).
PG