El CEO de YPF, el licenciado en administración de empresas mendocino Sergio Affronti, renunció este jueves a su cargo después de protagonizar una pelea interna con el presidente de la petrolera estatal, el abogado santacruceño Pablo González. Se trata de un conflicto más en la energía, área de gobierno donde talla fuerte la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner, en este caso a través de González.
Affronti se había formado en petróleo en la Universidad de Texas y había trabajado casi toda la vida en YPF, con la excepción de unos años en que lo hizo para la española Repsol. Llegó al cargo de CEO en abril de 2020, bajo el impulso del cristinismo, que desconfiaba del líder de la compañía que había puesto Alberto Fernández, Guillermo Nielsen. El nombre de Affronti fue sugerido entonces por Miguel Galuccio, que presidió YPF en el segundo gobierno de Cristina Kirchner. Nielsen dejó entonces el cargo de CEO y se quedó con el de presidente hasta que en enero de 2021 fue desplazado también de ese puesto por González, que había sido vicegobernador de Santa Cruz, diputado y senador nacional.
Ahora Affronti será reemplazado por otro técnico, el ingeniero químico Pablo Iuliano, que hasta ahora se desempeñaba como vicepresidente de Upstream (exploración y extracción) No Convencional de YPF y que también había integrado el equipo de Galuccio. El licenciado mendocino fue despedido semanas después de que González denunciara ante la Justicia que al menos dos empleados de la empresa lo espiaban. Su cesantía ocurre después de semanas de tensión entre él y el presidente de la compañía, que pretendía acelerar las importaciones de gasoil a pérdida para evitar el desabastecimiento que sufrió el mercado local en plena cosecha de soja y maíz en los últimos meses. Affronti se va desgastado de las tensiones políticas, que también confrontaron a González con el ex ministro de Economía Martín Guzmán, pero satisfecho con los resultados operativos de la firma.
AR