De Mendiguren y Tombolini visitan la UIA entre promesas de crecimiento y sospechas por las importaciones

La Unión Industrial Argentina (UIA), que preside Daniel Funes de Rioja, recibirá este martes a los secretarios de Desarrollo Productivo, José Ignacio de Mendiguren, y de Comercio, Matías Tombolini, y al subsecretario de Política Comercial, Germán Cervantes. De Mendiguren lleva las buenas noticias: vaticina que la economía no se contraerá, como vaticina la mayoría de los analistas por la sequía, sino que predice que se expandirá 1,5% porque el consumo y el turismo continúa empujando hacia arriba. Tombolini y Cervantes, en cambio, enfrentarán las quejas por los faltantes de importaciones necesarias para producir, desde insumos hasta maquinarias.

No se espera que nadie a viva voz comente los comentarios del periodista Carlos Pagni sobre supuestos funcionarios de Comercio que piden presuntos pagos en un hotel de Puerto Madero o las funciones de la esposa de Tombolini, María Stroman, como su asesora ad honorem. No es la primera vez que en los últimos años se siembran sospechas sobre cónyuges de funcionarios encargados de los controles de importaciones. Pero en el Gobierno comentan que empresarios les sugieren que hay quienes piden peajes para conseguir aprobaciones. Ya en febrero pasado el ministro de Economía, Sergio Massa, y Tombolini denunciaron a una banda grabada con cámara oculta que reclamaba esos sobornos para liberar autorizaciones del Sistema de Importaciones de la República Argentina (SIRA). En abril, los diputados de la Coalición Cívica Paula Oliveto, Juan Manuel López y Victoria Borrego se presentaron en la Justicia contra el secretario por una publicación en un grupo de Facebook de despachantes de aduana que hablaban de un 13% de coima.

La UIA espera a Tombolini y Cervantes con la reciente encuesta a sus asociados que indica que “más de la mitad de las empresas indicaron un empeoramiento de las restricciones a las importaciones de insumos para la producción”. “Los tiempos de aprobación de las SIRAs empeoraron para el 64% de las empresas, mientras que el 58% indicó una reducción en la proporción de solicitudes aprobadas”, según el informe de la Unión Industrial. No obstante, De Mendiguren consultó a la ministra de Trabajo, Kelly Olmos, sobre suspensiones de personal en empresas para ver si los faltantes provocaban parates y ella le informó que sólo hubo cuatro en los últimos dos meses.

El secretario les advertirá que en el primer cuatrimestre recibió un 48% más de pedidos de importaciones medidas en dólares que en el mismo periodo de 2022 y aprobó un 25% más. “El que recibe la SIRA aprobada se la guarda para especular”, alertan en Comercio. Es tentador importar al dólar oficial con la brecha que hay respecto del paralelo.

En el Gobierno se proponen “estabilizar la inflación sin que caiga el PBI”. Por eso, la última suba de tasa de interés para los plazos fijos y las Letras de Liquidez (Leliq) vino acompañada de una baja del costo del financiamiento para pymes y consumo. En la encuesta de la UIA en abril hay más compañías con caídas de producción, ventas internas, exportaciones y empleos que las que registran subas. Sin embargo, el Instituto de Estadística (Indec) marcó que de enero a marzo la industria creció 2,6%. “Se quejan de las importaciones, pero crecen”, apuntan en el Gobierno. De Mendiguren llevará los números con los que cruzó este lunes al ex ministro de Hacienda de Cambiemos Nicolás Dujovne por Twitter: “Hoy la economía está 7% arriba de cómo la dejaste. La industria está 15% arriba. Hay 305.000 más familias argentinas con empleo formal privado. El desempleo está en el nivel más bajo en 20 años. La inversión está en el mayor nivel en 14 años”.

El secretario de Desarrollo Productivo les recordará a sus ex colegas de la UIA, entidad que él presidió en el pasado, lo que les dijo en 2016 el entonces presidente del Banco Central de Cambiemos, Federico Sturzenegger. “Esa asignación de capital con proyectos con TIR (tasa interna de retorno) negativa lo que logra en realidad es destruir el capital en lugar de multiplicarlo”, habló aquella vez Sturzenegger en contra de los préstamos productivos con tasa de interés inferior a la inflación. Ahora De Mendiguren les ofrece un plan llamado Crédito Argentino (Crear) por $ 1.000 millones para capital de trabajo (gastos operativos), inversiones y exportaciones de grandes empresas, pymes y emprendimientos con una tasa del 48%, muy por debajo del 109% del índice de precios al consumidor (IPC), que se consigue en bancos públicos y privados. “El FMI (Fondo Monetario Internacional) te pide tasa positiva, pero así hacés mierda la actividad”, razonan en los despachos oficiales.

AR