El dólar blue subió este miércoles 4 pesos y acumula un alza de 7 en este septiembre electoral, hasta alcanzar los $ 187. La presión sobre el peso también se sintió en el mercado oficial, donde la moneda norteamericana se elevó hoy a $ 103,25, pese a las fuertes ventas del Banco Central. La autoridad monetaria también intervino en los mercados legales paralelos, el MEP (Mercado Electrónico de Pago, de operatoria doméstica), que descendió este miércoles 0,3%, a $ 170,68, y el contado con liquidación (CCL, para girar al exterior), que bajó en la misma proporción, a $ 170,81.
El dólar flota impulsado por especulaciones sobre las primarias del domingo. Sucede lo mismo con los títulos públicos y las acciones. Los bonos vienen subiendo y eso impulsa una baja del riesgo país, que ayer cayó a un todavía elevado nivel de 1.477 puntos básicos, un 0,67% menos que un día antes y un 7,9% por debajo del pico que había alcanzado el 19 de agosto pasado. Las acciones de las empresas argentinas en Wall Street también venían recuperándose en el mes, pero este miércoles derraparon contagiadas por la caída bursátil global ante el aumento mundial de casos de Covid-19.
Mauro Mazza, economista de la sociedad Bull Market, analiza los movimientos del mercado: “Estamos reacomodándonos. Muchos cerrando posiciones en pesos y yendo hacia el dólar. El mercado está mirando hoy más al Central que a las elecciones. Hoy hubo comentarios en off que encendieron las alarmas sobre una elección cuyo conteo se extienda toda la noche y sea criticado. Por eso, se puso un poco de freno a la estampida compradora de acciones y bonos que desde la semana pasada esperaba un resultado muy magro para el oficialismo. Por eso, el Central usó hoy cerca de 40 millones de dólares en el MEP y el CCL más 90 millones en el MULC (Mercado Único Libre de Cambios, el oficial). Hay algo de electoral en la suba del blue, pero hay más una cuestión operativa de que compran dólares en el blue para después comprar USDT, o theter, que es la criptomoneda con la que podés comprar Bitcoin en el exterior. La Argentina es el séptimo mercado mundial de criptomonedas y cada vez que baja fuerte el Bitcoin, aparece gente que quiere comprarlo. Lo más llamativo de esto es que el Central está subsidiando hasta las compras especulativas de Bitcoin: interviene en el MEP para abaratarlo, eso hace que haya gente que venda en el blue y compre en el MEP para hacer una diferencia, y eso abarata el blue para quien quiere cripto”.
En el equipo económico aseguran que están vendiendo dólares “dentro de lo esperable” por la clásica incertidumbre preelectoral. “El año pasado no había reglas y se registraban pagos anticipados y cancelaciones de deudas comerciales. Todo eso está ahora ordenado. Lo que se paga son importaciones de insumos y bienes de capital. La lógica del mercado es acumular reservas en la primera mitad del año y usarlas en la segunda. Este año fue mejor, hasta agosto fue positivo. Ahora nos toca septiembre, octubre y noviembre: hay que asistir y eso es lo que se hace. Presionar para que el Central acumule reservas en esta etapa es querer provocar una brutal recesión económica y eso está bien lejos de la intención de este gobierno”, afirman en el gabinete económico.
Pablo Bachur, operador de la sociedad Tomar Inversiones, analiza el alza de acciones y bonos de los últimos días: “Los mercados argentinos vienen con una recuperación importante en las últimas semanas en función de las expectativas de un resultado electoral adverso al oficialismo. Se toma con buenos ojos que la sociedad repruebe un poco la gestión del gobierno actual. Pero de ahí en más es muy largo el camino porque todavía quedan las elecciones definitivas de noviembre y el largo trayecto hasta 2023, que es donde se definirá la cosa en cuanto a rumbo de país”. Su colega Pedro Siaba Serrate, estratega de renta fija (bonos) en PP Inversiones, agrega su visión: “El mercado en las últimas semanas está jugando con la idea del rumbo que puede tomar el país a futuro. Esto sería si finalmente la Argentina puede correrse hacia un camino más moderado y una senda de crecimiento, y que recupere la confianza. De hecho, tanto el equity (acciones) como los bonos venían muy golpeados. Descontando, incluso, escenarios de default hacia 2023 o 2024. Pero en las últimas semanas, algunas cuestiones puntuales, las encuestas y las elecciones provinciales, apuntalaron a los activos. Tal es el caso de lo que sucedió en Corrientes, donde el triunfo de la oposición reflejó la posibilidad de un cambio de tono de cara a 2023. No obstante, todavía falta mucho. Los bonos están un 15% o 17% arriba, comparados con los mínimos registrados en marzo. Pero si uno mira la película completa, desde la reestructuración de la deuda, hace poco más de un año, todavía están 25% abajo. En otras palabras, la desconfianza por el rumbo del país continúa y esto hace que sea difícil que la Argentina pueda volver al mercado (internacional para refinanciar deuda). No obstante, si realmente se diera el escenario que los inversores buscan, los bonos tendrían un potencial de suba interesante. Para que esto suceda, el mercado debería creer que hay chances de refinanciación (de los bonos reestructuados) en 2025. El equity, en tanto, por su naturaleza, podría tener un 'upside' (reversión) superior”. En cambio, Christian Reos, de la sociedad Allaria Ledesma, observa que el mercado por ahora especula con una victoria acotada del Frente de Todos en la provincia de Buenos Aires, lo que impediría que el Gobierno pase a controlar la Cámara de Diputados, y con un resultado nacional que haría perder al oficialismo su mayoría absoluta en el Senado.
AR