A lo largo de los años, el comercio mayorista ha sido uno de los pocos sectores de la economía capaz de mantener cierta estabilidad en su crecimiento incluso en los peores momentos de crisis. En parte, muchos analistas hacen referencia a la necesidad de hacer “stockeo” de productos cuando las cosas se ponen difíciles, lo que mantiene las ventas.
Si bien la situación no ha cambiado del todo, parece que la ventaja competitiva de estos establecimientos estaría comenzando a desaparecer, un fenómeno que responde a las crecientes barreras a las que se enfrenta la economía nacional.
Caída en el stockeo
De acuerdo al más reciente reporte publicado por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC), las ventas en autoservicios mayoristas presentaron una contracción del 3,8%, un fenómeno que va de la mano con el lento crecimiento que ha visto el sector en el 2022. De los 9 meses analizados por el INDEC, solo en 2 se ha visto crecimiento.
Se trata de una tendencia que parece mostrar una caída en el stockeo práctica común entre los argentinos durante los momentos de crisis, en la que se realizan compras en grandes cantidades para esquivar la inflación a corto y mediano plazo.
La falta de liquidez para realizar grandes compras mayoristas (cuyo ticket promedio supera los 8.000 pesos), así como una menor oferta de métodos de pago financiado (algo que sí existe en el sector minorista), serían algunos de los motivos por lo que las tiendas mayoristas no estarían creciendo tanto como se espera.
El crecimiento se mantiene
A pesar de esto, el crecimiento anual se mantiene, aunque en menor escala, alcanzando el 1,3% entre octubre del 2021 y el 2022. Se trataría de una situación natural ya que el comercio en general estaría mostrando un crecimiento sostenido desde hace varios años, incluyendo sectores como las cadenas de automercados, tiendas independientes, farmacias y tiendas en línea.
Este último aspecto sería esencial, con la digitalización del comercio siendo uno de los pilares de la recuperación de las ventas desde que apareciera la pandemia del coronavirus. Las ofertas en línea, incluso en las grandes cadenas mayoristas como Vital, serían uno de los instrumentos más importantes para lograr que las cadenas de tiendas puedan seguir creciendo.
Las categorías más demandadas
De acuerdo a información recabada por Scentia, y compartida por medios nacionales, algunas categorías de consumo habrían mantenido la demanda en el último año, ubicándose entre las más buscadas por los consumidores respectivamente:
1. Compras impulsivas.
2. Bebidas con alcohol.
3. Productos de higiene y cosmética.
4. Productos para el desayuno y merienda.
5. Bebidas sin alcohol.
6. Alimentación y perecederos.
La única categoría cuya demanda disminuyó (en un 5,7%), fue la de los productos de limpieza del hogar y la ropa.
Es importante recordar que estos productos vieron un incremento significativo en la demanda con la aparición del coronavirus, por lo que no se descarta que la caída se deba a una reserva excesiva en los hogares argentinos.
Debido a que los principales clientes de las cadenas mayoristas son los vendedores independientes, también se puede asumir que cuentan con suficiente stock de productos de limpieza para varios meses (incluso años).
Como respuesta a la caída en las ventas durante la crisis del coronavirus, buena parte de los sectores enfocados en la venta de productos de primera necesidad siguen mostrando un crecimiento, sin embargo, de cara a los meses por venir, es posible que más formatos comerciales pierdan espacio en el mercado como está ocurriendo con las tiendas mayoristas.