Más de un millar de personas llegaron en las últimas horas a la isla italiana de Lampedusa, donde este domingo la primera ministra italiana, Georgia Meloni, recibió la visita de la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen. Ambas presentaron conjuntamente un plan de respuesta europeo ante el recrudecimiento de la crisis migratoria que afecta a Italia.
La presión sobre Lampedusa se acentuó esta semana en la isla italiana tras la llegada de más de 10.000 migrantes en apenas tres días. De acuerdo con la Cruz Roja italiana, que gestiona el centro de acogida del puerto, todavía hay unos 1.500 migrantes esperando a ser trasladados en unas instalaciones que cuentan con capacidad para 400.
“Vine a Lampedusa para decir que la inmigración ilegal es un desafío europeo y requiere una respuesta europea”, declaró Von der Leyen al presentar junto a Meloni un plan de respuesta en coordinación entre las autoridades italianas y de la UE. “Es muy importante para mí estar aquí hoy” , insistió la presidenta de la Comisión, que retrasó este domingo su viaje a Nueva York, donde participará esta semana en la Asamblea General de la ONU
Meloni había escrito a última hora del viernes una carta a la presidenta de la Comisión, pidiéndole que visite la isla “para comprender personalmente la gravedad de la situación”. La primera ministra italiana también solicitó que se acelere inmediatamente la aplicación del acuerdo migratorio que Bruselas firmó con Túnez el pasado mes de julio y que incluía una ayuda macrofinanciera de más de 1.000 millones de euros.
Plan de cooperación entre las autoridades italianas y la UE
Ambas mandatarias presentaron conjuntamente un plan de 10 puntos para luchar contra la inmigración ilegal en el Mediterráneo y enfatizaron su intención de luchar contra las redes de trata de personas. La colaboración entre Italia y la UE abarcará desde un mecanismo de solidaridad para acoger a migrantes llegados a Lampedusa en otros países europeos, actualizar la ley europea contra el tráfico de personas y definir nuevos corredores humanitarios legales y seguros.
Von der Leyen insistió junto a Meloni en que la UE se encuentra ante “una oportunidad” de finalizar la lucha contra la inmigración ilegal y reforzar las opciones de asilo. “La inmigración debe ser gestionada”, dijo la presidenta, “y solo podremos hacerlo de manera conjunta”.
“La situación actual demuestra la crueldad de los traficantes, los engañan, se quedan con su dinero y hacen que arriesguen sus vidas”, declaró Von der Leyen. “Estamos hablando de crimen organizado y podemos acabar con ello”.
La presidenta de la CE aseguró que la agencia de asilo europea “está lista para reforzar sus acciones para ayudar a Italia” e insistió en que rechazarán aquellas solicitudes “que carezcan de justificación”. Según Von der Leyen, las vías de inmigración legal y los corredores humanitarios “son la forma de romper con el círculo vicioso de las redes ilegales de tráfico de personas”.
Meloni anunció en los últimos días un paquete de medidas para disuadir a los migrantes que traten de llegar de forma irregular a Italia, entre ellas, la de ampliar hasta los 18 meses, el máximo que permite la ley, el periodo de internamiento en los centros de detención de las personas que esperan la repatriación.
El presidente francés, Emmanuel Macron, manifestó también a Meloni la solidaridad de su país y anunció que su ministro del Interior, Gérald Darmanin, viajará a Italia en los próximos días. Según la sede presidencial francesa, Macron y Meloni coinciden “en la necesidad de tratar este desafío con humanidad y de reforzar la cooperación al nivel europeo” a fin de encontrar “soluciones eficaces inmediatas y a más largo plazo para esta crisis”.
Italia pide a la ONU y al G20 un plan internacional para contener la presión migratoria
El ministro de Exteriores italiano y vicepresidente del Gobierno, Antonio Tajani, pidió esta semana que la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y el G20 se impliquen junto a la Unión Europea para abordar el problema migratorio a nivel global. La petición de Tajani llegó días antes de la celebración de la Asamblea General de la ONU en Nueva York.
“Ni siquiera Europa por sí sola es suficiente para abordar un problema tan enorme, que afecta no sólo a casi toda África, sino también a la afluencia procedente de la ruta de los Balcanes. Por eso hemos implicado a las Naciones Unidas y al G20”, declaró Tajani al diario 'Il Corriere della Sera'.
Según el jefe de la diplomacia italiana, el Gobierno trabaja en una “gran conferencia internacional que debe ser el inicio de un verdadero proceso de estabilización del Sahel”. Tajani afirmó que el Ejecutivo italiano “hace todo lo humanamente posible”, pero la “acogida de inmigrantes irregulares pesa enteramente” sobre Italia con “enormes costos”.
La ONU pide más solidaridad y coordinación
El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) y la Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR) pidieron más apoyo y solidaridad a la Unión Europea ante la presión migratoria que sufre Italia. “Siguen siendo necesarios mecanismos coordinados de búsqueda y rescate, pero también una mayor solidaridad europea hacia los países de primera llegada”, reclamó Unicef en un comunicado emitido esta semana.
“La situación puede abordarse recurriendo a un mecanismo de desembarco que implique el uso de embarcaciones de mayor capacidad que puedan aliviar la presión sobre Lampedusa para sacar a las personas rescatadas de otras zonas de desembarco”, apunta Acnur. Aunque tales medidas requerirían el “apoyo oportuno” de la Unión Europea y “responsabilidad compartida” con los países de llegada.
Un nuevo rescate
Al margen de la crisis política, los migrantes siguieron llegando a Lampedusa, aunque en menor número que las jornadas anteriores. Este sábado, los guardacostas atendieron a una mujer que dio a luz a su hijo mientras trataba de cruzar el Mediterráneo en la noche sobre una barcaza con otras cuarenta personas. Cuando llegó el rescate, los guardacostas se encontraron al recién nacido muerto y su madre necesitó de asistencia médica.
El cuerpo del bebé fue colocado en un pequeño ataúd y trasladado inmediatamente al cementerio de Lampedusa, según informaron los equipos de rescate, mientras que la madre, quien fue asistida por el resto de pasajeros de la barcaza en cuanto empezó a sentir contracciones, fue trasladada a un centro médico.
La Cruz Roja italiana, que gestiona el centro de primera acogida de la isla, aseguró que sus voluntarios “siguen garantizando incesantemente las necesidades básicas” de los migrantes, a pesar de que sus instalaciones cuentan con una capacidad para 400.
El buque Geo Barents, de la ONG Médicos Sin Fronteras (MSF), también rescató este sábado a más de 330 migrantes que trataban de cruzar el Mediterráneo central. El navío humanitario completó hasta ocho operaciones de salvamento en un solo día y se encuentra en contacto con las autoridades italianas para realizar operaciones de rescate, según indicó la organización en un comunicado.
En lo que va de año desembarcaron en Italia 127.207 inmigrantes, casi el doble que los 66.237 del mismo periodo del 2022 y el triple que los de 2021 (42.750), según datos del Ministerio del Interior actualizados este sábado.