El Gobierno español presentó este viernes la candidatura formal de la vicepresidenta primera y ministra de asuntos Económicos en funciones, Nadia Calviño, para presidir a partir de enero de 2024 del Banco Europeo de Inversiones (BEI), el brazo financiero de la Unión Europea (UE).
La decisión es una “apuesta firme y con las máximas opciones” para “reforzar la presencia e influencia de nuestro país en los organismos internacionales y se lograría la presidencia del BEI por primera vez en la historia”, apunta el Ejecutivo de ese país.
Se trata, apunta el gobierno, de una “candidatura fuerte por la experiencia de la vicepresidenta Calviño”, que cuenta con 12 años en la alta dirección de la Comisión Europea y cinco años como ministra de Asuntos Económicos y Transformación Digital, coordinando con éxito la política económica del Gobierno de España. Enfrente, Calviño va a tener a candidatos como la danesa Margrethe Vestager, actual vicepresidenta de la Comisión Europea, y el ex ministro de Finanzas italiano Daniele Franco. A la espera de que se haga la evaluación formal del próximo 17 de agosto, constan otras dos candidaturas informales de sendos vicepresidentes del organismo: la polaca Teresa CzerwiÅska y el sueco Thomas Östros.
“La vicepresidenta tiene un gran prestigio en el ámbito internacional y actualmente preside el Comité Monetario y Financiero Internacional, principal órgano multilateral de asesoramiento del Fondo Monetario Internacional. Calviño fue clave en la consecución y puesta en marcha de fondos europeos Next Generation, cuyo despliegue lidera España, cumpliendo hitos y objetivos”, apunta el Ejecutivo español.
El nombramiento sería oficial en enero
El proceso de selección prevé la validación formal de candidaturas el próximo jueves, 17. El nombramiento, que requiere el apoyo de una amplia mayoría de Estados miembros, se acordaría en la reunión del Consejo de Ministros de Economía y Finanzas (ECOFIN) informal de Santiago de Compostela los 15 y 16 de septiembre; y sería formalmente adoptado en el Consejo de Gobernadores del BEI en octubre.
En paralelo a este proceso, está pendiente la renovación de la silla en la vicepresidencia del BEI que España comparte con Portugal, aunque según fuentes del ministerio hay que esperar a que se determine el proceso de selección. Ese puesto lo ocupa en la actualidad el luso Ricardo Mourinho.
Calviño cuenta con el total apoyo del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, para presidir el BEI, y, en caso de ser elegida, permanecería en el cargo hasta su nombramiento oficial el año próximo.
Su designación “no afectaría a sus responsabilidades como vicepresidenta primera del Gobierno de España, que ejercería hasta final de año cuando tuviera que ocupar el puesto en enero de 2024”, habiendo culminado también la presidencia española del Consejo de la UE.
Desde su fundación en 1958, el Banco tuvo 7 presidentes, todos hombres y ninguno español. Así, Nadia Calviño se convertiría en la primera mujer presidenta del BEI, un hito para la institución y para España.
El BEI es el brazo financiero de la UE y una de las mayores instituciones financieras del mundo. “Se trata de una institución estratégica para la UE y para España”, dice el Ejecutivo.
El organismo desempeña un importante papel en la financiación de inversiones para el impulso del crecimiento económico en la UE y, como tal, será una herramienta fundamental en la gestión de los préstamos Next Generation. Además, es una institución clave para el apoyo financiero a Ucrania y también para el impulso de inversiones en el resto del mundo.
La candidatura de la vicepresidenta Calviño “es clave no solo para reforzar la presencia española en instituciones multilaterales sino también para seguir mejorando la gobernanza del Banco e impulsando el papel que juega en Europa, movilizando inversiones públicas y privadas que contribuyan a desarrollar una transición verde y digital justa y la autonomía estratégica europea”.
El BEI es el Banco de la Unión Europea, con personalidad jurídica propia, y actualmente es un instrumento clave para la financiación de la transición verde en la UE. Es el único Banco que tiene por accionistas los Estados miembros de la UE, cuyos intereses representa. Tiene su sede en Luxemburgo. Sus socios son los 27 Estados miembros de la UE. La participación de cada Estado miembro en el capital del Banco está en función de su peso económico en la UE (expresado en el PIB) en su entrada en la Unión. España contribuye con el 9,66%. En el pasado, han sido vicepresidentas de la entidad la socialista Magdalena Álvarez o Emma Navarro, nombrada con el PP.