El expresidente del Banco Central Europeo Mario Draghi aceptó este miércoles el encargo de formar un Gobierno “de emergencia” en Italia, después de que fracasaran las negociaciones políticas para reeditar el Ejecutivo de Giuseppe Conte. El presidente Sergio Mattarella le asignó esta misión para afrontar de forma inmediata la crisis económica y sanitaria derivada de la pandemia y como alternativa a un adelanto electoral.
“Agradezco al presidente de la República la confianza que ha querido otorgarme. Es un momento difícil, debemos estar a la altura de las circunstancias”, dijo Draghi. “Vencer a la pandemia, completar la campaña de vacunación, ofrecer respuestas a los problemas cotidianos y relanzar el país son los retos”, añadió. “Tenemos a nuestra disposición los extraordinarios recursos de la UE, tenemos la posibilidad de operar con la mirada puesta en las generaciones futuras y la cohesión social. Con gran respeto me dirigiré al Parlamento, expresión de la soberanía popular. Confío en que del debate con los partidos, los grupos parlamentarios y las fuerzas sociales surja la unidad y la capacidad de dar una respuesta responsable”.
La crisis estalló el pasado mes de enero con la salida del partido del exprimer ministro Mario Renzi, Italia Viva, de la coalición del Gobierno encabezado por Giusseppe Conte. El pasado 26 de enero, Conte anunció su dimisión con la intención de conformar un nuevo gobierno con nuevas mayorías. Sin embargo, el presidente de la Cámara de los Diputados de Italia, Roberto Fico, anunció el martes el fracaso de su mediación para conseguir la formación de un nuevo Gobierno de Conte.
La agitada historia política italiana suma ya tres Gobiernos técnicos surgidos como solución en horas de grave crisis y confrontación. Si finalmente se aprueba el de Mario Draghi, será el cuarto y deberá regir el país ante la dura crisis de la pandemia de coronavirus. Será muy importante la votación del M5S al posible gobierno de Draghi.
No es la primera vez que la tecnocracia sobrevuela Italia, que ha visto nacer y morir 66 gobiernos en siete décadas de democracia, tras la Segunda Guerra Mundial (1939-1945). El último tecnócrata al mando del país fue Mario Monti, que llegó en 2011 en plena crisis económica y tras la dimisión de Silvio Berlusconi. Monti es economista y fue comisario europeo de Mercado Interior y de Competencia.
Con la crisis de gobierno también se detiene toda actividad parlamentaria, salvo actos urgentes como la aprobación de decretos vencidos. La actividad ordinaria de las Cámaras se reanuda solo después de que el nuevo Ejecutivo haya obtenido la confianza del Parlamento.