“Estamos devastados”, dijo la flamante mandataria británica Liz Truss, al dirigirse en un discurso a la nación desde la residencia oficial en 10 Downing Street en Londres, donde aseguró que Isabel II era “amada y admirada en todo el mundo”.
“La reina Isabel II fue la roca sobre la que se construyó la Gran Bretaña moderna”, dijo. “Nuestro país ha crecido y florecido bajo su reinado, el Reino Unido es el gran país que es hoy gracias a ella”, agregó.
Apenas dos días atrás, Truss se había dirigido al Castillo de Balmoral, la residencia de verano de la Reina y la Familia Real en Escocia, donde la monarca de 96 años la invitó a formar gobierno.
En su discurso, la primera ministra elogió los logros “extraordinarios” de la monarca, fallecida luego de 70 años en el trono, y dijo que su sentido del deber había sido una “inspiración personal” para ella y muchos británicos. “En las buenas y en las malas”, Isabel II había aportado la fuerza y ââla estabilidad que necesitaba el país, sostuvo.
Ella era el espíritu mismo de Gran Bretaña y ese espíritu perdurará
De pie, con un vestido negro y detrás de un atril de madera, la jefa de Gobierno habló en un discurso televisado en el que instó al país a “unirse” en los días difíciles que se avecinan para apoyar al nuevo rey Carlos III, según reveló antes de que Clarence House lo confirmara. “Con la familia del rey, lamentamos la pérdida de su madre”.
En el discurso homenaje, Truss consideró: “Con el paso de la segunda era isabelina, marcamos el comienzo de una nueva era en la magnífica historia de nuestro gran país, exactamente como su majestad hubiera deseado, al pronunciar las palabras: Dios salve al rey.”
El príncipe Carlos de 73 años, heredero del trono desde los tres, ahora es rey y será proclamado oficialmente en el Palacio de St. James en Londres en los próximos días. “Y mientras lloramos, debemos unirnos como pueblo para apoyarlo, para ayudarlo a asumir la gran responsabilidad que ahora tiene por todos nosotros”, exhortó la premier.
LC con información de agencia Télam