El exministro de Economía Rishi Sunak será el nuevo líder del Partido Conservador británico y, en consecuencia, el nuevo primer ministro de Reino Unido tras la dimisión de Liz Truss.
Su rival, la líder de los Comunes y ex secretaria de Estado Penny Mordaunt, se ha retirado este lunes de la carrera para competir por el liderazgo conservador pocos minutos antes de que concluyera la primera parte del proceso interno y ha dado su respaldo a Sunak. “Todos le debemos al país, a los demás y a Rishi, unirnos y trabajar juntos por el bien de la nación. Hay mucho trabajo por hacer”, ha dicho Mordaunt en un comunicado compartido por Twitter.
Con 42 años, Sunak se convertirá en el primer ministro más joven de la era moderna en Reino Unido y el primera persona no blanca en llegar al cargo. No está claro aún cuando se formalizará su nombramiento. Según la BBC, puede ser este martes.
Con el mayor número de apoyos públicos, entre ellos tories de alto perfil, Sunak era el claro favorito para convertirse automáticamente en el nuevo jefe de Gobierno. Su camino a Downing Street terminó de allanarse este domingo por la noche, cuando Boris Johnson hizo pública su decisión de no presentarse como candidato. No obstante, una fuente cercana a Sunak dijo a los medios británicos que “no daba nada por sentado” y Mordaunt no ha tirado la toalla hasta el final.
Sunak formalizó su candidatura este domingo apoyándose una vez más en las razones económicas, y asegurando que su intención es “arreglar” la economía británica, “unir” el Partido Conservador y “cumplir” con el país. “Reino Unido es un gran país, pero nos enfrentamos a una profunda crisis económica. La elección de nuestro partido nos hace decidir también sobre si las nuevas generaciones de británicos van a tener más oportunidades que sus predecesoras”, dijo.
Graham Brady, presidente del llamado Comité 1922, que agrupa a los diputados conservadores sin cargos ministeriales, ha confirmado que ha recibido “una candidatura válida”, y “Rishi Sunak es, por tanto, elegido como líder del Partido Conservador”.
A las 14:00 hora local de este lunes finalizaba el plazo para la presentación de las candidaturas. Los aspirantes tenían que demostrar que contaban con el apoyo de 100 o más diputados conservadores y, en caso de que hubiera solo un candidato, este se convertía automáticamente en líder del partido y premier.
En septiembre, Sunak perdió la carrera para hacerse con el liderazgo del partido tras la marcha de Boris Johnson, que acabó con la victoria de Truss gracias al voto de las bases conservadoras. El excanciller fue, no obstante, la primera opción de los diputados conservadores en la primera fase de la votación en julio.
Sunak había sido hasta el 5 de julio uno de los pesos pesados del Gobierno de Boris Johnson, y su dimisión al frente de la cartera precipitó la sucesión de renuncias internas que desencadenaron la caída del ex primer ministro. Su nombre ha sonado de manera reiterada en las quinielas de favoritos para hacerse con el cargo.
Liz Truss dimitió el pasado jueves presionada por su propio partido tras menos de seis semanas en el cargo y sumida en una profunda crisis política. Su posición en el Gobierno se había vuelto insostenible tras perder la autoridad en las filas tories –divididas y temerosas de perder las elecciones– a raíz de la controversia en torno a su programa fiscal –con rebajas de impuestos–, que provocó turbulencias en los mercados financieros.
Con su renuncia, Truss dio paso al proceso interno para elegir al nuevo líder de los conservadores que debía concluir, según anunció la propia líder tory, a finales de esta semana. El Comité 1922 diseñó las reglas para que la elección concluyera a más tardar el próximo viernes, limitando en la práctica el número de candidatos que podía presentarse. En anteriores ocasiones, como ocurrió tras la renuncia de Johnson, este proceso se ha prolongado durante semanas.
El nuevo líder del partido también se convierte en primer ministro debido a que los conservadores tienen la mayor cantidad de escaños en el Parlamento. Sunak será el nuevo inquilino de Downing Street tras una audiencia con el rey Carlos III. Los laboristas, a los que las encuestas dan ventajas de hasta 30 puntos en intención de voto en caso de celebrarse elecciones generales, han pedido un adelanto electoral.
Canciller y partidario del Brexit
Sunak llegó al cargo de canciller en febrero de 2020. Previamente, el entonces aliado de Johnson había sido jefe del Tesoro desde julio de 2019. Se estrenó como diputado en la Cámara de los Comunes en 2015 tras una carrera en el sector de las finanzas –tuvo cargos en varias firmas, entre ellas el banco de inversión Goldman Sachs–. Respaldó la salida de la Unión Europea en el referéndum de 2016.
Una polémica en torno a los arreglos financieros de su familia minó en parte una gran popularidad granjeada en las ruedas de prensa para explicar los planes de ayuda por la COVID-19, que aprobó rápido para mantener a familias y empresas a flote y le valieron el reconocimiento público. El exministro también se vio salpicado por el escándalo de las fiestas en Downing Street, el Partygate, por el que fue multado. Aunque siempre defendió que solo estaba de paso, Sunak se vio obligado a pedir disculpas.
Se crio en la ciudad de Southampton, al sur de Inglaterra, y es nieto de inmigrantes originarios de la región india del Punjab, que llegaron a Reino Unido en los años sesenta procedentes del este de África. Estudió en el elitista colegio privado de Winchester y se licenció en Filosofía, Política y Economía por la Universidad inglesa de Oxford.