Docenas de empleados de Clarence House recibieron notificaciones de su posible despido debido al traslado de las oficinas del rey Carlos III y la reina consorte, Camila, al Palacio de Buckingham tras la muerte de la reina, según reveló en exclusiva The Guardian.
Hasta 100 empleados de la antigua residencia del rey, incluyendo algunos que trabajaron ahí durante décadas, fueron notificados de que podían perder sus trabajos, precisamente cuando trabajaban día y noche para facilitar el ascenso al trono de Carlos III.
Entre los afectados se encuentran secretarios privados, la oficina de finanzas, el equipo de comunicaciones y empleados de la residencia, quienes fueron notificados este lunes, durante la misa de agradecimiento a la reina en la Catedral San Giles de Edimburgo, de que sus puestos de trabajo estaban en peligro.
Muchos empleados habían asumido que serían incluidos en la nueva residencia del rey, argumentando que no habían recibido ninguna indicación de lo que ocurriría con ellos hasta que llegó la carta de Clive Alderton, el principal asistente del rey. Una fuente dijo que “todos están absolutamente furiosos, incluso los secretarios privados y el equipo de mayor rango. Desde el [pasado] jueves, todos los empleados han estado trabajando muy duro hasta muy tarde, para enterarse de esto. La gente quedó visiblemente alterada”.
“Una noticia perturbadora”
En su carta, a la que tuvo acceso The Guardian, Alderton escribió: “El cambio de papeles de nuestros superiores también implica un cambio en nuestra residencia…. El trabajo que anteriormente realizaba esta residencia, en apoyo de los intereses personales del príncipe de Gales, sus anteriores actividades y operaciones domésticas ya no continuarán, y la residencia de Clarence House será cerrada. Por lo tanto, se espera que los puestos que tengan su base principalmente en Clarence House, los que asisten a dichas áreas, ya no sean necesarios”.
“Entiendo que se trata de una noticia perturbadora, y quería comentarles el apoyo que está disponible en este momento”, añadió el secretario del rey.
También señaló que algunos empleados que proveen “apoyo personal, directo y cercano” a Carlos y Camila mantendrán su trabajo. Se entiende que aún no se ha tomado ninguna decisión final, puesto que primero se debe completar un período de consultas, que comenzará luego del funeral estatal del próximo lunes.
Se espera que a los empleados declarados prescindibles les ofrezcan ayuda para búsqueda de trabajos alternativos en otras residencias reales, así como asistencia para encontrar otros empleos externos y una indemnización “mejorada” que supera el mínimo reglamentario.
Un portavoz de la residencia Clarence House dijo: “Tras el ascenso [al trono] de la semana pasada, las operaciones de la residencia del antiguo príncipe de Gales y de la duquesa de Cornwall han concluido y, tal como requiere la ley, ha comenzado un proceso de consultas. Nuestros empleados han prestado un servicio leal y duradero y, si bien algunos despidos serán inevitables, estamos trabajando con urgencia para identificar puestos alternativos para la mayor cantidad de empleados posible”.
Aún no fue confirmado si el rey y la reina consorte vivirán en el Palacio de Buckingham. Actualmente solo partes del Palacio de Buckingham son habitables, puesto que se están realizando importantes obras de mantenimiento que se espera que duren años.
Se especula que el rey, de quien se rumorea que no siente un cariño particular por el palacio, lo usará solo para fines oficiales como recepciones, audiencias, investiduras y banquetes, y que mantendrá su residencia en la cercana Clarence House, en Londres.
Cuando preguntaron a su oficina acerca de esto en 2017, cuando todavía era príncipe de Gales, sus representantes declararon que el Palacio de Buckingham seguiría siendo la sede central de la monarquía y residencia oficial del soberano. No se ha dado información reciente acerca de sus posibles decisiones de vivienda.
Aparcacoches, cocineros y secretarios
Según la revisión anual de Clarence House de este año, el rey empleaba el equivalente a 101 empleados a tiempo completo. Hay 31 en las oficinas de secretarías privadas, incluyendo secretarios privados y asistentes, documentalistas y empleados administrativos.
Una cantidad similar trabaja en su departamento del Tesoro y hay otros 12 empleados en el de comunicación. Los 28 empleados de su residencia incluyen cuatro jefes de cocina, cinco supervisores, tres aparcacoches y encargados de vestuario y un par de mayordomos. Según el último informe sobre el palacio, la reina tenía 491 empleados a tiempo completo.
También queda la pregunta sobre si el rey continuará usando el castillo de Windsor para los fines de semana, al igual que la Sandringham House en Norfolk, que la difunta reina visitaba para la navidad. El rey y la reina consorte también tienen una residencia en Birkhall, el castillo Balmoral, Highgrove en Gloucestershire, y Llywnywermod, una casa en Gales.
El príncipe y la princesa de Gales, William y Kate, se trasladaron a Windsor, a la residencia Adelaide Cottage, y mantienen el palacio de Kensington para actos oficiales.
Cuando falleció la reina madre, el duque de York ocupó la residencia que usaba ella en Windsor, Royal Lodge. Si bien algunos de los 83 empleados fueron trasladados a otras residencias reales, otros fueron despedidos.
Traducción de Patricio Orellana
PC/CD