Alberto Fernández dijo este sábado que la Argentina “no tiene amigos ni enemigos permanentes ni perpetuos”, defendió la visita que realizó recientemente a Rusia y China y justificó sus recientes declaraciones sobre los Estados Unidos, país con el que, dijo, quiere tener “una relación madura, franca y sincera”. En una clara señal de distensión con Washington, el Presidente reconoció finalmente que el gobierno de Joe Biden apoyó el principio de acuerdo de la Argentina por la deuda con el FMI.
“El mundo ha cambiado y es multilateral, lo que nos obliga a vincularnos y tener relaciones maduras de respeto con todos los países del mundo. Argentina no tiene amigos ni enemigos permanentes ni perpetuos, sino la defensa de sus intereses”, dijo el Presidente en una entrevista con radio 10.
Durante su reciente visita a Moscú, Fernández se manifestó “empecinado en que Argentina deje esa dependencia tan grande que tiene con el Fondo y con Estados Unidos” y propuso a la Argentina como “puerta de entrada” a Rusia en América latina.
“Así como Trump en su momento trabajó para favorecer al gobierno de Macri y darle un crédito muy nocivo para Argentina, también digo que, el gobierno de Joe Biden, cuando llegó el momento de dar una solución acompañó”, dijo el Presidente sobre el rol que jugó el gobierno norteamericano en el principio de acuerdo cerrado por la deuda con el Fondo Monetario Internacional.
“Cuando en Rusia hablé de que Argentina sea la puerta de entrada para Rusia estaba hablando de inversiones. No voy a imponer un régimen maoísta”, sostuvo Fernández y enfatizó que el país debe tener con Estados Unidos “una relación madura, franca, sincera y de respeto mutuo”.
Las declaraciones del Presidente frente a Vladimir Putin en el Kremlin generaron molestia e inquietud en Washington, según fuentes del Departamento de Estado consignadas por el diario La Nación. El Gobierno rechazó esas declaraciones de una fuente no fue identificada: sin embargo en la Cancillería saben que son fidedignas y conocen incluso quién es el funcionario que las hizo, según confiaron esta semana fuentes oficiales a elDiarioAR.
Con todo, no ha habido hasta ahora una queja formal del gobierno de los Estados Unidos, al parecer, inclinado a evitar una escalada diplomática con el gobierno de un aliado regional como la Argentina. El apoyo de Washington fue decisivo para obtener el primer entendimiento con el FMI en la negociación de la deuda de US$44.000 millones tomada durante el gobierno de Mauricio Macri.
Al analizar la renegociación de la deuda contraída en la gestión anterior con el Fondo Monetario Internacional (FMI), el Presidente aseguró que el acuerdo que está impulsando el Gobierno “es un paso más de un problema en el que vamos a tener que dar muchos pasos”, al tiempo que agregó que el mismo“ nos libera de hacer pagos durante cuatro años y nos permite seguir adelante con nuestra idea de seguir haciendo crecer la economía”.
“Muchos se molestaron cuando dije sobre la relación de dependencia que tiene Argentina con el Fondo y consecuentemente con Estados Unidos, pero tenemos que darnos cuenta qué nos pasa: Argentina debe 45.000 millones de dólares, es un problema del que tratamos de salir, lo vamos a tener durante mucho tiempo”, dijo.
“Deseamos esa misma relación que queremos tener con Estados Unidos también con Rusia, China, Chile, Brasil; con todos los países que se vinculan con Argentina”, sostuvo el Presidente. Reflexionó también que “el mundo es otro, nos obliga a tener relaciones maduras y de respeto con todos los países. No sé por qué viajar a Rusia y China significa que tenemos una mala relación con Estados Unidos. La realidad es que fuimos a reforzar y promover nuestros vínculos comerciales y financieros en un momento que el país lo necesita”,
En esa dirección, el Jefe de Estado consideró que “las cosas no son tan lineales, el mundo no es bipolar, no existe el mundo comunista y capitalista. Uno ve el desarrollo de la industria en Rusia o en China y son todos capitales en gran medida privados y han ganado mercados en el mundo”, a la vez que enfatizó: “El principal socio comercial de Estados Unidos es China, no es Argentina. Nada lo hicimos ideológicamente ni posicionándonos en una vereda del mundo”.
Al ser consultado sobre la adhesión del país a la Ruta de la Seda, impulsada por China, subrayó que “era algo que teníamos que hacer para poder abrirnos. Todo el comercio chileno y peruano cambió sustancialmente al abrirse a la Ruta de la Seda” y puntualizó que la misma “tiene la peculiaridad de no ponernos condicionamientos políticos, es muy importante tenerlo en claro: sólo se habla de cómo fortalecer el intercambio comercial entre los países. Para Argentina es muy importante, tenemos un déficit comercial muy grande con China, tenemos que venderle más”.
El Presidente dijo que con la incorporación de la Argentina a la Ruta de la Seda china se dio “un paso muy significativo” en materia comercial y afirmó que espera “dar esos mismos pasos con Europa, Brasil y Estados Unidos”.
“Argentina debe hacer todo para poder abrir el comercio y no ponernos condicionamientos políticos”, afirmó el mandatario.
Respecto del acuerdo alcanzado con el Fondo Monetario Internacional (FMI), sostuvo que “nos permite seguir adelante con la idea de seguir haciendo crecer la economía” argentina y destacó como “un acto de sensatez” por parte de la oposición el apoyo a ese entendimiento.
“El acuerdo con el FMI que estamos impulsando es un paso más de un problema en el que vamos a tener que dar muchos pasos. Este es el primer paso que nos libera de hacer pagos durante cuatro años y nos permite seguir adelante con nuestra idea de seguir haciendo crecer la economía”, dijo el mandatario, y remarcó como “un acto de sensatez” que la oposición “nos ayude a resolver un problema muy serio que tiene la Argentina”.
Con información de agencia Télam.
AB