Legisladores del oficialismo porteño firmaron hoy el dictamen del proyecto del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires para cambiar el uso de la avenida Honorio Pueyrredón, en Caballito, a fin de avanzar con el cierre de la traza para generar un “corredor verde”, en una iniciativa que tiene el rechazo de vecinas y vecinos de la zona.
El despacho del expediente se dio tras una reunión de la Comisión de Tránsito y Transporte en la cual un funcionario de la gestión local dio detalles de la propuesta urbana, la cual recibió también objeciones del arco opositor por el tratamiento “exprés” del tema en el Parlamento capitalino.
En rigor, el proyecto fue enviado por el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, el martes pasado, el mismo día en que el oficialismo llamó a la reunión de este viernes con vistas a darle sanción en la sesión del jueves próximo.
El texto plantea que la avenida Honorio Pueyrredón pase a ser una “calle de convivencia”, lo que permitiría “la circulación peatonal preferentemente por sobre la vehicular” y lograr así montar sobre la mitad de los carriles un corredor verde.
Con esta propuesta, el Gobierno porteño busca destrabar la obra que arrancó con el nombre de “Parque Lineal”, en septiembre del 2021, y que fue frenada por la Justicia local ante el incumplimiento de las instancias previas a la ejecución de un emprendimiento de este tipo estipuladas en la Constitución local.
Puntualmente, fueron observadas la ausencia de espacios de participación ciudadana, como lo son las audiencias públicas, así como también la falta del cambio en la normativa urbana respecto del uso que se pretendía dar a una avenida.
Fue entonces que, en respuesta a la medida judicial, el Ejecutivo llamó a una audiencia pública que se extendió por tres jornadas para que las vecinas y los vecinos pudieran manifestar sus posturas y remitió a la Legislatura el proyecto para concretar la modificación a la norma.
Durante la reunión en la Legislatura, el presidente del bloque del Frente de Todos (FDT), Claudio Ferreño, cuestionó el carácter de un “trámite exprés” que le dio el oficialismo al proyecto; mientras que el diputado Juan Modarelli consideró que el expediente debía pasar también por las comisiones de Planeamiento Urbano, Ambiente y Descentralización antes de su llegada al recinto.
Y Javier Andrade, también del FDT, pidió al Ejecutivo “que presenten el proyecto que tienen que presentar” dado que “se está modificando el uso de una vía pública de circulación para que sea un Parque Lineal”.
En tanto, Dino Buzzi, director de Planificación, Uso y Evaluación del Gobierno porteño y quien estuvo al frente de los estudios técnicos del proyecto vial, dijo que “el sistema tiene capacidad para que este cambio sea soluble” y agregó que no observaron “que vaya a darse ningún colapso” en el tránsito dado que “Honorio Pueyrredón tiene un funcionamiento hiperlocal y no de paso”.
La aseveración del funcionario porteño aludió a las críticas vertidas por vecinas y vecinos de Caballito que aseguraron, durante la reunión, que el cierre de Honorio impactará negativamente en el tráfico vehicular; en tanto que también reclamaron por una “mesa de trabajo” que los incluya en la planificación de espacios verdes.
Mariano Pasi, vecino del barrio, aseguró que la presentación del proyecto en la Legislatura “fue una muestra más de la prepotencia con la que el Gobierno porteño se viene manejando en este conflicto” y sostuvo que la obra “perjudicará a miles y miles de vecinas y vecinos”.
Por su parte, Gustavo Torchinsky, integrante de la asociación vecinal SOS Caballito, se manifestó en contra “de la destrucción de Honorio” y en rechazo “de la calle de convivencia” y pidió por “un espacio de trabajo” para abordar “opciones” a la iniciativa oficial antes de la sesión del jueves próximo.
Si bien la reunión se desarrolló normalmente por más de cuatro horas, al finalizar el encuentro un grupo de vecinos se acercó a dialogar con el legislador del oficialismo porteño Roy Cortina, para preguntarle sobre su posición.
Fue entonces cuando el diputado de Vamos Juntos se dirigió a esas personas y les dijo que se dejen de “hinchar las pelotas”, lo que generó enojo del grupo barrial y demandó la intervención del personal de seguridad de la Legislatura para frenar a Cortina que seguía a los gritos y acompañarlo hasta una de las salidas cercanas.
DA