Una vez más, el show debe seguir. Mientras se dilata la definición del gobierno nacional sobre la fusión ESPN-FOX, la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) salió a ratificar la obviedad de que The Walt Disney Latin America se quedó, hace casi un mes, con los derechos para transmitir la mitad de los partidos del torneo local hasta 2030. A través de un comunicado, Claudio “Chiqui” Tapia buscó justificar por qué aceptó la oferta del gigante de origen norteamericano que conduce a nivel regional el empresario Diego Lerner y, sobre todo, por qué rechazó la propuesta de Telecentro. Según dice el comunicado, lo hizo debido a que la propuesta presentada por la firma que es propiedad de Alberto Pierri tenía “condiciones económicas de menor cuantía en relación a la finalmente aprobada, además de no contar con avales suficiente”. Fue la manera que encontró Tapia para admitir algo que hasta ahora había ignorado públicamente y cobró una relevancia innegable el 15 de enero pasado, cuando elDiarioAR publicó en exclusiva el documento de la oferta de la empresa del ex presidente de la Cámara de Diputados durante la década menemista.
En un mundo en el que nada es lo que parece, la publicidad del negocio del fútbol tiene siempre su reverso detrás de cámara. Para ahorrar en problemas, la AFA prefirió no aludir a los montos de las dos ofertas -U$S 55 millones en el caso de la rechazada de Telecentro, U$S 45 millones en la aceptada de Disney- y apuntó a la supuesta falta de garantías por parte de Pierri, algo que el cableoperador y su entorno consideran “ridículo” y ni siquiera toman en serio. El comunicado asegura que las dos ofertas se pusieron a consideración del Comité Ejecutivo de la AFA, una afirmación que también es desmentida en privado por dirigentes de clubes como el propio Tinelli, que fue marginado de las negociaciones decisivas, tal como informó elDiarioAR. Poco después, el conductor retomó el contacto con Pierri para preguntarle si era cierto que había presentado una oferta por 55 millones de dólares. Cuando vio el documento con la propuesta de Telecentro, Tinelli no lo podía creer y hasta le prometió al cableoperador pedir explicaciones en el Comité Ejecutivo de la AFA. Por más de una razón, finalmente no lo hizo.
El rol del creador de Showmatch es el otro aspecto que la propaganda de Tapia busca redefinir, cuando remarca que Tinelli aprobó el acuerdo, otro dato que también se conoce hace casi un mes, aunque el presidente de la AFA pretende destacar ahora como forma de blindaje. En las cercanías de Tapia aseguran que Tinelli fue consultado antes de emitir el comunicado, pero esa sentencia también es desmentida cerca del animador, que decidió guardar silencio.
Producto de que había decidido eyectar a Tinelli de las negociaciones finales que llevó adelante en el predio de Ezeiza de la AFA, Tapia intenta demostrar que sumó con llamativa facilidad la que parecía una figurita difícil para el álbum del campeonato que Disney viene ganando por goleada. Hace apenas dos semanas, el 13 de enero pasado, Tinelli salió a denunciar que el holding norteamericano estaba destruyendo el deporte más popular de la Argentina: “Firman los derechos del fútbol argentino, para después, desde sus pantallas y programas destruir al fútbol, a los dirigentes que ellos creen les jugaron en contra, proteger a otros y pegarle a los clubes. Si viviera Walt Disney, los raja a todos. Escupen para arriba. Es muy obvio. Todo vuelve amigos”, escribió en una de sus historias de Instagram. Conocido el comunicado de la AFA, es de esperar que en los próximos días la señal ESPN no vuelva a amargar al creador de Showmatch con entrevistas a jugadores que hablen mal de San Lorenzo, como sucedió con Ignacio Piatti.
Tarde y obligado, el expresidente de Barracas Central actúa desde la debilidad. En su cierre frenético con Lerner -un empresario de pública afinidad con Mauricio Macri- y el gerente general de Disney, Guillermo Tabanera, había dejado algunas explicaciones pendientes y una legión de heridos de mucho poder que están esperando su próximo traspié: cableoperadores, telcos, dirigentes y una parte del Gobierno nacional que no avaló el acuerdo que contó con el impulso del presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Massa, y otros funcionarios de menor rango.
La parábola de Tapia es notable. Llegó de la mano de Hugo Moyano a ocupar el cargo más importante en la AFA, pero una vez en el poder se distanció de la familia del jefe camionero y se acercó al macrismo. Hoy, sin ir mas lejos, figura como vicepresidente del CEAMSE en representación del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, gracias al vinculo que cultivó con Diego Santilli y Horacio Rodríguez Larreta.
Para los detractores y competidores de Disney, entre los que abundan pesos pesados como la propia Turner International -propiedad de la poderosa AT&T, el comunicado de la AFA es apenas “una operación” en la que Tapia sale a defender el negocio que cerró con la dueña de ESPN-FOX. Para los funcionarios del Gobierno que cuestionan la megafusión global, lo sorprendente es el salto de Tinelli hacia las filas de Tapia. Es otra verdad a medias. En algún momento, el animador pensó en avanzar con una confrontación mayor pero se encontró sin respaldo: sedientos de ingresos, los clubes apoyaban el acuerdo. Más tarde, el presidente de San Lorenzo tomó contacto con Alberto Fernández y quedó en concretar una reunión con él que finalmente naufragó. Tinelli estaba servido para una alianza con un Gobierno que se divide entre los funcionarios que juegan para Disney y la comandancia que, por ahora, deja hacer y deja pasar.
Lo más importante, de todos modos, no figura en el comunicado de AFA y sigue pendiente. Es la definición del Gobierno sobre el capítulo local de una operación global que convirtió a Disney en el rey de la posición dominante, con el 64% de las señales deportivas por operador de televisión paga. A partir de la fusión que fue desaconsejada por el dictamen de la Comisión Nacional de Defensa de la Competencia que se conoció en noviembre pasado, Fox Sports, Fox Sports 2, Fox Sports 3, ESPN, ESPN 2, ESPN 3, ESPN+ y ESPN Extra pasaron a tener un sólo dueño. Con sus tres señales deportivas básicas, Fox ocupa el 32,7% del mercado de televisión paga y, con las cuatro de ESPN, Disney concentra otro 31,3% del mercado. Por fuera, sólo existe TyC (32,4%) y DeporTV (3,5%).
Si como asegura el presidente Fernández, el conglomerado estadounidense debe desinvertir para asegurar la competencia, habrá que ver de qué se desprende ESPN-FOX. Si cede el 50% de los partidos que Tapia sacó a relucir una vez más, la prioridad para quedarse con ese mercado la tendrá Turner de acuerdo al contrato que las dos empresas firmaron durante el gobierno de Macri, en el amanecer del esquema que dio de baja el Futbol para Todos. Mientras todo eso se define, desde los clubes dicen que todavía siguen esperando que Disney pague la primera cuota del contrato, por 30 millones de dólares, que se había comprometido a abonar el 18 de enero pasado.
DG