La inseguridad se metió de lleno en el tramo final de la campaña electoral

“Sucede en todas partes del mundo y si miramos las estadísticas, vemos otra cosa”, declaró Aníbal Fernández al referirse al asesinato del kiosquero Roberto Sabo en Ramos Mejía. Un hecho delictivo en la “la quinta provincia” que reavivó el histórico reclamo de los bonaerenses en materia de inseguridad e irrumpió en la recta final de la campaña electoral, de cara a las elecciones generales de medio término.

Ojalá hubiéramos llegado a prevenir esta situación”, señaló Aníbal sobre el crimen de Sabo, mientras que reconoció que desearía hablar con la familia del comerciante. “Es un ser humano, duele, es tristísimo”, destacó. El homicidio que ocurrió a plena luz del día en el centro comercial de Ramos Mejía, destapó la furia de los vecinos que, por la noche, comenzaron a arrojar botellas contra la Policía y estos respondieron con balas de goma y gases lacrimógenos.

Esta movilización no es aislada y se sumó a una de las tantas que se vienen produciendo en la zona: cuatro semanas atrás, deliverys cortaron Av. de Mayo y Belgrano en reclamo de “más seguridad”; al mismo tiempo, un grupo de vecinos autoconvocados de La Matanza marchó de manera pacifica a la Municipalidad de San Justo bajo la consigna “sin banderas políticas, queremos vivir sin miedo y que nos escuchen”.

A cuatro días de celebrarse las elecciones generales y mientras Alberto Fernández concentra toda su actividad en el conurbano, la inseguridad, un tema que preocupa hace más de una década principalmente en las zonas más marginales, copó la agenda de medios de comunicación. Esta vez, estuvieron presentes las consignas políticas que no solo apuntaron a la intendencia: “Que se vayan todos”. Tema que genera inquietud en el Gobierno, que por ahora optó por el silencio oficial.

Aníbal Fernández, por su parte, decidió referirse a las estadísticas: “Si miramos estadísticas son otras cosas, cuando uno las revisa son nada, estamos hablando de una vida humana truncada por nada; no se pueden explicar muchas cosas cuando estamos trabajando en algo tan delicado y cuidadoso, y sin solución”.

En este sentido, puntualizó que “en Argentina el homicidio doloso no debe superar el 6,5% o el 7%, en la ciudad de Buenos Aires, está entre el 4% y el 4,5%, mientras que Miami tiene 15%, San Pablo 24%, Washington tiene 30%″. ”Hay 6000 efectivos de las fuerzas federales en el conurbano“, aseguró.

Por otro lado, Fernández aseguró que entre el Gobierno y La Matanza hay diálogo desde hace “más de 20 días”, para “buscar objetivos y tratar de cumplir de la mejor manera, analizando la mejor forma de estar presentes”, y dijo que ayer se enviaron al distrito bonaerense 500 efectivos de Gendarmería“.

Por su parte, Horacio Rodríguez Larreta fijó posición y volvió a instaurar el debate de la baja en la edad de imputabilidad. “Con menores para mí no es bajar la edad, sino que haya un régimen penal juvenil especial. Tiene que ver con la educación pero con que haya instituciones, con los temas sociales, con que hay menores que matan gente. Hoy un chico puede votar a los 16 pero no es punible, ahí hay una contradicción. No puede ser que no sea punible. Capaz no lo es de la misma manera que un adulto, pero eso no quiere decir que no tenga que ser punible”, expresó en diálogo con Nacho Otero por HTH (FM Metro 95.1).

El kiosquero Roberto Sabo, asesinado el pasado domingo durante un asalto en su comercio de la localidad bonaerense de Ramos Mejía, partido de La Matanza, recibió cuatro disparos en el tórax que le provocaron la muerte, según el resultado preliminar de autopsia, informaron fuentes judiciales.

El fiscal Federico Medone, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) de Homicidios de La Matanza, aguarda para este mediodía la conclusión de la autopsia para agregar al expediente y avanzar con el pedido de prisión preventiva del acusado del crimen, Leandro Daniel Suárez (29),

Por el hecho, Suárez fue indagado este lunes por el delito de “homicidio criminis causa agravado por el uso de arma de fuego” en perjuicio de Sabo y también por “robo calificado -dos hechos-, hurto de vehículo, portación ilegal de arma de fuego de uso civil, portación ilegal de arma de guerra”, todo ello agravado por la “participación de un menor de edad”.

Esos hechos son por el robo de un auto cometido antes del crimen de Sabo y el de una moto, concretado luego, todo junto a una menor de 15 años que, por su edad, es inimputable.

“Por favor, no me pidan la prisión perpetua. Me quiero morir”, fueron las palabras que utilizó el acusado en su indagatoria ante el fiscal Medone, dijo un vocero judicial.

AB