- ¿Y vos, Wado?, ¿qué opinás?
-- Que con este fallo vuelve a quedar vigente el decreto 735.
A Alberto Fernández no le gustó la respuesta del ministro del Interior. Wado De Pedro había hablado poco, casi nada, hasta el momento en que el presidente, ante la mirada de doce gobernadores y tres funcionarios, le hizo la pregunta. “No veo que podamos decir que si un fallo de la Corte suspende una ley y que quede vigente un decreto que igual que la ley”, dijo Fernández. Eran cerca de las 2 de la tarde del jueves, en el Salón Eva Perón del primer piso de la Casa Rosada y en la mesa oval, entre chispazos y propuestas de todo tipo y color, buscaban el formato para hacer lo que todos decían que había que hacer: no acatar el fallo que 24 horas antes, el miércoles al mediodía, emitiera la Corte Suprema, que ordenara al Gobierno nacional aumentar en 183 millones de pesos el envío de fondos a la administración de Horacio Rodríguez Larreta.
El diálogo entre Fernández y De Pedro, relatado por dos gobernadores y un funcionario, adquirió con las horas músculo político cuando el oficialismo se enroscó en un nudo de versiones y lecturas sobre quién debía, en lo formal, “incumplir” la medida dispuesta por el máximo tribunal. Si eso correspondía a Economía, a Interior o, entre otros, a la Procuración del Tesoro. En crudo: a Sergio Massa, a De Pedro o a Carlos Zannini. La respuesta se bifurca pero tiene una traducción simple: a pesar de la decisión política, no aparecía quien le pusiera la firma en el trámite formal a la decisión de no acatar el fallo de la Corte.
Fue ahí, en ese revuelo, que terminó de naufragar una aventura que por un rato le devolvió cierta épica combativa al Frente de Todos: la rebeldía ante la Corte, por un fallo que consideran de pésima factura y con animadversión política, y que beneficia con un fuerte refuerzo de recursos a Rodríguez Larreta, quien aparece, al menos en los papeles, como el principal rival del oficialismo en el 2023.
Entre el fin de la reunión, pasadas las 14, y la difusión, 6 horas más tarde, del comunicado que con la firma de Fernández y catorce gobernadores indicaba la imposibilidad de cumplir el fallo, se produjo el primer ruido sobre los alcances y la forma. Primero porque se buscó que todos los involucrados expresen, públicamente, su apoyo a la decisión. Segundo, porque ya empezaba a discutirse, por lo bajo, cómo se concretaría el incumplimiento.
El gancho
Para entonces, para la Corte, el fallo estaba activo y el gobierno, en la práctica, lo había incumplido. En la cuestas de CABA no ingresaron fondos extra. Desde un despacho oficial se dijo a elDiarioAR que la cautelar estaba en suspenso porque, por haber actuado la Corte como primera instancia y al existir el derecho a que haya necesariamente al menos dos instancias, corría un plazo de respuesta en el que el fallo no estaba activo. Esa respuesta debería, hacerle la semana próxima de manera formal aunque se haya anunciado, en público, la decisión de la revocatoria in extremis, además de la recusación de los cortesanos.
Entre la noche del jueves y la media tarde del viernes, empezó el otro ruido interno. ¿A quién le correspondía desatender el mandato judicial? Según la Corte, el miércoles se notificó a las partes del fallo y desde ese momento estaba vigente. Las partes notificadas, según el expediente, eran la Procuración del Tesoro y Economía. Ahí empezó el tironeo interno.
En Economía, se indicó un circuito que iba de AFIP, que recauda, al Banco Nación, que paga. Dato: en los dos organismos hay dirigentes del ecosistema Cristina: Carlos Castagneto en el primero, Silvina Batakis, muy cercana a Wado, en el segundo. Según explican en gobierno, AFIP no ejecuta pagos por lo tanto no tiene nada que ver. Y el BNA se limita a hacer los pagos que le indican. En la entidad sostenían, ayer, que debería existir una indicación de la secretaría de Hacienda en la que detalle, si hubiera, cambios en los montos que debe pagar, de manera automática.
Desde Talcahuano 550, la sede de la Corte, hubo mensajes sobre ese asunto. Se aceptó que en el expediente figuran la Procuración del Tesoro y Economía pero, para ellos, la figura que participó en la Causa en nombre del Ejecutivo, fue De Pedro. “El funcionario de más rango que estuvo en la Corte, el que defendió la postura del Gobierno, presentó medidas y participó de las mediaciones, fue el ministro del Interior. Para la Corte fue un protagonista central en la causa”, dijo a elDiarioAR una fuente judicial involucrada con todo el trámite.
Este jueves, según fuentes del gobierno, Fernández le encomendó a Zannini que se haga cargo del expediente para centralizar las decisiones. Zannini, de hecho, no intervino en ninguna reunión en el máximo tribunal, sino que lo hizo su segundo, Horacio Diez. Con sorpresa, además, se advirtió que los organismos actuantes eran Economía y la Procuración, y que no figuraba Interior, a pesar de que fue el que llevó adelante la cruzada política respecto a la pelea con CABA, al punto que desde ese ministerio se aportó, por ejemplo, el número de que financiar el traspaso de la Policía requería del 0,92% de fondos de la coparticipación primaria.
PI