Tras retomar el debate a las 10.30 de este viernes, después de dos días de discusiones en el recinto, la sesión de la Cámara de Diputados por la ley Bases, o ley ómnibus, empezaba ya con los últimos oradores del kilométrico listado para votar el proyecto en general esta misma tarde. El oficialismo, con la ayuda de la oposición aliada y dialoguista, espera conseguir un la aprobación en general por un amplio margen de votos aunque sigue trabajando en conseguir los apoyos para el articulado.
Por eso en las últimas horas se realizaron concesiones: el quite definitivo del superpoder presidencial sobre el tema fiscal y, sobre todo, cierta flexibilización en el proceso de privatización. Se dividió en grupos a las empresas públicas para que los aliados puedan tener la libertad de acompañar algunas y rechazar otras en la votación en particular.
Esta votación, artículo con artículo, se postergará para la semana próxima. Como se explicó en esta nota, son más de 350 artículos por lo cual ese proceso posterior a la votación en general es largo y engorroso. El cuarto intermedio hasta el martes de la semana próxima le daría más tiempo al oficialismo para seguir haciendo correcciones y concesiones a la opsición y, de esta manera, blindar los apoyos para que la ley ómnibus que se envíe al Senado no sea una cáscara vacía.
De hecho, esta tarde el ministro del Interior, Guillermo Francos, llegó a la Cámara de Diputados para estar presente al momento de la votación. El funcionario ingresó al edificio y se reunió con el presidente de la Cámara baja, Martín Menem. Y había estado este jueves en uno de los palcos junto a la secretaria general de la Presidencia, Karina Milei.
Fuera del Congreso, represión
El martes la discusión se dio mientras las fuerzas de seguridad avanzaban con camiones hidrantes, balas de goma y gas pimienta para hacer retroceder a los manifestantes que se expresaban en la plaza del Congreso en contra de la propuesta del Ejecutivo. El protocolo comandado por a ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, dejó una veintena de heridos, entre manifestantes y trabajadores de prensa. Sin embargo, en declaraciones públicas la funcionaria consideró que “no hubo ningún incidente grave” y remarcó que su gestión seguirá “manteniendo el orden público”.
En el inicio de la tercera jornada, varios diputados de la oposición repudiaron el accionar de las fuerzas de seguridad, mientras que el operativo fue defenido por representantes del partido libertario.
El vocero presidencial, Manuel Adorni, destacó en su conferencia de prensa habitual “la titánica tarea” de las fuerzas de seguridad en el día de ayer. Informó que hubo ocho detenidos por los incidentes, y afirmó que quien “viole la ley será castigado”.
DTC/JJD