Cristina Fernández de Kirchner recibiría esta tarde a Axel Kicillof, luego de varias semanas de silencio entre ambos y un clima enrarecido a partir de que el gobernador se negara a opinar sobre la postulación de la expresidenta como candidata a encabezar el PJ Nacional.
El encuentro, confirmado por el sitio Cenital, monopolizó las charlas en el peronismo y generó distintas especulaciones a cuatro días del cierre de listas. La lectura más extendida es que un posible acuerdo entre Cristina y Kicillof terminaría de erosionar las chances del riojano Ricardo Quintela, quien hasta ahora resiste en su idea de ir a una interna contra la expresidenta.
Desde el entorno de Kicillof, que tenía la agenda de este martes liberada de cualquier actividad de gestión, eran evasivos sobre la posibilidad de que se concrete la reunión. Conscientes del malestar interno abierto en su propio frente, tampoco admitían la versión de que se llevaría a cabo en la casa de Cristina, algo que muchos considerarían una señal de “sumisión” del gobernador frente a la jefa del Instituto Patria.
Si bien Kicillof no se expresó sobre la interna del PJ Nacional, lo cierto es que algunos de sus armadores bonaerenses, como los intendentes Jorge Ferraresi (Avellaneda) y Mario Secco (Ensenada), están volcados a la campaña de Quintela para presidir el partido, mientras organizan el acto del 17 de octubre en Berisso que tendrá al gobernador como principal orador, al que no invitaron a Máximo Kirchner ni a ningún representante de La Cámpora.
“Teníamos desde hace días la información de que podrían reunirse este martes a la tarde y nos parece razonable que existan conversaciones, no implica nada más que eso”, le bajó el tono en diálogo con elDiarioAR un dirigente cercano al gobernador, que hoy colabora explícitamente con la candidatura de Quintela. Sobre la posibilidad de que haya un acuerdo con Cristina, opinó: “No lo descartamos, pero creemos que Axel antes de decir nada se reunirá con los demás gobernadores del espacio y fijarán una posición conjunta. Hoy todos ellos están en silencio, no solo Axel, se manejarán como un equipo”.
Lo cierto es que en ese mismo grupo hay distintas interpretaciones sobre lo que podría implicar abrir una interna partidaria. Mientras algunos envalentonan a Quintela para que se anime a competir contra Cristina, hay quienes tienen una postura más cauta porque creen que eso podría jugarles en contra. La lectura es sencilla: si el riojano compite y pierde, eso será perjudicial para Kicillof, ya que Cristina y La Cámpora se creerán revalidados para tener una vez más la lapicera en las legislativas de 2025.
“Creo que no habrá interna partidaria, terminarán negociando, pero la interna política no terminará por eso”, reconoció un armador de Kicillof.
Una encuesta de la consultora Prosumia circulaba este martes con intensidad en los grupos de WhatsApp de las distintas tribus peronistas. El sondeo, que lleva el título “Cristina presidente, La Cámpora al poder”, tiene un dato demoledor para Quintela: afirma que entre los afiliados del PJ, Cristina se impondría por el 70% en una interna contra el riojano.
Sin embargo, también hay un detalle insoslayable para el Instituto Patria: al medir la imagen de los distintos referentes partidarios, Kicillof es el mejor posicionado con 77,8% de positiva entre los militantes, arriba de Cristina, que llega al 73,2%. Máximo Kirchner, con apenas 33,6%, es según este sondeo el dirigente con peor imagen en todo el peronismo. Además, 9 de cada 10 encuestados aseguran que la llegada de Javier Milei a la Rosada es culpa del peronismo y una mayoría pide “nuevas ideas” (¿o canciones?) para reconstruir a su espacio político.
LA/DTC