Mientras la Justicia investiga en paralelo la muerte de Daniel Barrientos, el chofer de la línea 620 asesinado en la madrugada del pasado lunes en La Matanza por delincuentes que subieron a la unidad en ocasión de robo, y las posteriores agresiones al ministro de Seguridad bonaerense, Sergio Berni, cuando concurrió a la manifestación de los compañeros del conductor fallecido y fue sorprendido por golpes y proyectiles, el conflicto entre Provincia y los miembros del gremio del transporte se agrava tras la detención este miércoles de dos colectiveros después de varios allanamientos en busca de pruebas del ataque al funcionario.
A raíz de los procedimientos de la Policía de la Ciudad en las últimas horas del miércoles por orden de la jueza Luisa María Escrich, titular del Juzgado en lo Penal, Contravencional y de Faltas de CABA Nº 20, que terminaron con las detenciones de Jorge Oscar Galiano y Jorge Ezequiel Zerda, ambos choferes investigados por las agresiones a Berni, las líneas de colectivos 218, 284, 325, 378, 622 y 628, de la empresa Almafuerte, y la 620 y 328, pertenecientes la firma Nueva Ideal, decidieron este jueves un paro sorpresivo y salieron a hablar con los medios de comunicación para mostrar su repudio con el accionar de las fuerzas de seguridad, al tiempo que acusaron al ministro bonaerense de “hacer un circo, en lugar de usarse los recursos para encontrar” a quienes asesinaron a Barrientos.
La Unión Tranviarios Automotor (UTA), por su parte, reclamó “la libertad inmediata de los compañeros detenidos, que obviamente se encuentran a derecho” y exigió “que la justicia y las fuerzas de seguridad pongan su empeño total para encontrar y juzgar a los asesinos del compañero Daniel Barrientos”.
A través de sus redes sociales, la UTA dijo: “Repudiamos la violencia y pedimos que se entienda el dolor y la impotencia”. Un texto que lleva la firma del Consejo Directivo Nacional, planteó: “Estamos viviendo un momento en el que nuestra sociedad por diversos motivos se encuentra crispada, nerviosa, intranquila, irritable, y donde se generan hechos de violencia. La violencia, lamentablemente, está instalada”.
“Los detenidos son trabajadores que quizás, será cuestión de probarlo, habrían cometido la agresión al Ministro de Seguridad de la Provincia de Buenos Aires Dr. Sergio Berni (dejando aclarado que él no hizo ninguna denuncia al respecto, según lo ha manifestado públicamente)”. dijo el gremio. “Sorprende la celeridad para la detención de trabajadores. Hagan el mismo esfuerzo y despliegue para atrapar a los delincuentes, no para trabajadores víctimas de la impotencia y desamparo de parte del Estado en todas sus variantes, que tiene la obligación de cuidar a los choferes y a toda la sociedad”, dice el comunicado de la UTA. “Reclamamos la libertad inmediata de los compañeros detenidos, que obviamente se encuentran a derecho; y exigimos que la justicia y las fuerzas de seguridad pongan su empeño total para encontrar y juzgar a él/los asesinos de Daniel Barrientos”, reclamó.
Las detenciones de Galiano y Zerda
Dos participantes de la protesta por el crimen del colectivero Daniel Barrientos en la que fue agredido el ministro de Seguridad bonaerense Sergio Berni fueron detenidos este miércoles por orden de la Justicia porteña bajo los cargos de atentado contra la autoridad agravado, que prevé una pena de entre seis meses a dos años de prisión.
Los detenidos, Jorge Oscar Galiano y Jorge Ezequiel Zerda, serían también choferes de colectivo y fueron apresados en un procedimiento de la Policía de la Ciudad en las últimas horas del miércoles por orden de la jueza Luisa María Escrich, titular del Juzgado en lo Penal, Contravencional y de Faltas de CABA Nº 20.
En la causa, caratulada como “NN s/ atentado contra la autoridad agravado por poner las manos en la autoridad” (figura tipificada en el artículo 238 inciso 4 del Código Penal), interviene el fiscal Carlos Fel Rolero Santurian, de la Fiscalía Penal, Contravencional y de Faltas Nº 31 de CABA.
Tras la detención, Galiano y Zerda fueron trasladados a la sede de la Fiscalía, ubicada en avenida Paseo Colón 1333 piso 7 del distrito porteño.
La causa por la cual fueron apresados se inició a partir de una denuncia de la Policía de la Ciudad, que el lunes pasado intervino en la manifestación que llevaban adelante los colectiveros para llevarse a Berni del lugar.
Hasta ese momento Berni había sido agredido con golpes de puño en la cabeza y piedrazos durante largos minutos que le produjeron sin que ninguna fuerza pública interrumpiera la agresión: los golpes le produjeron una fractura en el malar y una conmoción en el cráneo.
No descartan más detenciones
La Justicia avanza con la identificación de más agresores del ministro de Seguridad Bonaerense, Sergio Berni, y podría haber más detenciones en las próximas horas.
El fiscal penal y contravencional porteño, Carlos Rolero, ya tiene en su poder los legajos de los choferes que fueron secuestrados de dos empresas e intenta determinar a partir de los mismos si estuvieron presentes el pasado lunes en el cruce de Alberti y Avenida General Paz donde el ministro se había acercado para dialogar con los colectiveros.
Por el momento, los dos detenidos que tiene el caso van a ser indagados mañana en la sede de la fiscalía por lesiones graves y atentado a la autoridad y, es probable, que el mismo día recuperen la libertad por no tener antecedentes..
No obstante, las fuentes no descartaron nuevas detenciones a partir de la identificación de más choferes que pudieron haber agredido al Berni el lunes pasado.
Qué pasó con Berni
Las agresiones se produjeron el lunes en horas del mediodía en el cruce de Juan Manuel de Rosas y General Paz, escenario de la protesta de los compañeros del colectivero asesinado de la línea 620 y un ámbito cuya jurisdicción le corresponde a la propia Policía porteña.
Las agresiones se produjeron el lunes en horas del mediodía en el cruce de Juan Manuel de Rosas y General Paz, escenario de la protesta de los compañeros del colectivero asesinado de la línea 620 y un ámbito cuya jurisdicción le corresponde a la propia Policía porteña.
Luego de que Berni y el ministro de Transporte bonaerense Jorge D'Onofrio dejaran el lugar, ocho efectivos de la Policía porteña fueron atendidos con lesiones por el Same en razón de los golpes y objetos contundentes arrojados sobre ellos, según dijo el ministro de Justicia y Seguridad porteño Eugenio Burzaco.
Por otro lado, el propio Berni se había comunicado el martes con el fiscal Fel Rolero Santurian para transmitirle su intención de impulsar la causa penal que investiga la agresión que sufrió en esa jornada, según informaron fuentes del ministerio público porteño.
La causa tramita en el Juzgado en lo Penal, Contravencional y de Faltas porteño Nº 20 pero no es la única que se inició por las agresiones recibidas por Berni y sus colaboradores.
Otra denuncia por los mismos hechos, presentada por el ministro de Justicia bonaerense Julio Alak bajo las figuras penales de atentado contra la autoridad, lesiones graves e intimidación pública, quedó radicada en el Juzgado Criminal y Correccional Nº 24 de la Capital Federal, a cargo de Alfredo Godoy, con la actuación de la fiscal Romina Monteleone, titular de la Fiscalía en lo Criminal y Correccional Nº 37.
Por otro lado, la abogada Valeria Carreras denunció el episodio en el fuero federal de Comodoro Py, donde pidió que se investigue la presunta conexión de sectores políticos con las agresiones sufridas por Berni. Tras el sorteo, esa denuncia quedó radicada en el Juzgado Federal Nº 9, que subroga María Eugenia Capuchetti, mientras que el fiscal será Carlos Stornelli.
El crimen de Barrientos, en primera persona
Una testigo que estaba a bordo del colectivo de la línea 620 cuando asesinaron al chofer Daniel Barrientos, relató la secuencia completa de la madrugada trágica y señaló que cuando se bajó de la unidad el hombre “ya estaba muerto”.
“Salí cerca de las 4:20 de la mañana para ir a un turno médico. Me di cuenta que perdí el primer colectivo y, después de hablar por el grupo de WhatsApp que tenemos entre los vecinos por la inseguridad, decidí tomarme el siguiente”, comenzó a contar la testigo, quién quiso preservar su identidad.
En su relato la mujer indicó que se acercó a la parada con un vecino y, en un momento, observaron que un auto claro se acercaba al lugar de forma sospechosa: “Sabíamos que nos iban a robar hasta que dobló y no lo volvimos a ver”.
“A los minutos llegó el 620, me subo y me siento al fondo. Saco el celu para avisarle a mi marido y es en la séptima parada cuando atacan”, continuó la mujer.
En sus declaraciones a TN la testigo señaló que después de hablarle a su esposo se puso los auriculares y a las pocas cuadras escuchó que alguien dijo “denme todo” y comentó: “Ahí veo a un chico con ropa oscura, menudito y con una mochila. Me quedé paralizada, puse mi celular abajo del asiento y me saco la riñonera para dárselas. En ese momento, escucho un disparo, me tiro debajo del asiento y después empiezo a escuchar mas”.
Tras escuchar el primer disparo, la testigo señaló que los delincuentes salieron corriendo y es allí cuando el policía vestido de civil, da la voz de alto. “La gente que estaba adelante vino para atrás por la balacera. Después escucho que dicen ´ya se fue´ y a otro que manifestó 'viste que le di, le di'”, narró. Y agregó: “Empieza la gente a descender por la puerta de adelante. Yo estaba en estado de crisis y es ahí cuando observo que el colectivero ya estaba muerto”.
Al ser consultada sobre la posibilidad de reconocer a los delincuentes, la testigo expresó que “no” ya que todo pasó “muy rápido” y que en todo momento estuvo boca abajo por los disparos y el desorden.
“Es un barrio muy inseguro. Pido más seguridad porque tengo hijos y estamos abandonados”, finalizó su relato.
Con información de agencias.
IG