Todavía es la mitad de la “normalidad” pre pandemia, pero la cantidad de pasajeros en el transporte público del AMBA está casi en los niveles de la semana previa al anuncio de la cuarentena total, que arrancó el 20 de marzo pasado.
El último jueves, la red de transporte que abarca CABA y el conurbano e incluye trenes, subtes y colectivos, tuvo un pico de circulación a lo largo del día: lo utilizaron 2.101.388 usuarios, según un informe del Ministerio de Transporte de la Nación.
Por el aumento de uso, los colectivos podrán circular con "hasta 10 personas paradas" y en trenes "un pasajero parado por metro cuadrado en los espacios libres disponibles. Solo en horarios pico.
Por el aumento de la circulación, la cartera a cargo de Mario Meoni dispuso que los colectivos podrán circular con “hasta 10 personas paradas en los horarios pico” y que en el transporte ferroviario, lo podrán hacer “un pasajero parado por metro cuadrado en los espacios libres disponibles”, pero solo en horarios de mayor demanda.
Hay varios registros de comparación. En relación a la cantidad de pasajeros de principios de marzo, cuando la pandemia era un problema que parecía lejano, los 2,1 millones del jueves representan casi exactamente la mitad. Por entonces, en promedio, usaban los trenes, subtes y colectivos del AMBA, 4.242.450 por día.
Luego vino la primera medida oficial: se suspendieron las clases y se dispuso licencia obligatoria para los mayores de 60 años y los grupos de riesgo. Sin estudiantes, la cifra se redujo a la mitad y en la semana previa a la cuarentena, la circulación promedio fue de 2.227.827 pasajeros.
El dato tiene dos lecturas: refleja, por un lado, que la actividad está cerca de los niveles de normalidad “sin clases”. El sistema educativo involucra en todo el país a 16 millones de personas, de las cuales más de 4 millones son el el AMBA. Con la suspensión de las clases, la cantidad de pasajeros se redujo drásticamente. Comparado con ese indicador, la actividad es similar a la prepandemia.
Por el otro lado, el aumento en el uso del transporte público, que es un claro vector de contagio, puede leerse como un indicio delicado frente al riesgo de un rebrote de casos de COVID-19, del que ya hay señales en CABA e indicios claros en el Gran Buenos Aires.
El lunes pasado, el gobierno autorizó a que el personal doméstico pueda utilizar el transporte público. En la práctica, muchos lo hacían, pero posiblemente el aumento de circulación haya tenido que ver con esa medida que significa que entre 800 ml y 1 millones de personas estén habilitadas a viajar en trenes, subtes y colectivos.
El aumento, según los datos oficiales, es mayor proporcionalmente en la red de colectivos. Antes de la cuarentena, en cada unidad viajaban por día, en promedio, 582 pasajeros. El último jueves, día de pico, lo hicieron 358 pasajeros. Un 62% de lo que lo hacían en marzo.
Otro indicador para observar es qué zonas se produce la mayor circulación. En diciembre, el 60% de los viajes eran dentro del conurbano, el 20% en CABA, el 17% de provincia a CABA y el 3% de CABA a provincia. El dato que se mueve, en aumento, es el número de pasajeros de provincia hacia CABA que en octubre era de 15%.
El informe de la primera quincena de diciembre mientras un aumento de más de 10% respecto a noviembre, cuando el promedio fue 1.727.605 y de más del 20% respecto a octubre, que fue de 1.461.626 pasajeros.
PI