León Gieco cantó este viernes su emblemática canción “Solo le pido a Dios” ante el papa Francisco y más de un centenar de dirigentes argentinos que participaron en Ciudad del Vaticano de un congreso en honor a los diez años de pontificado de Jorge Bergoglio, organizado por el Instituto de Diálogo Interreligioso (IDI).
La entidad que el Papa impulsó cuando era arzobispo de Buenos Aires, valoró hoy “la tarea” de Bergoglio al destacar que “pudo traducirse en proyectos que alcanzan la dimensión universal” en varias temáticas, entre las que se mencionó el medio ambiente, la pobreza, el trabajo, los migrantes, la educación y la conversación entre credos.
Las “conclusiones y desafíos” del IDI se dieron a conocer en la segunda jornada del congreso “De Jorge a Francisco, de Argentina al mundo”, donde participaron en el Vaticano unas 110 figuras del país del ámbito del arte, la política, la educación y la justicia, entre ellas el juez Ricardo Lorenzetti. El momento más emotivo aconteció cuando Gieco interpretó ante el Papa “Solo le pido a Dios”, una suerte de himno ecuménico que concibió en 1978, cuando Argentina y Chile estuvieron a punto de ir a la guerra por el canal de Beagle y hoy interpela el conflicto entre Rusia y Ucrania.
“A través de ponencias y testimonios, hemos recibido importantes luces sobre la esencia que debe animar nuestras prácticas a favor del diálogo y el encuentro entre los hombres, y también sobre los métodos conducentes a desarrollarse con ese espíritu en nuestra casa común”, señalaron desde el IDI, invitando a la dirigencia y la ciudadanía a apelar a “una conciencia basada en la coherencia y en el vínculo entre la teoría y la praxis”.
“Comprobamos la madurez conceptual y metodológica de lo que a cada uno le toca hacer y aportar en nuestros distintos ámbitos, y la diversidad de prácticas que deberíamos llevar a cabo en la Argentina y el mundo”, añadieron.
En el comunicado, señalaron que, “como argentinos, verificamos que lo que hemos realizado no resulta suficiente. Que existen enormes desafíos y preguntas en los espacios en los que cada uno de los participantes desarrolla su función en la sociedad. En este sentido el ejercicio del diálogo, lejos de ser una señal de debilidad, identifica nuestros puntos en común y deja de lado los matices que nos diferencian, buscando soluciones concretas a los problemas de la gente”.
Fuentes del Instituto, donde participan como fundadores el sacerdote Guillermo Marcó, el rabino Daniel Goldman y el dirigente musulmán Omar Abboud, calificaron como “increíble” el encuentro. Sostuvieron que Francisco, al hacerse presente en la Sala del Consistorio para hablar un momento ante los concurrentes, “valoró el trabajo por el diálogo y la cultura del encuentro de todos los que participamos en el Congreso”. Mencionaron también que el sumo pontífice “pidió un minuto de silencio para reflexionar sobre la importancia de dialogar, algo que fue muy cálido y muy lindo”.
Luego de esas palabras y de saludar a cada uno de los presentes, Gieco cantó su guitarra y armónica, sentado en primera fila y muy próximo al Papa, según se ve en las fotos difundidas por el Vaticano. Además de las palabras de Francisco, las actividades incluyeron la plantación de un olivo en los Jardines Vaticanos junto al presidente del Governatorato, el cardenal Vergáz Alzaga, en conmemoración del plantado por el entonces arzobispo porteño Bergoglio el 29 de marzo de 2000 en la Plaza de Mayo.
“Inspirados en tu mensaje, los participantes de este congreso, trayendo una voz que nos une en la diversidad, celebramos estos 10 años de tu pontificado con el deseo de recibirte pronto en tu tierra”, finalizó el comunicado del IDI.
LC con información de agencia Télam