La justicia, mediante el magistrado federal de Azul, Gabriel Di Giulio, resolvió inhibir por 90 días los bienes muebles e inmuebles de Raúl Pérez Roldán en la causa que investiga un presunto lavado de activos.
La decisión se tomó tras la denuncia del ex tenista Guillermo Pérez Roldán contra su padre, a quien acusó de violencia y estafa en su económica.
La resolución que fue tomada el martes, tuvo ayer al ex deportista como partícipe de una audiencia virtual en la que prestó caución y ratificó su denuncia junto a la ex tenista Graciela Pérez.
Según informó Clarín, esta medida se tomó apenas una semana después de que el juez Di Giulio, en consonancia con el fiscal Santiago Eyherabide, determinara que los delitos denunciados no prescribieron y deben ser investigados.
La nueva resolución no sólo dispuso la inhibición general de todos los bienes de Raúl Pérez Roldán, sino que también incluye “la prohibición de innovar con relación a cajas de seguridad y títulos valores que pudiera tener, bienes inmuebles y muebles y cuentas bancarias del denunciado”, detalló Juan Ignacio Pascual, abogado de los denunciantes.
Además, el juez libró un ofició al Banco Central, la Cámara Nacional de Valores y los registros de inmuebles y automotor para determinar el patrimonio del acusado.
Los delitos denunciados por Guillermo Pérez Roldan y Graciela Pérez son por lesiones graves y leves, reducción a la servidumbre, abuso sexual, privación ilegítima de la libertad y administración infiel.
Mientras que las medidas de prueba pedidas por el juez apuntan a comprobar si existió el delito de lavado de dinero, algo que es de mucha importancia para los denunciantes ya que podría facilitar el acceso a una reparación económica.
En tanto, Di Giulio había determinado la semana pasada que las denuncias por maltrato físico y psicológico tienen que ser investigadas por la justicia local, no la federal, por lo que se declaró incompetente y resolvió el pase de la causa a la justicia provincial con jurisdicción en Azul.
Guillermo Pérez Roldán denunció que su padre lo sometió a todo tipo de agresiones físicas y psicológicas desde su infancia y, a la vez, lo acusó de haberlo estafado, despojándolo de los ingresos que él generó durante su carrera profesional en la que obtuvo nueve títulos.
Sobre los motivos que lo llevaron a realizar la denuncia ahora, con 52 años, el ex tenista contó que sintió la necesidad de hacerlo: “No solamente tiene que quedar un relato de algunos episodios, tiene que haber algo que le de fuerza a lo que yo estoy acusando, que es un acto criminal”.
“No conozco los términos jurídicos, pero hablamos de derechos humanos. Yo me sentí un poco un ´esclavo´. Y como yo me hago responsable de las cosas que digo y hago, también él, si fue tan valiente para pegarle a un chico latigazos por la espalda, ahora que se haga responsable de la verdad que estoy contando”, sentenció.
Con información de agencias.
IG