El expresidente de River Rodolfo D'Onofrio, con mandatos cumplidos entre el 15 de diciembre de 2013 al 14 de diciembre de 2021, aseguró hoy que la final de Madrid ante Boca por la Copa Libertadores 2018 “no se olvida nunca más”.
“El tercer gol de River en Madrid lo grité, les pedí perdón a quienes estaban conmigo en el palco oficial antes de hacerlo. Daniel (Angelici) no quiso venir por cábala, ya que habíamos visto varios (superclásicos) juntos y siempre ganamos”, recordó.
“El 9 de diciembre del 2018 quedó en la historia para siempre y de eso no se vuelve nunca más, tampoco se olvidarán. La final te la gané a vos, Boca, a diferencia de cuando me fui al descenso por el fracaso de mis dirigentes y los resultados con otros rivales”, afirmó D'Onofrio en TyC Sports.
Entre los clásicos que se jugaron bajo su gestión en la Copa Libertadores también estuvo el suspendido por el gas pimienta en el 2014 y por eso acusó de “atentado peligroso” la agresión a sus exfutbolistas en su primera consagración en este torneo.
Y a pesar de estar en la vereda de enfrente, resaltó al vicepresidente de Boca, Juan Román Riquelme, su “picardía” para regalarle una camiseta a Lionel Messi en el último partido de Eliminatoria, al tiempo que consideró que debía haber jugado en River por su “forma de tratar la pelota”.
D'Onofrio recordó la vez que se presentó y perdió las elecciones con Daniel Passarella en 2009 por apenas cuatro votos: “Lo raro pasó por la Inspección General de Justicia (IJG): sus votos impugnados los revisaron y los nuestros no. No teníamos poder en ese momento”.
D'Onofrio sucedió a Pasarella, el presidente que quedó marcado por el descenso a la Primera B Nacional en junio de 2011, y desde su llegada la institución conquistó dos torneos locales, una Copa Campeonato, tres copas Argentina, dos Supercopas Argentina, dos Copas Libertadores -una contra Boca en Madrid-, una Copa Sudamericana, tres Recopas Sudamericana y una Copa Suruga Bank.
“Llevarlo al descenso a River era casi imposible y lo lograron de una manera absurda. Con nosotros no hubiese pasado. Daniel era mi ídolo como jugador, pero como dirigente no hizo bien las cosas, nos dejó un club en coma”, apuntó.
Además, el exdirectivo recordó que el día de su asunción, el 15 de diciembre de 2013, le trajeron un cheque que “vencía” en esa misma fecha y “así fueron varios meses siguientes”.
El diálogo con Passarella se “cortó para siempre” por el inicio de una investigación sobre su gestión y un juicio iniciado, aunque “lento porque la justicia en el país es así”.
Por otro lado, el expresidente “millonario” se manifestó sobre el regreso de los barras a las canchas este año después de tres temporadas: “Los dirigentes están sorprendidos. Hay que terminar con esta locura y les dije que actúen ya antes de que sea peor”, dijo.
En las últimas semanas, varios hinchas y socios de River fueron detenidos en las adyacencias al estadio Monumental durante las previas de los partidos.
A su vez, el empresario elogió a Claudio “Chiqui” Tapia al frente de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) por la “valentía” en la elección de Lionel Scaloni como entrenador del seleccionado argentino, pero pidió que se revean “los formatos de los campeonatos”.
D'Onofrio aprovechó la nota para valorar la presidencia del fallecido Carlos Saúl Menem en el país, al que calificó como el “mejor presidente desde la vuelta de la democracia” en la Argentina, en 1983.
“A Alberto Fernández le está costando mucho encaminar la situación, conmigo no tuvo buena relación en el pasado y disiento con él sobre la meritocracia, yo siento que existe el esfuerzo y lo valoro. Y Mauricio Macri fue una oportunidad perdida”, sostuvo.
“Yo quisiera ser presidente de la Nación como cualquier argentino. Me gustaría ayudar para que no haya hambre”, añadió D'Onofrio.
El expresidente riverplatense explicó que Angelici tenía “mucho poder por su relación con Mauricio Macri” y comentó que le gustaría “tomarse un café después de dos años” sin verse.