El fiscal jefe de Neuquén, Maximiliano Breide Obeid, encabezó este lunes dos allanamientos de la fiscalía de Delitos Ambientales y Leyes Especiales en las sedes de la empresa Comarsa, que trata residuos petroleros de Vaca Muerta en la capital provincial y el pueblo de Añelo. Los procedimientos, llevados a cabo tras una denuncia por supuesta contaminación ambiental, comenzaron por la mañana y finalizaron por la tarde. Junto al fiscal jefe participó el equipo de la fiscalía de Delitos Ambientales y Leyes Especiales y personal de la Policía de Neuquén de las áreas de criminalística y de informática, autorizados por una jueza de garantías.
Como medida previa, la fiscalía requirió informes a la Subsecretaría de Ambiente de la provincia sobre el funcionamiento de la empresa. La denuncia fue presentada la semana pasada por la Asociación Argentina de Abogados Ambientalistas y apunta a dos acusaciones: que la planta de tratamiento de residuos peligrosos ubicada en el parque industrial de Neuquén, a metros de centros poblados, no contaría con las medidas básicas para prevenir la contaminación del ambiente; y que la compañía habría acopiado residuos especiales sin tratamiento y los habría volcado al suelo. Los letrados también apuntan contra ocho petroleras que contratan a Comarsa (YPF, Pan American Energy, ExxonMobil, Shell, Techint, Vista, Chevron y Pampa Energía) y a las autoridades del gobierno provincial de Omar Gutiérrez, no sólo por la contaminación sino por la presunta cesión de tierras fiscales a la firma cuestionada. Hasta ahora, Comarsa respondió que cumple con la ley, mientras que YPF aseguró que la responsabilidad del tratamiento corre por cuenta de la contratista.
AR