La Reserva Federal de los Estados Unidos (FED) mantuvo hoy su tasa de interés de referencia ─que establece lo que los bancos se cobran entre sí por los préstamos a un día y regula otras formas de deuda de consumo─ sin modificaciones, en un rango entre 5,25% y 5,50%, el más elevado de los últimos 22 años. Con estos valores, los rendimientos de los Bonos del Tesoro a 2 años también alcanzaron su nivel más alto en mucho tiempo: llegaron hasta 5,14%, su máximo desde 2006.
Si bien se esperaba que el organismo de Washington no efectuara ningún aumento lo cierto es que perdura la incertidumbre respecto al objetivo del Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC) que fija las tasas a partir de ahora. Esta entidad prevé una suba en lo que resta del año, a la que le seguirán dos recortes en 2024.
En caso de que eso ocurra, la tasa promedio de los fondos federales se situaría en torno al 5,1%.
La FOMC, además, explicó que la actividad económica continúa “expandiéndose a un ritmo sólido”, pero que el aumento del desempleo se fue desacelerando en los últimos meses, pese a que permanece fuerte. Esto último permitió a la FED avanzar contra el desajuste entre la oferta y demanda de empleo que había llegado a alcanzar una proporción de dos puestos por cada trabajador disponible.
El dato de inflación también mejoró considerablemente, pero la tasa anual continúa muy por encima del objetivo impuesto por la FED, del 2%. Para julio, la inflación subyacente, que excluye precios de alimentos y energía, fue del 4,2%.
ACM con información de agencias.