El Fondo Monetario Internacional (FMI) advirtió que la dolarización de la economía “no sustituye a una política fiscal sostenible”. Así lo señaló Rodrigo Valdés, el director del Departamento del Hemisferio Occidental de ese organismo.
“Dolarizar es una pregunta que los mercados hoy día se hacen más que por el tamaño, por las condiciones iniciales de cantidad de reservas que tiene la Argentina. Milei tocó este tema y ellos tienen un plan que están trabajando todavía y yo no me adelantaría en la discusión”, analizó el economista chileno.
Para Valdés, dolarizar es un mecanismo que “toma su tiempo y requiere mucho apoyo político”, por lo que destacó que Milei “va a tener que buscar” el respaldo de la dirigencia política para aplicar esa medida, en caso de resultar electo en las próximas elecciones.
En una entrevista con el diario El País de España, Valdés consideró que un programa de dolarización no implicaría “no tener un programa” con el Fondo Monetario. Por eso, destacó: “Tenemos uno con Ecuador, que es un país dolarizado, y el último fue muy exitoso”.
En esa línea, indicó que “para nosotros es central reconocer la forma que organiza un país su política monetaria, su política cambiaria, temas que son de plena soberanía. Lo que sí nos interesa es que estén las bases macroeconómicas para que esos sistemas funcionen en el largo plazo y que cuando haya cambios la transición mantenga la estabilidad”.
“Nosotros trabajamos con 190 países, con todas las instituciones posibles que existen dentro de ellos. Lo que nos interesa es que funcionen bien dependiendo de sus configuraciones macroeconómicas”, agregó Valdés. Sostuvo también que “algo muy importante para nosotros es que lo que uno haga en el mundo monetario cambiario no sustituye lo que es necesario hacer en el mundo fiscal. Esta parte requiere un esfuerzo enorme de los países y siempre uno entiende que el corto plazo y el largo plazo están en tensión”.
Según el economista, “todos los países requieren una política fiscal sostenible que lleve a tener deudas no demasiado altas y dolarizar o no dolarizar no sustituye esa tarea”.
Por otro lado, el funcionario del organismo multilateral resaltó que este año hubo una “consolidación” de la desaceleración de las economías regionales al comparar con 2022, pese a algunas excepciones como México y Brasil.
De todos modos, aclaró: “Vemos que esta desaceleración en muchos países es sana porque tuvieron un despegue post-Covid muy fuerte y requerían cierta desaceleración para hacer el próximo crecimiento sostenible. Hacia adelante, el partido está por jugarse. Hay claro crecimiento, pero hay que trabajar en levantar ese crecimiento potencial”.
“Hay un tema regulatorio, y de estabilidad y coherencia, del que hay que ocuparse. Es innecesario tener primas por riesgo para los inversionistas porque tenemos marcos regulatorios que no son los más adecuados. Además, hay un tema en seguridad y crimen en la región al que hay que darle mayor importancia desde el punto de vista de la macroeconomía”, aseguró.
LC con información de agencia NA