En el primer día de julio el Banco Central revirtió la tendencia de los días anteriores y volvió a vender dólares para cubrir demandas de pago para energía. La jornada de viernes cerró con ventas por US$190 millones.
Desde el lunes, día en que el Central anunció más restricciones en el régimen de importaciones, y hasta el jueves la entidad compró dólares de manera sostenida. Esto le permitió cumplir con su meta de acumulación de reservas para la primera mitad del año, según confirmó el vicepresidente de la entidad, Sergio Woyecheszen.
“Veníamos desde el lunes con una fuerte compra. El miércoles fue muy importante, con US$583 millones y el jueves arriba de US$530 millones. Estamos cerrando no solo una buena semana sino un buen mes de junio y, en el semestre, con el cumplimiento de lo que eran nuestro propios objetivos de acumulación de reservas”, aseguró ayer Woyecheszen en diálogo con AM 750.
Según datos oficiales, el jueves las reservas cerraron hoy en US$42.784 millones en términos brutos, unos US$4.780 millones por arriba del cierre de la semana pasada, gracias a haber acumulado más de US$ 1.500 millones en compras en el mercado cambiario y a la transferencia de unos US$4.000 millones en DEG que envió el FMI tras la aprobación de la primera revisión del acuerdo de Facilidades Extendidas.
Sin embargo, este viernes la tendencia se revirtió, con la venta de US$190 millones. Según informó el corredor Gustavo Quintana, luego de la paralización postmedidas, se normalizaron las solicitudes de compra pendientes y pagos de importación de energía, que volvieron a exigir ventas oficiales. “Fuentes del mercado indicaron que los pagos de importación de energía insumieron hoy unos US$200 millones”, detalló en su cuenta de Twitter.
Por otra parte, en la semana que termina el tipo de cambio mayorista subió $1,21, por debajo del ajuste de $1,32 registrado en la semana anterior. Cerró en una cotización de $125,45, 22 centavos arriba que al final de la rueda anterior.
MT