La quita de los subsidios se hace notar en las boletas de agua. A partir de la entrada en vigencia de la segmentación dispuesta por Agua y Saneamientos Argentinos (AYSA), los hogares de las zonas geográficas de valor alto comenzaron a recibir en diciembre facturas en las que se refleja la eliminación abrupta de la totalidad de la ayuda estatal, que ascendía a alrededor del 60% de la tarifa. Así, quienes pagaban $500, recibieron de repente una boleta de $1.250, lo que representa un alza de 150%.
AYSA impuso su propio esquema de segmentación, que rige para su zona de concesión: la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y 26 partidos del conurbano. A diferencia de lo que definió la Secretaría de Energía para la electricidad y el gas al segmentar los hogares por ingresos y por volumen de consumo, la empresa que conduce Malena Galmarini avanzó con un esquema de segmentación geográfica, separando a la zona de influencia de AYSA en zonas de valor alto, medio y bajo.
Las zonas de valor alto se quedaron con 0% de subsidio a partir de noviembre, lo que se ve efectivamente en las boletas recién a partir de los meses siguientes, según el ciclo de facturación. Los hogares ubicados en zonas de valor medio, en cambio, vieron reducida la ayuda en 40% en noviembre y le restan dos quitas más: de 20% en enero y del 30% restante en marzo, momento en que deberán afrontar la tarifa plena.
Los usuarios de las zonas de valor bajo también experimentaron un salto notable en las boletas a partir de noviembre, al ver plasmada una quita del 45% de los subsidios. En enero se les retirará un 30% adicional y en marzo, otro 10%. Así, se quedarán solo con un 15% de subsidio a partir del tercer mes del año.
Tal como anticipó Galmarini, quienes ya cuenten con el beneficio de tarifa social recibirán un descuento adicional que neutralice los efectos de la quita del subsidio, por lo que no verán afectado el importe en su factura. Este descuento se mantendrá hasta la fecha de renovación o cese de la tarifa social. Para aquellos usuarios que ingresen o renueven la tarifa social a partir de noviembre de 2022, se aplicará la misma regla.
Además, los usuarios que no tengan la tarifa social y crean que necesitan conservar la ayuda, pueden pedirla. Está disponible en la página web de Aysa un formulario para solicitar el mantenimiento del subsidio, algo a lo que pueden acceder hogares con ingresos menores a dos canastas básicas familiares ($279.566) o con algún integrante con discapacidad. Los beneficiarios conservarán el mismo esquema de subvenciones que a los hogares denominados de zonales “medio-bajos”.
Por otro lado, también está disponible la posibilidad de renunciar voluntariamente al subsidio. Ambos trámites se puede hacer también presencialmente en las oficinas de Aysa. El renunciamiento tiene que ver, en muchos casos, con evitar las restricciones que impone el Gobierno a quienes reciban subsidios para operar en el mercado de cambios.
Para saber en qué zona está ubicado el usuario, hay que observar el “coeficiente zonal” que aparece en las facturas. Tiene un número, que va del 1,1 a 3,5. Entre 1,1 y 1,45 se ubican los “usuarios residenciales y baldío en zonales bajos. Entre 1,6 y 2,0, los usuarios residenciales y baldío en zonales medios; y entre 2,2 y 3,5, los usuarios residenciales y baldío en zonales altos.
Los recortes de subsidios según la segmentación geográfica
1) ZONA DE INGRESOS ALTOS
-Se quedan sin subsidios a partir de noviembre de 2022
2) ZONALES MEDIOS
- Etapa 1: Subsidio del 40% desde el 1° de noviembre de 2022
- Etapa 2: Subsidio del 20% desde el 1° de enero
- Etapa 3: Eliminación del subsidio desde el 1° de marzo de 2023
3) ZONALES MEDIOS-BAJOS
- Etapa 1: Subsidio del 45% desde el 1° de noviembre de 2022
- Etapa 2: Subsidio del 30% desde el 1° de enero de 2023
- Etapa 3: Subsidio del 15% desde el 1° de marzo de 2023
DT