El Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC, por sus siglas en inglés) de la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed) decidió elevar los tipos de interés del país en 75 puntos básicos, hasta un rango objetivo de entre el 2,25% y el 2,5%, según ha informado este miércoles.
De esta forma, el banco central estadounidense cumplió las previsiones que había adelantado su presidente, Jerome Powell, en la reunión de política monetaria de junio, cuando abrió la puerta a una nueva subida de 75 puntos básicos tras la realizada en dicho encuentro.
Esta es el cuarto incremento desde que la Fed empezó a subir los tipos en marzo.
En un comunicado oficial emitido tras su reunión de dos días, la Junta de Gobernadores del sistema de la Reserva Federal reiteró que espera llevar a cabo más subidas de los tipos en el futuro.
Los aumentos de 0,75 puntos del tipo de interés oficial no se veían desde 1994, cuando, bajo la dirección del histórico Alan Greenspan, el banco central estadounidense llevó a cabo una serie de subidas de los tipos para tratar de evitar un aumento desbocado de la inflación.
Entonces, la tasa de aumento anual de los precios de consumo era del 2,7 %, mientras que el pasado junio se situaba en el 9,1 %, algo no visto en 40 años.
“El comité está fuertemente comprometido con el objetivo de devolver la inflación al 2 %”, indicó el banco central estadounidense, siempre manteniendo “niveles de empleo máximos”.
En este sentido, la oficina destacó que si bien es cierto que algunos indicadores recientes de gasto y producción se han suavizado, la creación de empleo continúa siendo robusta.
Por otro lado, la Fed insistió en que seguirá reduciendo su cartera de deuda pública del Gobierno de EE.UU., compuesta fundamentalmente de letras del Tesoro y de valores respaldados por préstamos hipotecarios.
En la actualidad, el banco central acumula casi 9 billones de dólares en deuda estadounidense.
Como ya hizo en meses anteriores, la Fed se desprenderá en agosto de 30.000 millones de dólares en letras del Tesoro y de 17.500 millones en valores respaldados por hipotecas.
A partir de septiembre, estas cifras mensuales subirán a 60.000 millones de dólares y 35.000 millones respectivamente, y el proceso concluirá cuando se alcancen unos niveles que se consideren “ligeramente por encima” de lo que el banco considera “reservas amplias”, según el plan para reducir el balance publicado por la Fed en mayo.
Con información de EFE.
IG