La venta de la planta bonaerense de Mercedes-Benz, en la localidad de Virrey del Pino, se habría hecho definitiva y pasaría a manos del empresario Pablo Peralta, uno de los dueños del Grupo ST, según difundió InfoGremiales.
Si bien desde la automotriz, en septiembre del año pasado, lo niegan, ya es reconocido dentro de la empresa que, después de 70 años, la marca alemana deja las operaciones en el país en manos de este empresario.
Por un lado, desde 2021, Mercedes-Benz se dividió en dos empresas independientes a nivel mundial. Una, conformada por la producción del utilitario Sprinter y la comercialización de vehículos premium y, la otra, dedicada a la fabricación de Camiones y Buses.
La noticia en cuestión está centrada en la primera de estas empresas, mientras la de vehículos pesados continuará fabricando en la Argentina en la nueva planta que está construyendo en Zárate.
El otro punto importante a tener en cuenta es que Peralta adquiere la empresa en forma personal – junto a un grupo de inversores – pero no es el Grupo ST el que interviene en la operación.
La última información que confirma la venta tiene que ver con la comunicación que los delegados del SMATA trasmitieron, la semana pasada, a los más de 1.000 empleados de la planta.
Los gremialistas explicaron que el 25 de febrero se oficializará el traspaso, más allá de que la concreción del cambio de manos lleve un tiempo mayor.
Durante una reunión con los trabajadores de Mercedes-Benz, los representante del gremio mecánico dieron detalles sobre cómo será el futuro de la compañía, lo que está generando malestar y rechazo de una parte importante de los trabajadores.
Una vez anunciada la venta, se creará una nueva empresa y los trabajadores deberán firmar el traspaso, manteniendo las mismas condiciones laborales que tienen hoy con la automotriz, en cuanto a antiguedad, categorías y convenio colectivo.
Esta decisión no cayó bien en parte del personal ya que se esperaba algún tipo de resarcimiento o plan de retiro, teniendo en cuenta que hay empleados con más de 20 años de la compañía de origen alemán.
Al parecer, según lo comunicado por los delegados, no habría, en esta primer etapa, ninguna opción de este tipo.
Trabajadores de la automotriz señalaron que los delegados explicaron, en esa reunión, que el actual presidente de la empresa, Manuel Mantilla, le habría dicho al secretario de los mecánicos, Ricardo Pignanelli, que si tuviera el dinero para indemnizar a todo el personal y cerrar la fábrica lo haría. Por no contar con esos recursos, según habría dicho el ejecutivo, se optó por una venta a un empresario local.
Con información de InfoGremiales