El banco UBS acordó la compra por más de 2.000 millones de dólares de Credit Suisse, su principal rival suizo, según adelantó el Financial Times. La operación se negoció contra reloj durante el fin de semana con el Gobierno suizo, el Banco Nacional de Suiza y las entidades reguladoras y de competencia de cara a evitar un nuevo desplome en la primera sesión bursátil del lunes. Hay una conferencia de prensa convocada para este domingo.
UBS es el mayor banco del país por volumen de mercado y Credit Suisse el segundo. Envuelto en graves problemas financieros y de imagen, el banco Credit Suisse sufrió una caída del 24% en la bolsa de Zúrich el pasado miércoles, después de que su principal accionista desde 2022, el Banco Nacional Saudí, asegurara que no iba a invertir más en la entidad suiza para sanear sus maltrechas cuentas.
Para calmar al mercado, el Banco Nacional Suizo anunció horas después de ese desplome bursátil un préstamo de 50.000 millones de francos (50.500 millones de euros, 54.000 dólares) a Credit Suisse, lo que permitió que la entidad se recuperara un 19% en la Bolsa de Zúrich el jueves, pero el viernes las dudas de los accionistas regresaron y las participaciones cayeron nuevamente un 8%.
Credit Suisse, fundada en 1856, encadena dos años de pérdidas millonarias: en 2021 fueron de 1.572 millones de francos suizos (1.600 millones de euros, 1.690 millones de dólares), y en 2022 casi se quintuplicaron, hasta los 7.293 millones de francos (7.400 millones de euros, 7.800 millones de dólares). A los problemas financieros se suman muchos otros en torno a la reputación del banco, con varias dimisiones de sus directivos inmersos en distintos escándalos, que han causado una amplia remodelación de la directiva en los últimos años.