Al menos 83 bloqueos “con tránsito interrumpido” tenían lugar este viernes en ocho regiones de Perú, en el décimo día consecutivo de las protestas que exigen la renuncia de la presidenta Dina Boluarte y el cierre del Congreso, y por las que 329 personas resultaron detenidas, acusadas de “alterar la tranquilidad pública”.
La Superintendencia de Transporte Terrestre de Personas, Carga y Mercancías (Sutran) informó que son 83 puntos bloqueados en ocho regiones del país y que hay 15 autopistas nacionales afectadas, según el reporte del organismo subido a sus redes sociales.
Las protestas se sienten con mayor fuerza en el sur del país, históricamente marginado y donde el mandatario destituido Pedro Castillo tenía gran parte de su apoyo político. Ayer jueves se hicieron sentir en el centro de Lima, donde se registraron incidentes con la policía.
Según RPP, la ciudad de Arequipa se encuentra prácticamente aislada por vía terrestre, ya que los manifestantes volvieron a bloquear algunos de los accesos que habían sido despejados temporalmente por policías y militares, sin haberse registrado enfrentamientos directos.
También hay nuevas marchas en Tacna, ciudad fronteriza con Chile a 1.224 kilómetros al sureste de la capital. El país vecino que tuvo que cerrar temporalmente su paso ayer “debido a las manifestaciones en las cercanías del complejo fronterizo peruano de Santa Rosa”, de acuerdo con las autoridades chilenas que ya normalizaron el tránsito.
En la región de Cusco, donde el turismo es el motor de la economía, las autoridades tuvieron que cerrar ayer el aeropuerto por seguridad ante una escalada de protestas violentas desde principios de esta semana, que provocó además la suspensión de las operaciones del tren a Machu Picchu, atracción de interés internacional.
Entre las zonas afectadas en Puno, donde se llevan a cabo las protestas más fuertes, figura la autopista que une la localidad de Chucuito con Desaguadero, uno de los principales puntos de tránsito hacia Bolivia.
Las protestas comenzaron el 7 de diciembre pasado, tras la destitución de Castillo y dejaron hasta el momento 42 muertos: 41 civiles y un policía. Fallecieron también siete civiles por accidentes de tránsito y hechos vinculados a los bloqueos, de acuerdo al último balance de la Defensoría del Pueblo.
El Ministerio Público Fiscal indicó que en total abrió ocho investigaciones por las muertes vinculadas a las manifestaciones para determinar las responsabilidades. Precisó que hay 17 causas relacionadas con heridos, 80 para investigar a quienes presuntamente habrían cometido delitos contra la administración pública, disturbios, violencia, resistencia a la autoridad y entorpecimiento al funcionamiento de servicios públicos; así como tres por los ataques a las sedes del Ministerio Público.
La Fiscalía indicó que, “de acuerdo a las primeras indagaciones”, de las protestas resultaron 531 heridos, de los cuales 355 son civiles y 176 policías, mientras que “se registró la detención de 329 ciudadanos, entre ellos un menor de edad”.
Los edificios públicos y aeropuertos en las regiones donde se anunciaron protestas están resguardados por policías y militares, estos últimos autorizados a intervenir tras la declaratoria de un estado de emergencia a mediados de diciembre, consignó la agencia de noticias AFP.
Perú vive una ola de protestas desde que Boluarte sucedió a Pedro Castillo, destituido por el Congreso horas después de que anunciara el cierre del Legislativo y el establecimiento de un Gobierno de excepción con supresión de garantías constitucionales.
En un intento por aplacar las demandas, el mes pasado el Parlamento peruano adelantó los comicios de 2026 a abril de 2024. Pero los manifestantes exigen la salida inmediata de Boluarte y los miembros del Parlamento a través de un adelanto de elecciones generales y, en algunos casos, la libertad de Castillo. El exmandatario se encuentra detenido en una prisión preventiva acusado de rebelión, entre otros delitos.
LC con información de agencia Télam