El Gobierno de Perú no le permitirá el ingreso al país del expresidente de Bolivia, Evo Morales, a quien acusa de injerencia en asuntos internos, según informaron este lunes las autoridades en un comunicado del Ministerio del Interior a través de la Superintendencia Nacional de Migraciones.
El comunicado informa que la medida restrictiva contra el exmandatario boliviano es extensiva a otros ocho ciudadanos de la misma nacionalidad “por efectuar actividades proselitistas en nuestro país”, de acuerdo con el portal peruano de noticias RPP.
“En los últimos meses, se ha identificado a ciudadanos extranjeros, de nacionalidad boliviana, que ingresaron al país para efectuar actividades de índole política proselitista, lo que constituye una clara afectación a nuestra legislación migratoria, a la seguridad nacional y al orden interno del Perú”, señala el documento publicado también en Twitter.
Asimismo, recalca que Perú es un país soberano y democrático, cuyo ordenamiento migratorio establece que todo ciudadano extranjero en su territorio nacional debe conducirse en cumplimiento del ordenamiento jurídico, especialmente en lo referido a la seguridad nacional y el orden interno.
Desde que Pedro Castillo dejó la Presidencia del Perú por su intento de suprimir el Congreso y gobernar por decreto, Morales utilizó su cuenta de Twitter para referirse a la convulsión social que atravesó el país con esa crisis política, acusando a la “derecha fujimorista” y “medios derechistas” de haber conspirado para destituir al mandatario.
“La crisis política que afecta al hermano pueblo peruano, al Perú profundo especialmente, fue provocada por la conspiración permanente de la derecha fujimorista y medios derechistas contra un gobierno elegido en las urnas cuyo 'delito imperdonable' fue representar a los más pobres”, había apuntado el expresidente boliviano.
Además de Morales, al menos otros diez operadores políticos del Movimiento al Socialismo (MAS) ingresaron al país andino entre 2021 y 2022, según el periódico peruano El Comercio. Desde la destitución de Castillo, la relación bilateral se tensó.
El pasado viernes, el Gobierno peruano cesó en sus funciones a su embajadora en Bolivia, Carina Ruth Palacios Quincho, designada en el cargo por Castillo. Fue a través un decreto que lleva las firmas de la presidenta Dina Boluarte y de la ministra de Relaciones Exteriores, Ana Cecilia Gervasi.
Boluarte ya había declarado la semana pasada que su Gobierno evaluaba qué acciones iba a adoptar sobre Evo Morales por sus actividades en Perú y sus declaraciones sobre la crisis sociopolítica que atraviesa su país.
LC con información de agencia Télam