“Somos conscientes de que Lula es uno de los presidenciables más cristiano. Fue miembro de las comunidades eclesiásticas de base y fue muy amigo de un gran amigo mío: Don Evaristo Arns”. Estas fueron las palabras iniciales del Frade David, franciscano, que al finalizar su discurso bendijo al ex presidente y a quienes lo acompañaban en la conferencia de prensa, este martes en San Pablo. Esa rueda con los periodistas de los padres franciscanos junto a los dirigentes políticos, tuvo como misión dar el apoyo explícito de esta orden religiosa al candidato presidencial y a su vice Geraldo Alckmin. También apoyaron Fernando Haddad, como futuro gobernador de San Pablo.
Frei David mencionó que hoy es el día de San Francisco de Asís y que esa era la mejor celebración. Recordó también todas las medidas en el área de la educación, tomadas por Lula da Silva durante sus dos mandatos (2003-2010). El sacerdote es Fundador de Educafro, una ONG que garantizó el acceso de más de 60.000 estudiantes negros a la universidad. Luego evocó el impulso dado en aquella primera década del milenio a las estrategias para la preservación de la selva amazónica. “San Francisco es considerado el santo de la ecología. Y en esta tierra precisamos del amor del Amazonas. Por eso también declaro que voy a votar en Lula”. A eso agregó que se acercaron a la reunión, que “es preciso asegurar la comida para los pobres y negros; y garantizar su educación”.
Tras los discursos de los curas católicos, que según dijeron será una señal para sus fieles, Lula quiso sin embargo mantenerse firme en un compromiso asumido durante esta campaña: “No voy a hacer uso de la religión como sí hace mi adversario, aún cuando yo sea un ferviente cristiano. Me gusta mucho profesar mi fe. Pero me niego a que sirva para sumar votos como hace (el presidente) Bolsonaro”.
Con todo, el mensaje de los religiosos puede impactar en el mundo católico, que hoy es mayoría entre los cristianos. Y de alguna manera, tendrá reverberaciones en la segunda vuelta de estos comicios, el 30 de octubre próximo. Frei David le hizo una observación al líder petista: “Si usted quiere avanzar en el plano social, para los más vulnerables y en la educación y salud, restituya los mecanismos de fiscalización de las políticas sociales que fueron desmontados por el actual gobierno. De lo contrario, no podrá hacer nada”.
El día transcurrió con el signo positivo para el ex presidente. Obtuvo tres resultados: primero, el apoyo explícito del Partido Democrático Laborista y luego, también en formato de declaración, el aval de Ciro Gomes, que en el cuarto lugar obtuvo 3,05% de los votos. La otra candidata, Simone Tebet, del Movimiento Democrático Brasileño, que llegó tercera con el 4,2%, declaró el sí para Lula, pero con contenido “crítico” según afirmó.
Algunos dirigentes históricos del Partido Socialdemócrata de Brasil (PSDB) optaron por indicar que aprueban a Lula y votarán por él. Entre ellos, figura Persio Arida, ex presidente del Banco Central en el segundo gobierno de Fernando Henrique Cardoso, presidente honorario de la agrupación. También se volcaron al candidato de la Coalición de la Esperanza otros miembros conspicuos de la socialdemocracia brasileña, como Aloysio Nunes Ferreira, ex canciller del gobierno de Michel Temer. El ex ministro cuestionó la decisión de Rodrigo García, actual gobernador de San Pablo que acaba de perder su reelección, de comprometerse “incondicionalmente” con Jair Bolsonaro en el 2° turno de la disputa. “Es una vergüenza, casi el fin del mundo”.
Más aún, criticó ácidamente a su propio partido, el PSDB, que acaba de declarar “neutralidad” ante los dos postulantes al Palacio del Planalto. “Es absurdo que el partido se mantenga indiferente a esa amenaza a la democracia que se avecina”. También le dio su voto a Lula el ex diputado Roberto Freire, presidente del partido Ciudadanía, que formó una federación con el PSDB.