Mónica García señaló que su formación lleva días “en shock”. En una rueda de prensa celebrada este lunes, la ministra de Sanidad y líder de Más Madrid asegura que su partido “no ha recibido ninguna denuncia ni ningún testimonio concreto, ni presentes ni pasados, contra [Íñigo] Errejón. Tampoco ha tenido ni tiene conocimiento de episodios similares a los que se vienen denunciando en los últimos días”, apuntó la ministra de Sanidad, quien compareció junto a las portavoces de las comunidades autónomas y municipales de la agrupación, Manuela Bergerot y Rita Maestre.
Esta es la primera vez que algún vocero de Más Madrid da explicaciones desde que el pasado jueves dimitiese Errejón, uno de los fundadores del partido. Y después de que se conociesen el relato de algunas mujeres, como el de la actriz Elisa Mouliaá, que aseguró en una denuncia policial que el exparlamentario la encerró en una habitación durante una fiesta, se sacó el pene delante de ella y la tocó sin su consentimiento.
“Es verdad que sí que pensábamos que tenía problemas personales”, explicó García, aunque aclaró que desde el partido pensaban que esos problemas “eran de otra índole”. Y añadió: “Intentamos ayudarle varias personas en varias ocasiones y siempre creímos que su situación personal podía mejorar”.
En varias ocasiones García ha dicho que en el partido no tenían conocimiento de los “episodios gravísimos” que se han ido publicando en los últimos días. “Pero ahora bien, y lo digo nuevamente clara y rotundamente, nadie, repito, nadie, ningún militante, ningún cargo, ningún trabajador o trabajadora de Más Madrid conocía las terribles acusaciones, denuncias de agresión, de maltrato y de violencia sexual que estamos conociendo ahora en los últimos días”, inistió García. En esa misma línea, la ministra de Sanidad sentenció que si hubieran “sabido que era un agresor”, no le hubiesen recomendado un proceso de recuperación, habrían acudido “directamente a una comisaría”.
“Por supuesto que no sabíamos que sus relaciones personales estaban atravesadas por el abuso de poder, por la misoginia, la vejación y la humillación”, resumió Maestre, que también quiso reducir la responsabilidad de su partido en las acusaciones que se están publicando contra Errejón. La portavoz municipal de Más Madrid ha insistido en que su partido no tuvo “ninguna constancia, ni denuncia, ni rumor, ni conocimiento de ninguna agresión sexual o psicológica de este tipo”.
Después de leer las denuncias realizadas en redes y publicadas en algunos medios, como el relato de Sara en elDiario.es, o el atestado policial de Mouliaá, Bergerot reconoció que los mecanismos del partido no han funcionado. “A la vista está que todos hemos fallado, como partido y como sociedad”, ha reseñado la portavoz de Más Madrid en la Asamblea de Madrid. Con todo, ha reconocido que los hechos desvelados en estos últimos días son “suficientemente importantes” para que el partido se tome “el tiempo que requiere para reflexionar”.
Eso sí, García quiso también reconocer la respuesta que tanto su partido como Sumar han dado al enterarse de la “gravedad de las acusaciones” contra su excompañero de formación, destacando que le han cesado, le han apartado de los espacios políticos y han puesto “encima de la mesa” la información que habían recibido.
Las portavoces del Más Madrid se han pronunciado también sobre la actuación de la diputada Loreto Arenillas, a la que el partido cesó el viernes al acusarla de encubrir en 2023 una acusación contra Errejón. Con relación a esta cuestión, Maestre ha reseñado que su ya excompañera de partido actuó en ese momento “de motu proprio” e intervino “a espaldas de la organización, de la ejecutiva y del partido”.
Los hechos por los que Arenillas fue cesada se remontan a una denuncia anónima publicada en redes sociales en junio de 2023, entre la campaña de las autonómicas y las generales de aquel año. En un hilo de Twitter, borrado posteriormente, una mujer acusaba al exdiputado de haberle tocado la cola y a Arenillas de encubrir posteriormente el episodio, tratando de “mediar” para que no hiciese público lo ocurrido. Un episodio que no tomó relevancia pública en su momento, pero que algunas personas recuperaron inmediatamente después de la dimisión del portavoz de Sumar.
Estas acusaciones llegaron a la cúpula de Más Madrid cuando se publicaron en la red social, tal y como ha reconocido García. En ese momento, la dirección del partido habló con las dos personas a las que se mencionaba en el hilo, Errejón y Arenillas, y los dos “minimizaron la agresión”, ha aclarado hoy la ministra de Sanidad.
“Las explicaciones posteriores que nos fue dando, vemos ahora en otros acontecimientos que fueron insuficientes, que fueron ambiguas, y asumimos el error de no haber ido más allá en nuestras evaluaciones, de haber dado por buena su versión”, ha añadido Maestre sobre la versión que Errejón le ha dado de estos hechos.
Tras estas declaraciones, Arenillas ha reaccionado en Twitter para reseñar que ella informó a la dirección del partido del contenido de la denuncia anónima publicada en redes en ese momento. La exdiputada autonómica ha asegurado que comunicó estos hechos tanto a la secretaria de Organización de Más Madrid en ese momento, la actual portavoz del partido, Manuela Bergerot, y a la secretaria de Feminismos, Cristina Castillo. Ha aprovechado esta publicación para informar, asimismo, que ella desconocía “por completo los testimonio y agresiones a mujeres” que se han ido desvelando.
“Lejos de tapar u ocultar nada, lejos de minimizar los hechos, me puse a disposición del director de Comunicación para explicarlo públicamente si era necesario”, añade, en su texto. Con todo, Arenillas pide que se investiguen las acusaciones de encubrimiento contra ella, “desde la independencia y la presunción de inocencia”, informa Íñigo Aduriz.
En su publicación, la exdiputada de Más Madrid pide ejercer su derecho “a la defensa” de lo que califica como “abuso de autoridad por parte de la dirección del partido”. Alegando esta razón sostiene que su suspensión cautelar o la exigencia de su dimisión debe ser requerida por el comité de garantías, “el único órgano con competencias para hacerlo”, apostilla. Por lo tanto, anuncia que denunciará ante este órgano una “vulneración grave” de los estatutos y advierte, su cese puede terminar en los tribunales.