Están acá, en el sitio de la Casa Rosada, y pueden ser consultados del primero al último. De acuerdo con el registro que lleva el Gobierno, el presidente Alberto Fernández alcanzará con el de hoy, en la apertura de las sesiones ordinarias del Congreso de la Nación, la significativa cifra de 555 discursos desde su asunción, el 10 de diciembre de 2019. El Presidente lleva 1177 días en el ejercicio del poder, de modo que hablamos de un mensaje cada dos días, en números redondos.
El día de su asunción como presidente Fernández pronunció su mensaje inaugural en el mismo ámbito que lo hará hoy, frente a la Asamblea legislativa. El de este mediodía será el cuarto y último en el Congreso (nos atenemos al primer mandato; se sabe que todo presidente argentino tiene derecho a una reelección consecutiva). El racconto de la Casa Rosada acaso omita algún discurso perdido, pero la impresión es que ahí están todos. Desde los discursos de las filminas en el encierro de la pandemia, cuando compartía escenario con el jefe de Gobierno porteño y el gobernador de la provincia de Buenos Aires, al promediar 2020, hasta la reciente y extravagante cadena nacional del 22 de febrero en la Antártida. Pasando por sus mensajes en foros internacionales como la Asamblea General de la ONU, visitas al exterior, recepciones internacionales (como olvidar la parábola de los argentinos llegados de los barcos frente al presidente de Gobierno de España); inauguraciones en el interior del país, la estatización fallida de Vicentin y otras dos cadenas: la que anunció su reforma judicial, empantanada en el Congreso como buena parte de la agenda legislativa del oficialismo, y la del repudio al intento de asesinato de la vicepresidenta Cristina Kirchner.
El Presidente está llamado a superar a su antecesor en materia de discursos. Según la misma página, Mauricio Macri dio 664 mensajes en sus cuatro años de mandato. Fernández va con ritmo de fondista a quedarse con el primer lugar. La Casa Rosada solo registra las últimas dos presidencias y no muestra el desempeño de Cristina Kirchner, otra paladina de la palabra, durante sus dos mandatos. Merece otra nota.
A la afición de Fernández por los micrófonos hay que sumar las innumerables entrevistas que concedió a programas de radio, televisión y cable. Algunas memorables, como la que dio días atrás a la radio Urbana Play y en la que reconoció que hay ministros que no le responden, o más atrás en el tiempo, cuando toleró reconvenciones a su gestión por parte de su entrevistador en el sitio El Cohete a la Luna o sus diálogos inclasificables con la conductora Viviana Canosa, en el comienzo de su presidencia.
Párrafo aparte la carta con la que el 1º de enero pasado anunció que pediría el juicio político a los miembros de la Corte Suprema de Justicia, dos de los cuales estarán hoy escuchándolo en el recinto.
¿Qué tiene escrito el Presidente para empezar a despedirse en su último año de mandato? El juicio a la Corte es una iniciativa en trámite en el Congreso que -se descuenta- Fernández defenderá. También la inocencia de su vicepresidenta, condenada en diciembre en primera instancia a seis años de prisión por defraudación al Estado. ¿“Proscripción”?: Fernández no cree que eso sea verdad, como hizo saber su ministro de Seguridad. ¿Reelección?: un término que le es vedado mencionar.
WC