Es el principal acreedor de Correo Argentino SA y su voto es central para determinar si la compañía de la familia Macri se salva o va a la quiebra, según los expedientes y fuentes judiciales y empresariales consultados por elDiarioAR. Es también clave en un expediente por supuesto fraude a los acreedores que enfrenta la empresa en el fuero penal. Se trata del Meinl Bank, un banco austríaco sancionado por maniobras de presunto lavado de dinero e involucrado directamente en el pago de sobornos del caso Odebrecht.
Esta semana, el caso entró en la recta final: Correo presentó los apoyos de una mayoría de acreedores que dieron su conformidad a su última oferta para saldar las deudas de la compañía. Sin embargo, la Procuración del Tesoro, que encabeza Carlos Zannini y representa los intereses del Estado Nacional (acreedor de Correo) rechazó la propuesta y pidió la quiebra de la empresa de los Macri.
El expresidente Mauricio Macri escribió este viernes en su cuenta personal de Twitter que espera que la jueza que interviene en el caso, Marta Cirulli, rechace el pedido del Estado Nacional y evite la quiebra de Correo. Para hacerlo, la magistrada debe homologar los apoyos de los acreedores que prestaron su conformidad para salvar a Correo, entre ellos, el del Meinl Bank.
Estas mayorías que Correo consiguió para evitar la quiebra deben cumplir ciertas normas legales: Correo no puede estar detrás de los acreedores que le prestan su apoyo, no puede ser accionista de esos acreedores o controlada por esos acreedores.
Si las mayorías no cumplen con la ley, la Justicia debe hacer caer el salvataje y decretar la quiebra. Por eso, los Macri se juegan mucho en esta etapa del proceso. La quiebra, además, podría extenderse a Socma y Sideco, principales compañías del grupo.
El presunto fraude a los acreedores es también un frente penal para Correo y los Macri y es parte de la causa que investiga el juez federal Ariel Lijo, confirmó una fuente con acceso directo a ese expediente.
Publicaciones periodísticas y el propio Mariano Macri, hermano del expresidente y uno de los accionistas de Socma (Sociedades Macri), principal empresa de la familia, expusieron ante la Justicia el estrecho vínculo entre el Meinl Bank y los Macri.
¿Por qué un banco austríaco está dispuesto a salvar a una empresa residual de los Macri, cuyas acciones valen cero pesos y cuyas deudas no paga hace más de 20 años? Esa es una de las preguntas que viene planteando la fiscal general Gabriela Boquin en el expediente.
En Correo responden que “la sospecha está fuera de foco” y que “no merece ni cinco segundos de análisis”. “Es un banco extranjero como cualquier otro banco del exterior”, sostienen en la compañía.
Las manchas de Austria
Si bien el Meinl Bank acumula escándalos y acusaciones, en Socma sostienen que sus deudas con el banco son anteriores a esos casos, dijo una fuente de la compañía a este medio.
El banco austríaco está directamente involucrado en el pago de las coimas por parte de la constructora brasileña Odebrecht, un caso que se destapó en 2014. La compañía de Brasil cuyos ejecutivos y sus dueños admitieron el pago de sobornos millonarios a funcionarios de Brasil, América latina y África para obtener contratos de obra pública llegó a adquirir una sucursal del Meinl en Antigua, un paraíso fiscal del Caribe, desde la que administraba los pagos ilegales.
Odebrecht ganó la licitación del soterramiento del ferrocarril Sarmiento como socia de Iecsa, la constructora que fue propiedad de Socma y que quedó luego en manos del primo de Macri, Angelo Calcaterra. Ambas empresas son investigadas en Argentina por el supuesto pago de coimas a exfuncionarios de Cristina Fernández de Kirchner.
Es un banco extranjero como cualquier otro banco del exterior.
En febrero de 2019, ante otras acusaciones por presunto lavado de dinero en Europa del Este y tras el caso Odebrecht y sus implicancias en el Lava Jato brasileño, la Financial Market Authority de Austria (FMA) sancionó al Meinl Bank con una multa de 500.000 euros, según un comunicado del organismo extranjero.
En noviembre de ese mismo año, el Banco Central Europeo (BCE) le revocó la licencia para operar en el viejo continente.
Los Meinl
Luego de la medida tomada por el Banco Central Europeo, el Meinl Bank publicó en su sitio web un comunicado en el que rechazó la decisión del organismo y sostuvo que, antes de la sanción, sus autoridades ya habían decidido retirarse del mundo financiero, según informó Financial Times.
La conformidad del Meinl Bank no es de ahora, es anterior y nunca antes había sido cuestionada.
El banco austríaco era propiedad de la familia Meinl pero sus accionistas, según su reporte anual de 2015 que analizó este medio, eran cuatro sociedades inversoras con sede en Viena. Fue luego absorbido por otro banco, en medio de las denuncias en su contra. elDiarioAR se comunicó vía mail con la entidad que absorbió al Meinl Bank en el extranjero pero al cierre de esta nota no obtuvo respuesta.
En su artículo de 2019, Financial Times informa que los Meinl hicieron su fortuna “como grandes importadores de café durante la era de los Habsburgo, y los blends de Meinl todavía se elaboran y sirven en las distintivas bandejas de plata de los salones urbanos de Viena”.
También inauguraron en 1950 Julius Meinl am Graben, catalogada como la “tienda de alimentos de lujo más conocida de Viena”, vecina a la catedral de San Esteban, en Viena, publicó el medio británico. Es también restaurante, bar y casa de té y café. En su tienda online, pueden adquirirse productos alimenticios de todo tipo, como café de distintas categorías, desde $1.500 hasta $14.300 el medio kilo.
Desembarco en el caso Correo
¿Cómo se convirtió este banco austríaco en el principal acreedor de Correo? El Meinl Bank no es un acreedor original de la empresa de los Macri sino que decidió serlo con posterioridad, cuando adquirió las deudas de Correo con dos entidades internacionales: el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y la Corporación Financiera Internacional (CFI). Estos dos organismos de crédito, a los que Correo debía cientos de millones de pesos, cedieron sus créditos con la compañía al Meinl Bank, algo que quedó ratificado en el expediente, según confirmaron fuentes judiciales a este medio.
Entre ambos créditos el banco austríaco absorbió más de $374 millones (sin intereses) que ahora Correo le debe al Meinl Bank. A cambio, esos organismos internacionales cobraron un reducido porcentaje de la deuda que tenían con Correo en ese momento y que debido al prolongado concurso de acreedores no podían cobrar.
El Meinl Bank ha votado en forma contraria a su interés como acreedor, por lo que su decisión, equivale a la renuncia al cobro de su crédito.
El Estado Nacional tiene una acreencia original de casi $300 millones (sin intereses), equivalente al 30,5% de la deuda de su categoría.
Qué fin podía perseguir un banco absorbiendo deudas ajenas que no puede cobrar desde hace once años es algo que no está claro en el expediente, según planteó en varios de sus dictámenes la fiscal Boquin. “Eso habría que preguntárselo al banco”, respondieron en Correo ante la consulta de este medio. “La conformidad del Meinl Bank no es de ahora, es anterior y nunca antes había sido cuestionada”, agregó una fuente de la compañía de los Macri.
El Meinl Bank “ha votado en forma contraria a su interés como acreedor, por lo que su decisión, equivale a la renuncia al cobro de su crédito”, dictaminó el fiscal Boquin en la causa.
El fraude consistía en poner a un banco austríaco como testaferro, el banco Meinl, y nosotros quedar como accionistas ocultos a través de fundaciones en Luxemburgo y como dueños de unas sociedades en Panamá.
“Las cesiones de los créditos del BID y la CFI han sido aprobadas por los comités de esos organismos y los contratos de cesión con el banco fueron firmados en Washington. Luego, el Meinl Bank solicitó a Correo un incremento de garantías y la compañía se los concedió”, respondió una fuente de la empresa, que rechazó cualquier irregularidad en los apoyos de los acreedores y el rol del banco austríaco.
La versión de Mariano Macri
Los vínculos del banco austríaco con la familia del expresidente van más allá de la relación con Correo. En 2005, el Meinl Bank absorbió una deuda de más de $109 millones (unos US$20 millones en ese momento) que la principal empresa del Grupo Macri, Socma (Sociedades Macri), tenía con la Corporación Financiera Internacional (CFI). La operación del Meinl Bank consta en un acta de Socma fechada el 24 de enero de 2011, según publicó el portal Nuestras Voces. Socma es además accionista de Correo y de Sideco (la constructora de la familia).
Mariano Macri, accionista de Socma y hermano del expresidente, aseguró en una entrevista al periodista Santiago O’Donnell para su libro Hermano que en 2012, Socma intentó ceder el 60% de sus acciones en Sideco al banco austríaco para saldar aquella deuda contraída años antes por Socma.
En 2013, Mariano Macri se opuso a que la compañía de su familia ceda Sideco al Meinl Bank e impugnó en la Justicia la asamblea en la que se había votado la cesión. Según el menor de los varones Macri, su impugnación se debió a que no tuvo acceso a la documentación que necesitaba para evaluar la propuesta del banco y, según registró O’Donnell, Mariano Macri calificó esa operación como un “fraude”, una supuesta “venta simulada” con un objetivo “oculto”: evitar el pago de una deuda de Socma con un banco de Brasil: el Banco de Desarrollo Nacional de Desarrollo Económico y Social (BNDES).
“El fraude consistía en poner a un banco austríaco como testaferro, el banco Meinl, y nosotros quedar como accionistas ocultos a través de fundaciones en Luxemburgo y como dueños de unas sociedades en Panamá”, contó Mariano Macri a O’Donnell.
“Me propusieron vaciar la empresa”, dijo, con el objetivo de evitar que el brasileño BNDES pudiera cobrar un crédito que tenía con Socma. Luego, dijo, el Meinl Bank quedaría como el dueño controlante de Sideco “para presentarse en todas las licitaciones que tuvieran por delante”.
Sobre las aseveraciones de Mariano Macri, en Correo afirmaron a elDiarioAR: “Son habladurías, él se ha desdicho muchas veces de sus dichos”.
Se han manipulado las mayorías en perjuicio de los acreedores.
Mariano Macri llevó el conflicto con su familia a la Justicia comercial y pidió una medida cautelar para frenar la cesión de las acciones de Sideco al banco austríaco. Sin embargo, en diciembre de 2013, Socma comunicó al juzgado interviniente que la cesión del 60% de las acciones de Sideco no se llevó adelante, según sostuvo O’Donnell en base a la documentación de la causa judicial.
Ante la consulta de elDiarioAR, otras fuentes directas de Socma y Sideco negaron tajantemente que el Meinl Bank sea accionista de las compañías y socio de los Macri. “La única relación es por acreencias con el banco”, sostuvieron.
Mayorías en la mira
La fiscal Boquin advirtió por primera vez las sospechas sobre la supuesta manipulación de las mayorías en diciembre de 2016, en su primer dictamen (que se daría a conocer en febrero de 2017). En el escrito, Boquin sostuvo: “Se han manipulado las mayorías en perjuicio de los acreedores” para que estos “queden sometidos a una mayoría ficticia” y “a la pérdida sustancial de sus derechos”.
En 2017, la fiscal advirtió en otro dictamen sobre el rol del Meinl Bank en el concurso de Correo. Aunque no es el único acreedor observado: la fiscal confirmó en 2019 que los representantes de los Macri habían comprado las deudas de varios acreedores a través de abogados y miembros del directorio de Correo. Uno de los estudios es el que codirigía entonces el actual diputado Pablo Tonelli, aliado político de Macri, según consta en el expediente. Correo rechaza las acusaciones sobre un presunto fraude a través de la manipulación de mayorías.
La interventora judicial en la compañía y el perito contable de la Corte Suprema también buscan saber más sobre esta relación y solicitaron acceso a los documentos en los que Correo y el Meinl Bank acordaron condiciones de la deuda luego de la cesión, confirmó una fuente judicial con acceso directo al expediente.
*Este artículo fue modificado el 11 de abril de 2021 para corregir una referencia a la categoría que integra el Meinl Bank en el concurso de acreedores. Los acreedores están divididos en categorías. El 17 de abril se actualizó y aclaró información sobre la deuda de Socma con el Meinl Bank y se corrigió la fecha de la ratificación de dicha operación en el expediente de Correo, gracias al acceso a documentos que constan en la causa.
ED