La Cámara baja volvió a reunirse hoy en sesión pasadas las 14 tras el cuarto intermedio al que se pasó el viernes, luego de que la ley ómnibus se aprobara en general. Comenzará la votación en particular, artículo por artículo, lo que es necesario para obtener la media sanción de Diputados y que la norma continúe su proceso de discusión en el Senado. Sin embargo, las negociaciones continúan abiertas; persisten las diferencias entre el oficialismo y bloques opositores “dialoguistas” sobre facultades delegadas, deuda externa, Fondo de Garantía de Sustentabilidad y privatizaciones de empresas públicas.
Mientras en las afueras del Congreso se esperan manifestaciones y se reforzó el operativo de seguridad, los diputados comenzaron a ingresar, pasadas las 10, al Palacio Legislativo, para reiniciar las conversaciones con la meta de comenzar a las 14 la sesión con algunos puntos consensuados.
En ese marco, las bancadas de La Libertad Avanza se reunieron con el presidente del bloque, Oscar Zago, quien también tuvo encuentros con el resto de los espacios llamados dialoguistas con el objetivo de que la discusión en particular de cada artículo pueda avanzar. La aprobación en general fue 144 votos positivos contra 109 negativos. Alcanza con que se sumen 20 voluntades negativas para complicar seriamente el escenario para el Gobierno.
Poco antes de la sesión, el ministro de Interior, Guillermo Francos, se reunió con Martín Menem y los jefes de bloque aliados (PRO, la UCR y Hacemos Coalición Federal) para intentar sumar apoyos. También hubo una reunión virtual de los gobernadores de JxC con sus espadas legislativas.
Por otro lado se reunieron los diputados Miguel Pichetto, Florencio Randazzo y Nicolás Massot, de Hacemos, Coalición Federal e Innovación, para persistir con la meta de llegar a acuerdos previos a la sesión.
La intención de algunos diputados era iniciar la sesión a las 14 -presidida por Martín Menem-, pasar a otro cuatro intermedio a la medianoche y retomar mañana para repetir esa estrategia, aunque no descartan seguir otro día más si no agotan las instancias de acuerdos.
Una jornada larga y con suspenso
Autoridades parlamentarias anticiparon que si bien esta tarde “comenzará el tratamiento” del proyecto, el trámite “va a ser largo” y “puede extenderse hasta mañana y el jueves”, ya que se tratará de un extenso debate que demandaría otras tres jornadas de discusión, como las que se necesitaron para sancionar el dictamen en general.
La Cámara de Diputados aprobó el viernes en general, por 144 a 109 votos, el dictamen de mayoría con los cambios acordados entre las bancadas de la Libertad Avanza (LLA), la UCR, PRO, pero debió pasar a cuarto intermedio hasta este martes para poder consensuar las discrepancias sobre algunos puntos de esa norma.
El oficialismo necesita alcanzar un acuerdo con las bancadas que apoyaron en la aprobación del proyecto para votar en particular los 383 artículos del dictamen, ya que si una veintena de esos legisladores votan en contra y sumados a los 109 que ya rechazaron la iniciativa pueden caer artículos promovidos por el Gobierno nacional.
Los bloques dialoguistas están de acuerdo en votar a favor la declaración de emergencia que quedó limitada a seis materias -administrativa, económica, financiera, de seguridad, tarifaria y energética- y sobre biocombustibles y los entes referidos a la cultura.
En cambio, una decena de diputados no quieren votar artículos sobre facultades delegadas referidos a las facultades administrativas que permite disolver o suprimir organismos públicos, con excepción de las Universidades Nacionales, e intervenir todos los entes o empresas públicas y las que están vinculados a los fondos fiduciarios provinciales.
Los legisladores que no quieren votar facultades delegadas son cuatro de Córdoba, los seis de la Coalición Cívica, con lo cual sumados a los 109 que rechazaron la ley Bases y están dispuestos a votar en contra de todos los artículos, el oficialismo tiene los votos muy justos para imponer su postura, reconocieron fuentes parlamentarias.
Uno de los puntos donde hay más acuerdo es en el capítulo de privatizaciones de empresas públicas aunque aún faltan pulir algunos artículos sobre el control de esos procesos de venta de esas compañías y la evaluación patrimonial de las mismas.
Los legisladores señalan que hay un principio de acuerdo en este punto, pero tanto la UCR como Hacemos se oponen a las privatizaciones del Banco Nación, Nucleoeléctrica y de Arsat donde se proponen ventas parciales, y piden que un organismo independiente haga su tasación y tenga un rol importante la Comisión Bicameral en oportunidad de su publicación.
Con información de la agencia Télam
CRM/DTC