“¿Perdimos 20 mil millones de dólares por la guerra de Ucrania y sabés que recibimos de EEUU? Solo mensajes de WhatsApp”. Descarnada, la frase intenta una respuesta sobre un interrogante recurrente sobre el gobierno de Alberto Fernández, y ese frágil equilibrio entre las potencias, un mapa que por momentos parece expresar el ajedrez interno del FdT.
La respuesta de los mensajes de WhastApp aparece cuando se pregunta hasta qué punto una relación más intensa y profunda con China puede generar tensiones con EEUU. Por lo pronto, por cierto azar del calendario, este martes en Bali, Indonesia, Fernández se verá, en el lapso de dos horas, con Joe Biden y con Xi Jinping.
Todo en el marco del G20, cumbre que comienza este lunes en Bali, adonde llegó a media tarde el presidente argentino acompañado por el ministro de Economía Sergio Massa, el canciller Santiago Cafiero, el secretario General de la Presidencia Julio Vitobello y la portavoz Gabriela Cerruti. Fabiola Yáñez, la primera dama, viajó a Roma donde participará de una serie de actividades organizadas por el Vaticano.
Tras un vuelo de más de 15 horas, Fernández llegó a las 16.37, hora de Bali, desde París, donde participó, invitado por Emmanuel Macron, del Foro de la Paz. Con el mandatario francés volverá a verse este lunes por la noche mientras que, desde el martes, iniciará una ronda de plenarios y reuniones, entre las que estarán la bilateral con Xi Jinpgin, la actividad con Biden y un encuentro con Kristalina Georgieva, la titular del FMI. Podría, además, sumar otras bilaterales como con el canciller alemán Olaf Scholz y algunos otros mandatarios.
Geopolítica del FdT
Es una simplificación, pero no es del todo inexacta. Es habitual mirar la geopolítica del Frente de Todos (FdT) según un mapa donde Fernández tiene más empatía con Europa, Massa con EEUU y Cristina Kirchner tiene preferencias con China, y, al menos hasta la guerra de Ucrania, con Rusia.
Aunque forma parte del G20, Vladimir Putin no estará en Bali como no estuvo, en 2021, en Roma. En general, tanto Rusia como China tratan de sacarle protagonismo al G20 porque es un foro donde se impone, según su criterio, la mirada occidental. En esta ocasión, por hacerse en Indonesia, zona de influencia de China, se confirmó la presencia de Xi.
Fernández protagonizará, solo por azar de las agendas, una particularidad: a las 15:30 participará de una actividad con Biden y dos horas más tarde, tendrá una bilateral con el presidente chino. Son dos agendas ajenas pero que tienen, en el fondo, el mismo eje: la influencia de las potencias sobre los países en vías de desarrollo.
Lo de Biden, de hecho, girará en torno a plan de inversión global que EEUU propuso para desplegar post pandemia. Se trata de un fondo de 6500 millones de dólares que, sin embargo, todavía no se ejecutó. A Argentina podrían corresponderle unos 400 millones. Biden viene, en paralelo, fortalecido tras una elección en EEUU donde no se produjo lo que se esperaba: una paliza de los republicanos.
¿Cómo impacta eso en Argentina? En el gobierno dice que no es sustancial, que la lógica de influencia de EEUU tiene que ver más con disputas internas dentro de los partidos que si ganan demócratas o republicanos.
El martes, también, Fernández se reunirá con Xi Jinping con una agenda vinculada a cuestiones esencialmente económicas y el miércoles se verá con Georgieva con una serie de planteos sobre el acuerdo que Argentina tiene con el FMI. En paralelo, además de otras reuniones, Fernández disertará en los tres plenarios del G20.
PI