En una multitudinaria marcha por su hija, Gloria Romero, la madre de Cecilia Strzyzowski, la joven desaparecida desde el 1° de junio en Resistencia, afirmó esta tarde que quiere “justicia” y no “venganza”, y pidió terminar con la “impunidad” de los que tienen un “poder desmedido” al referirse a los integrantes de la familia Sena detenidos por el caso.
“Te borraron como si tu vida no valiera nada, pero vas a quedar en la memoria de cada argentino y si es posible del mundo. Te juro que voy a lograr que seas un símbolo de justicia”, había publicado la mujer en su Instagram apenas unas horas antes del inicio de la concentración. El mensaje estaba acompañado con un video de la joven.
Al llegar a la plaza, con una rosa en una mano y un micrófono en la otra, Gloria fue recibida con aplausos frente a la pantalla gigante dispuesta en el centro de la plaza 25 de Mayo, en la capital chaqueña, y luego habló a los presentes concentrados en 9 de Julio y Frondizi. Los manifestantes habían comenzado a reunirse a las 16.30 y portaron globos rosas y pancartas del mismo color.
“Sabemos que la justicia acá no es independiente, que deja mucho que desear, y pasa en todo el país (...) Tenemos que terminar con la impunidad, con el poder desmedido que tienen algunos”, dijo la mujer, al tiempo que un grupo de manifestantes desenrollaba una larga bandera argentina con la inscripción “Cecilia” y una imagen de ella.
Los manifestantes exhibieron varios carteles con distintas leyendas como por ejemplo: “Callaron a Cecilia, por ella y todas las víctimas salimos a gritar basta de corruptos, basta de violentos”, “¿Dónde está Cecilia?”, “No estamos solas, falta Cecilia” y “Al Chaco le falta Cecilia”.
“Yo soy una vecina más (...) Yo quiero justicia, no quiero venganza”, afirmó Gloria, mientras en la pantalla proyectaron fotos de su hija.
A su vez, la madre le cedió el espacio a distintos familiares de víctimas de femicidios, siniestros viales, homicidios, abusos sexuales y personas desaparecidas. “Hay que hablar, hay que hablar, yo sé que duele”, le dijo, por su parte, Gloria a una de las mujeres que habló por uno de los micrófonos y que pidió “que haya Justicia”, mientras que una joven con la voz entrecortada aseguró: “Tengo 17 años y me da miedo de salir a la calle”, por lo cual Gloria se mostró indignada.
Tras varios testimonios emotivos, los organizadores exhibieron un video con fotos de Cecilia mientras de fondo sonó una versión adaptada de “Canción sin miedo”. Al pasar las imágenes, Gloria no pudo contenerse y expresó entre lágrimas: “Ella era Cecilia, siempre haciendo payasadas.”
“¿Qué tenía de malo mi hija para que estos hijos de puta me la maten?”, se preguntó mientras siguió llorando para luego saludar a la pantalla que mostraba sus fotos al decir “hola mi loquita, hola mi amor”.
Tras ello, una artista local cantó una canción que compuso para Cecilia y su mamá, quien luego convocó a los alrededor de 3 mil manifestantes a dar una vuelta a la plaza. Durante el recorrido, Gloria respondió los saludos con besos y abrazos al encabezar la movilización en la que desplegaron una larga bandera argentina con el nombre de “Cecilia” y su imagen.
La mujer llevó una bandera que decía “Ni una menos” y que tenía anudado un globo rosa con un pequeño cartel que decía “Justicia por Cecilia”. “Sin banderas políticas, la única es la de ni una menos”, aseguró la madre de la víctima al caminar en compañía de Mercedes, la tía abuela de la joven.
“Basta de impunidad”, gritaron los manifestantes y al llegar a la altura de la Casa de Gobierno provincial iniciaron cánticos contra el gobernador Jorge Capitanich. En un momento, Gloria se desprendió de la multitud que cantaba “el pueblo unido jamás será vencido” y colgó en una de las rejas de la gobernación el globo rosa que llevaba atado a la bandera.
Tras regresar al punto de partida, Gloria y Mercedes se sentaron para ver un show de circo. “Esto tiene que terminar, basta de impunidad”, concluyó la mujer que se retiró como llegó, con saludos y abrazos de las personas que se acercaron a darle “fuerza”.
En las últimas horas, Gendarmería Nacional comenzó a custodiar tres viviendas pertenecientes a la familia de Strzyzowski después de que sus integrantes recibieran amenazas.
“Me siento un poco más tranquila, como verán mi cara cambió porque me pusieron un móvil en la puerta de mi casa y hacía días que no dormía, porque con mi hija estábamos alerta”, expresó la mujer al respecto. Por la desaparición de Cecilia está detenido su esposo, César Sena, y los padres del mismo, el dirigente piquetero Emereciano Sena y Marcela Acuña.
MB con información de agencias