Luego de haber negado la existencia de la crisis climática y prometido cerrar el Ministerio de Ambiente, el gobierno entrante de Javier Milei enviará una representante a la conferencia de cambio climático de Naciones Unidas COP28 en Dubai, Emiratos Árabes. La conferencia finalizará el 12 de diciembre, dos días después de la asunción presidencial.
Marcia Levaggi, actual embajadora de Argentina en Senegal, será nombrada secretaria de Política Exterior por Milei y tomará el lugar de jefa de la delegación de Argentina en la COP28. Levaggi es una funcionaria de carrera con una trayectoria en temas ambientales. Durante el gobierno de Mauricio Macri, fue la directora de asuntos ambientales en Cancillería.
La COP, la conferencia anual de la ONU de cambio climático, ahora en su 28 edición, reúne a 198 países con el objetivo de avanzar en políticas para enfrentar la crisis climática. El rol de los combustibles fósiles está en el centro del debate, con la expectativa de un acuerdo en el cierre de la conferencia para la transición a las energías renovables.
Argentina participa de la conferencia de cambio climático con representantes del gobierno saliente de Alberto Fernández, encabezada por la secretaria de Cambio Climático Cecilia Nicolini. Además, participan representantes de empresas, especialmente de energía, gobiernos provinciales y organizaciones sociales y ambientales.
No es la primera vez que Argentina cambia su delegación en el medio de una conferencia del clima. En diciembre de 2015, luego de la asunción de Macri, Juan Carlos Villalonga, ex director de Greenpeace, quien luego sería diputado, fue enviado por Macri para encabezar la delegación. Allí, mostró disidencias con el gobierno saliente de Cristina Fernández.
“Fue una transición disruptiva, había que serlo ya que en ese entonces Argentina negociaba en la COP con países como Venezuela, Bolivia e Irán, un grupo con posiciones complicadas en ambiente. Posteriormente Argentina se fue acercando a Brasil y Uruguay y eso no creo que cambie con Milei,” afirmó Villalonga desde la COP28.
Cecilia Nicolini sostuvo que no hay un equipo de transición para el área de ambiente, algo que sí existe para otras áreas de gobierno, como economía. Sin embargo, admite contactos a nivel de cancillería para la COP28, lo que explica la próxima llegada de Levaggi a Dubái. “Estaban mas o menos de acuerdo en seguir nuestra línea de trabajo,” agregó.
A pesar de ello, la posición negacionista de Milei sobre el cambio climático genera preocupación y nervios entre los argentinos en la conferencia. El equipo técnico no sabe qué pasará con sus trabajos al regresar a Buenos Aires y las organizaciones de la sociedad civil están preocupadas por el futuro de la política climática luego de la conferencia.
“No creo que la comunidad internacional los deje salir del Acuerdo de París,” sostuvo una delegada de Argentina que pidió no ser identificada, en relación al acuerdo internacional firmado en 2015 en la COP21 para limitar la suba de la temperatura. El antecedente más directo es la salida de Estados Unidos del acuerdo durante el gobierno de Trump.
El hecho de que la crisis climática haya llegado a la agenda internacional de todos los gobiernos puede actuar como un freno al negacionismo climático de Milei, sostienen los argentinos que participan en la conferencia
El hecho de que la crisis climática haya llegado a la agenda internacional de todos los gobiernos puede actuar como un freno al negacionismo climático de Milei, sostienen los argentinos que participan en la conferencia. Además, rechazar la acción climática también le jugaría en contra al gobierno ya que significaría un freno al financiamiento climático.
Argentina debe reducir sus emisiones de gases de efecto invernadero y adaptarse a los efectos ya visibles de la crisis climática y para ello accede a financiamiento internacional. En Brasil, cuando el expresidente Jair Bolsonaro redujo significativamente la acción climática, el gobierno dejó de acceder a gran parte del financiamiento para el Amazonas.
Además, reducir emisiones también puede ser una oportunidad económica para algunos sectores, como las renovables, un argumento que los argentinos en la COP esperan sirva para que Milei revea su postura. “Argentina es uno de los países con más cantidad y mejor calidad de recursos renovables”, Martín Dapelo, consultor en renovables, sostuvo desde la conferencia.
En la COP28, el presidente de Francia Emmanuel Macron le pidió a Milei que “se sume en lo que respecta a las cuestiones climáticas, porque verá que esto también es bueno para su país”. Susana Muhamad, ministra de Ambiente de Colombia, también dijo estar preocupada por el negacionismo climático, el cual tiene “atado una tendencia autoritaria.”
Apenas se conoció su triunfo electoral, el embajador de los Estados Unidos, Marc Stanley, también dejó en claro que para su gobierno la lucha contra el cambio climático es una prioridad.
Argentina en la COP y el rol de Macri
En la misma semana que se desarrollaba la conferencia climática en Emiratos Árabes, el ex presidente Macri estuvo en Abu Dabi reunido con Sheik Mohamed bin Zayed Al Nahyan, presidente de los Emiratos Árabes. Macri publicó en sus redes sociales que compartió con el presidente miradas sobre problemas globales, entre ellos, el cambio climático.
La evidente injerencia de Macri en el armado del gobierno de Milei podría ser un elemento que frene las posiciones negacionistas del nuevo presidente, coinciden los argentinos en la COP28. “Macri estuvo sumamente involucrado con clima en su gobierno y ahora está en todos lados en el gabinete de Milei,” sostuvo un especialista en clima de Argentina, que pidió no ser identificado.
Un grupo de ex secretarios de Cambio Climático durante los gobiernos de Cristina Kirchner y Mauricio Macri, Diego Moreno, Carlos Gentile, Pilar Bueno Rubial, Rodrigo Rodríguez Tornquist y Cecilia Nicolini, publicaron esta semana una carta donde pidieron que el clima continúe siendo una política de estado “para el beneficio de los habitantes”.
“La continuidad y coherencia en estas políticas es un activo nacional. Incumplirlas nos posicionaría dentro de un minoritario grupo de erráticos países negacionistas, con relevantes consecuencias para el desarrollo nacional”, se lee en la carta. “Esta política de Estado se ha mantenido en el tiempo, independientemente del color partidario”.
Para María Inés Zigaran, ministra de Ambiente de Jujuy, y Gervasio Malagrida, ministro de Ambiente de Misiones, ambos en Dubái, un posible desmantelamiento de políticas públicas climáticas con Milei podría ser compensado en parte por el accionar de las provincias. De todos modos, ambos esperan que Milei revea o por lo menos modere sus posturas.
“Yo abogo para que el presidente se pueda sentar con las provincias y escuchar la mirada que tenemos de la crisis climática, que es un tema más allá de pertenencias políticas,” afirmó Zigaran. “No me puedo imaginar un gobierno que no tenga una política climática. De ocurrir sería regresivo y disruptivo. Espero lograr una relación racional con ellos.”
En la COP28, Argentina firmó una declaración voluntaria para triplicar las fuentes de energía renovable y duplicar la eficiencia energética. Además, reclamó por mayor financiamiento para la acción climática, incluyendo el canje de deuda, y evitó firmar una declaración para reducir las emisiones de agricultura y ganadería.
La conferencia finalizará el 12 de diciembre, con un escenario de conflicto abierto entre los países sobre el futuro del sector energético, el mayor contaminante a nivel global. De incluir una mención a la transición de los combustibles fósiles en el texto final, algo que hasta ahora nunca ha ocurrido en las COP, Argentina tendrá mucho trabajo por delante, considerando los planes para expandir Vaca Muerta.
“La agenda climática a futuro tiene que estar marcada por un cese de la exploración y explotación de combustibles fósiles y honrar los compromisos climáticos internacionales asumidos por el país,” sostuvo María Laura Castillo Díaz del área de Política Ambiental de la Fundación Ambiente y Recursos Naturales (FARN), presente en Dubái.