“Ahora me doy cuenta: realmente nunca me comprometí con Laura. Siempre tenía un pie afuera y eso me hacía dejar de lado muchas cosas, como pensar en mi futuro. Tal vez porque creía que tenía más sentido no comprometerme con nada y mantener abiertas mis opciones. Y eso… es un suicidio en pequeñas porciones”, dice mirando a cámara Rob/John Cusack. Llueve sin piedad, está empapado. Acaba de escaparse (ese es un poco su asunto: no parar de huir) del funeral del padre de Laura, su ex. O la chica por la que está con el corazón en la mano desde las primeras escenas de Alta fidelidad. Suena Bob Dylan, con su Most of The Time rasposo.
Con el agua cayendo por todos lados él espera, sentado en una especie de banco de plaza, un colectivo que no va a llegar (otro de sus asuntos: ¿qué esperar? ¿dónde?). Hasta que entran en plano las luces de un auto. Al volante va Laura (ese es un poco su asunto: creer que maneja, que lleva algún tipo de rienda), que también se escapó del funeral de su padre (otro de sus asuntos, a esta altura universales: pensar que hay huida posible en el duelo). La fuga después de la fuga: Rob pretende esconderse detrás del banco, se cae, después se sube a un cerco de madera, se resbala por el barro y queda tendido en el piso.
Laura abre la ventanilla y le grita: “¿Vas a quedarte tirado ahí toda la noche?”. Él responde que no mientras sigue diluviando. Rob finalmente se sube al auto de Laura (más asuntos de los dos y de todos: el amor y ese viaje siempre incierto, un te llevo para que me lleves que no puede ofrecer más que inestabilidad o el acto de fe de hacer rodar una máquina entre dos en medio de una tempestad).
Ella maneja hasta un lugar especial de su infancia (otro asunto compartido: ir hacia ahí cada vez, o mejor, volver a eso que llamamos infancia). Después, una escena conocida y hermosa: los cuerpos, el sexo, las ganas de ella de “sentir algo que no sea tristeza”. Las gotas estallan sobre los vidrios del auto y el agua recién va a frenar cuando vuelvan a la casa familiar. El funeral a esta altura terminó y entonces ella dispara algo así como “Estoy muy cansada de no estar con vos”.
Una tormenta salvaje y perfecta me desveló por estos días. Tengo varias escenas favoritas de películas con mucha lluvia de fondo: ya hablamos por acá de Los paraguas de Cherburgo (está en Mubi) y podría mencionar también el final a puro silencio, lágrimas y ojos de Los puentes de Madison (está en HBO Max). Pero siempre que me quedo mirando por la ventana un diluvio vuelvo especialmente a esas imágenes de Alta fidelidad (está en Star+), a John Cusack en su banquito, a ese viaje mínimo en auto con Laura. Y me subo con ellos.
Empieza una nueva edición de Mil lianas. Pasada por agua esta vez.
1. Periodistas en el cine. Un buscador, una selección en manos de expertos, un menú para cinéfilos y no tanto, un repaso histórico, un punto de partida. Todo esto propone el flamante sitio Periodistas en el cine, lanzado en estos días por Federico Poore y Manuel Barrientos. “El cine se interesó siempre por el periodismo. Desde Charles Chaplin, Katharine Hepburn, James Stewart, Orson Welles y Marcello Mastroianni hasta Meryl Streep, Nicole Kidman, Robert Downey Jr y Léa Seydoux, han sido muchas las estrellas del cine que interpretaron a periodistas o magnates de los medios de comunicación”, señalan y de inmediato se preguntan: “¿Por qué la industria cinematográfica pone a jugar a sus mejores figuras en la construcción de una mirada sobre el rol que ocupan la prensa y los medios de comunicación? ¿Qué tipo de periodista construye el cine en cada etapa histórica? ¿Qué papel le asignan las sociedades al periodismo y cuál es la contribución del cine en la construcción de esos imaginarios?”.
Para intentar dar respuestas, Poore y Barrientos, periodistas los dos, cinéfilos e interesados en las formas de representación de su oficio (de hecho, ambos en sus tesis académicas abordaron el tema desde diferentes ángulos) proponen en este lugar una selección de 150 largometrajes y una base de datos de más de tres mil con películas “donde algunos de los mejores directores y guionistas de la historia tomaron al periodismo como uno de sus temas centrales y convirtieron a sus protagonistas en héroes o villanos”. Un trabajo espectacular, riguroso y lleno de sorpresas, donde además de la lista ofrecen reseñas, datos técnicos y curiosidades de las películas elegidas.
El sitio Periodistas en el cine se puede visitar por acá. La selección con las 150 películas más destacadas, por acá.
2. Cartas a Gwen John, de Celia Paul. La artista plástica británica Celia Paul ya había impactado en 2021, cuando la editorial argentina Chai publicó su libro Autorretrato, donde recuperaba textos de algunos de sus diarios íntimos, correspondencia y hasta poesía, además de sus obras de arte, para relatar parte de su vida. En especial, intentaba desentrañar con palabras su vínculo con Lucian Freud, considerado como uno de los artistas figurativos más importantes del arte contemporáneo y con quien vivió una historia apasionada y turbulenta.
Ahora, la pintora vuelve a la carga pero mediante un mecanismo muy atractivo: le escribe cartas a la artista galesa Gwen John. Una mujer que nació en otro siglo y que está muerta cuando Paul escribe sus textos. Una mujer, sin embargo, con la que ella siente una conexión especial porque sus vidas tienen muchos puntos en común (entre otras cosas, las dos tuvieron romances intensos con artistas más grandes y más reconocidos que ellas; en el caso de John su vínculo fue con Rodin).
Lo que ofrece entonces en su nueva publicación, que lleva como título Cartas a Gwen John (Chai Editora, 2023) es una correspondencia en la que Celia Paul hace otra vez un repaso por su vida y su obra, pero en este caso para ponerlas a dialogar con las de su colega. Así logra un relato encantador que es al mismo tiempo autobiografía y retrato. Un espejo donde no faltan las confesiones, los sueños, las derrotas y las fantasías para una conversación de amigas imaginarias y al mismo tiempo auténticas.
Cartas a Gwen John, de Celia Paul con traducción de Esther Cross, salió por Chai Editora.
3. Series que se vienen. Varias noticias por estos días en esa avenida anchísima y diversa que vamos a nombrar rápido por acá como el universo de las series. Por un lado, dos de las que sigo especialmente llegan a su fin por estos días: Barry (¿alguien me puede contar qué va a pasar con todo este despliegue de futuro e inquietud que está mostrando en los últimos episodios?) y Succession (¿cómo van a lograr cerrar esta historia de negociaciones en loop?) terminan ya, el 28 de mayo. A la vez, por estos días los guionistas estadounidenses de buena parte de los programas más populares están llevando adelante una huelga y distintas manifestaciones para reclamar mejores condiciones laborales.
Por último, y pese a esas medidas de fuerza, las plataformas y cadenas empezaron poco a poco a programar el regreso de series que habían sido anunciadas para 2023 y que son muy esperadas.
En esta nota armé un repaso por algunas de ellas, con las fechas, detalles de las nuevas temporadas y lo que se sabe hasta ahora de sus protagonistas.
El repaso por algunas de las series que confirmaron su regreso para los próximos meses se puede leer por acá.
Apostilla. Hace unas semanas comentamos por acá el documental El juicio, de Ulises de la Orden. Un trabajo impactante sobre el Juicio a las Juntas, del que pueden leer más por acá. La película, además de proyectarse todas las semanas en el auditorio del Malba, desde hace unos días se puede alquilar para ver también en la plataforma Kinoa TV. Por acá les dejo el enlace.
Banda sonora. Un combo de novedades esta vez. Por un lado, me alegró enterarme hace poquito de que Blur tendrá un disco nuevo: sale en julio, se llama The Ballad of Darren y es el primer material de estudio del grupo en ocho años. Con el anuncio, también dieron a conocer también el primer single, que se llama The Narcissist y se suma a nuestra banda sonora compartida.
También elegí esta semana una canción de lo nuevo de Dani Umpi y el adelanto del próximo trabajo de Emmanuel Horvilleur, un tema pegadizo y bailable que se llama Yo Soy la Disco.
Por último, Lana del Rey compartió hace unos días esta canción y desde que salió estuvo sonando mucho en casa, así que la sumo también.
Cuando estaba por cerrar esta entrega, la triste noticia de la muerte de Tina Turner me paralizó. Algunas canciones con su voz infinita se suman también a esta banda sonora como agradecimiento eterno. Para recordarla, también, no olviden que HBO Max tiene el documental Tina, donde ella misma repasa su vida a través de las décadas, con imágenes increíbles de archivo.
Bonus track. Se acaban de difundir los resultados preliminares de una encuesta que se realiza desde el Ministerio de Cultura de la Nación cada cuatro años en la Argentina para analizar hábitos culturales en el país. Si tienen ganas de chusmear un poco (hay datos realmente curiosos), por acá armé algunos apuntes sobre este estudio, que me pareció muy interesante, con información sobre qué leemos, qué miramos y qué escuchamos, entre otros consumos vinculados con la cultura y sus aledaños.
Bonus track 2. Imagino que varios estarán transitando por estas horas un fin de semana largo. Si andan buscando qué ver en plataformas o tienen ganas de ponerse al día con algo que les quedó pendiente, comparto algunas listas que fui armando con series o películas. Tal vez pueden servirles de referencia o inspiración: 19 películas de la última edición de los Oscar para ver por streaming, dónde ver las adaptaciones audiovisuales de los libros de Elena Ferrante y ocho grandes documentales de 2022.
¡Hasta la próxima!
AL/MG
Mil lianas también se puede leer como newsletter. Para recibirlo por correo electrónico cada viernes pueden suscribirse por acá.